Por Maria Renee Barillas y Rafael Romo
(CNN) — Loyda Rodríguez dice que todavía recuerda el día que su hija fue robada. Lo que comenzó como una simple caminata a casa después de hacer unas compras hace más de cinco años se convirtió en una pesadilla, dice.
“El 3 de noviembre de 2006 fue cuando robaron a mi hija”, dijo este jueves a CNN. “Había ido a hacer unas compras. Cuando volví, no me di cuenta de que una mujer me seguía. Cuando entré en mi casa, mi hija se quedó en el patio, y fue entonces cuando se la llevaron”.
Ahora, la niña de siete años está en el centro de una disputa internacional por su custodia. Tiene dos identidades, en dos países, con dos parejas de padres que la reclaman.
En Missouri, la llaman Karen. En Guatemala, se le conoce como Anyeli.
Las autoridades guatemaltecas dicen que Anyeli fue arrebatada de Rodríguez y vendida a una agencia adoptiva internacional.
El año pasado, un juez de Guatemala dictaminó que la niña pertenecía a Rodríguez y no a sus padres adoptivos norteamericanos.
El gobierno de Guatemala suspendió las adopciones en el 2007, después de que las autoridades encontraron varios casos de falsificación de certificados de nacimiento y papeleo, así como supuestos robos de bebés.
Esta semana, el Departamento de Estado de Estados Unidos intervino en el caso de la niña de 7 años y afirmó que una corte estatal estadounidense tendría que decidir si debe regresar a Guatemala, porque cuando ocurrió el incidente, los dos países aún no habían firmado un tratado internacional sobre niños secuestrados.
“Nuestra opinión es que, en ese momento, esta parecía ser una adopción legítima. Así que de nuevo, nuestro curso de acción preferido sería para cualquier reclamación se realicen en los tribunales estatales de Estados Unidos”, dijo la portavoz del Departamento de Estado, Victoria Nuland.
Rodríguez dijo estar devastada por la noticia.
“Me siento muy triste, y yo todavía estoy sufriendo, porque yo tenía la esperanza de que Estados Unidos me respondiera y me devolviera a mi hija. No sé por qué son injustos, porque yo tengo mis derechos, porque soy su verdadera madre”, dijo.
En Guatemala, al menos 10 personas han sido acusadas de tráfico de personas en relación con el caso de la niña adoptiva. Hasta el momento, dos han sido condenadas, mientras que otros aguardan su juicio.
Eso es una prueba suficiente, dice Rodríguez, de que su hija debe volver a casa.
“Hay evidencia muy importante, que comprueba que me la robaron, y la evidencia de ADN demuestra que yo soy su verdadera madre”, dijo a CNN.
Las autoridades de Guatemala dicen que la agencia falsificó documentos para hacer a la niña candidata a la adopción, algo que aparentemente los padres adoptivos en Missouri no sabían.
Rodríguez espera poder ir a la corte de Missouri para tratar de recuperar a su hija.
Los padres adoptivos se negaron a comentar sobre el caso, al igual que su abogado en Washington.
El año pasado, un representante de esta familia dijo que “(los padres) seguirían abogando por la seguridad de la niña legalmente adoptada. Siguen comprometidos con proteger a su hija de traumas adicionales, a medida que busquen la verdad de su pasado a través de canales legales adecuados”.