(CNN) – El alcalde de la ciudad francesa de Cannes prohibió el uso de los burkinis (vestidos de baño que usan las mujeres musulmanas que cubren todo el cuerpo desde la cabeza hasta los tobillos) en las playas de la rivera francesa, hecho que provocó la ira de los musulmanes franceses y activistas de derechos humanos.
El alcalde David Lisnard firmó la ley con la cual “el acceso a las playas y a la zona de baño queda prohibida para quienes no tengan [ropa de baño] que respete las buenas costumbres y el laicismo”.
La prohibición de acceso a las playas y a la zona de baño para cualquier persona que no tenga el atuendo correcto entró en vigencia el pasado 28 de julio hasta el 31 de agosto.
“La ropa de playa que muestre ostentosamente afiliación religiosa, cuando Francia y algunos lugares de culto están bajo amenaza terrorista, es susceptible de crear riesgos de perturbación del orden público (multitudes, peleas) que es necesario prevenir”, dice la ley.
Hervé Lavisse, presidente de la Liga de Derechos Humanos de la sección de Cannes-Grasse, le dijo a CNN que la ley es “ilegal” y tendrá “resultados contraproducentes” porque “en vez de estar en una situación de apaciguamiento, estamos en situación de excitación”. Para Lavisse la ley es discriminatoria “una vez más con los musulmanes”.
Feiza Ben Mohamed que representa una asociación de musulmanes franceses en el sur de Francia ha luchado en Twitter contra esta ley municipal, ofreciendo asesoría legal para quienes sean multados con 38 euros, unos 42 dólares.
Según la ley, la prohibición se da considerando “las grandes multitudes en las playas de Cannes y el hacinamiento de personas agrupadas en las zonas de baño durante la época de verano”.
La polémica legislación se escuda en “el máximo respeto a las regles de higiene y seguridad” en las playas locales y en que facilita un posible rescate en caso de que se presente un caso de ahogamiento pues sin el burkini los nadadores “no se verán obstaculizados por su traje de natación”.
“Los ataques terroristas perpetrados en Francia desde 2015, particularmente aquellos ocurridos el 14 de julio de 2016 en Niza y el 26 de julio en Saint-Etienne-du-Rouvray por el Estado Islámico, que tuvieron como blanco los símbolos de la República Francesa y de la religión Católica”, son otro motivo que anima a imponer la ley.
El traje islámico es un polémico tema en Francia donde las mujeres no pueden llevar completamente tapada su cara en lugares públicos. Pero hasta el momento no hay una prohibición para que puedan portar símbolos religiosos o ropa específica.