(CNN) – Una legisladora de Texas ha propuesto un proyecto de ley que multaría a los hombres con 100 dólares cada una vez que se masturben.
El proyecto de ley también impone un período de espera de 24 horas si un hombre quiere hacerse una colonoscopia o una vasectomía, o tomar Viagra.
La representante demócrata Jessica Farrar sabe que su proyecto de ley no va a llegar muy lejos. Pero lo propuso la semana pasada para dar a los legisladores hombres una cucharada de su propia medicina y poner sobre la mesa las restricciones contra el aborto en el estado.
Farrar es desde hace mucho tiempo una defensora de la salud de la mujer en un estado que ha hecho extremadamente difícil abortar. Y el proyecto de ley, que pretende señalar el doble discurso sexista, tiene la intención de arrojar un poco de luz sobre los obstáculos a los que las mujeres se enfrentan cuando se trata de su atención médica.
“Veamos lo que Texas ha hecho a las mujeres”, dijo Farrar a CNN. “¿Qué pasaría si los hombres tuvieran que someterse a los mismos procedimientos invasivos?”
Hasta el nombre es una mofa
El proyecto de ley de Farrar penalizaría a los hombres por masturbarse, porque este tipo de comportamiento es “un acto contra un nonato” y contra “la santidad de la vida”.
Hasta el nombre de la iniciativa, ‘El derecho de los hombres a saber’, es igual al de un folleto informativo que los médicos de Texas están obligados a dar a las mujeres que soliciten un aborto.
Ese folleto, ‘El derecho de las mujeres a saber’, fue criticado por ser inexacto, ideológicamente influenciado por la religión y diseñado para desalentar a las mujeres de abortar.
Una de las secciones del folleto dice que el cáncer de mama y los abortos están vinculados. Los estudios científicos no han encontrado ninguna relación de causa y efecto entre los dos.
“Tenemos vidas reales a las que hacer frente”, dijo Farrar, quien señaló que Texas tiene la tasa de mortalidad materna más alta del mundo desarrollado.
Y tiene razón. La tasa de mujeres que murieron por complicaciones relacionadas con el embarazo se duplicó desde 2010 hasta 2014, de acuerdo con un estudio reciente.
Reacción de los oponentes políticos
Los republicanos han arremetido contra proyecto de ley de Farrar.
“Me da vergüenza la representante Farrar. Su intento de comparar con la cuestión del aborto es una falta de un conocimiento básico de la biología humana”, dijo el representante Tony Tinderholt en un comunicado.
“Yo recomendaría que considere la posibilidad de tomar una clase de biología en una escuela secundaria pública o antes de presentar otro proyecto de ley sobre la materia”.
Tinderholt propuso recientemente un proyecto de ley para acusar de asesinato a los proveedores de abortos y a las mujeres que se sometan a uno.
El acceso a los abortos en Texas
Texas tiene dos factores para evitar que las mujeres se sometan a un aborto. Uno: leyes estrictas. Dos: falta de clínicas.
El estado no permite a las mujeres abortar pasada la marca de las 20 semanas a menos que se ponga en peligro su vida. Bajo esta ley, las mujeres que esperan un feto no viable se ven obligadas a llevar el embarazo a término. Además, las mujeres deben recibir asesoramiento dirigido por el estado, someterse a un ultrasonido y recibir la descripción de la imagen del nonato.
En 2014, aproximadamente el 96% de los condados de Texas no tenía clínicas para realizar abortos, y aproximadamente el 43% de las mujeres vivían en esos condados, según el Instituto Guttmacher.
Y desde 2014 el número de instalaciones que proporcionan abortos en Texas ha caído de 44 a 18 después de que el estado aprobó las restricciones a los médicos y a las clínicas de aborto. Las restricciones fueron finalmente derogadas por la Corte Suprema, pero el daño ya estaba hecho.
Hoy en día, las mujeres de Texas sólo pueden someterse a un aborto en siete ciudades.