(CNN) – Un líder de una milicia armada que retuvo a cientos de inmigrantes en la frontera sur de Estados Unidos dijo que el grupo se estaba entrenando para asesinar a Hillary Clinton y Barack Obama, según documentos judiciales revelados el lunes.
Agentes del FBI visitaron la residencia de Larry Mitchell Hopkins en Flora Vista, Nuevo México, en noviembre de 2017 luego de enterarse de la supuesta declaración. Los testigos también informaron haber visto a miembros de la milicia con armas de fuego en el hogar, dijo la declaración de causa probable.
El FBI recuperó nueve armas y municiones durante la búsqueda, según documentos judiciales.
Hopkins, de 69 años, también conocido como Johnny Horton Jr., fue acusado el lunes de ser un delincuente en posesión de armas de fuego y municiones derivadas de la búsqueda de 2017, según una denuncia penal.
Hopkins, quien fue arrestado el sábado, hizo su primera aparición en la corte el lunes en un tribunal federal en Las Cruces.
El líder de los Patriotas Constitucionales Unidos tenía prohibido poseer armas de fuego o municiones porque anteriormente había sido condenado por al menos tres delitos graves, incluida la personificación criminal de un oficial de paz en Oregon en 2006, según la denuncia.
La Oficina del Fiscal de los Estados Unidos se negó a decir por qué se acusó a Hopkins más de un año después de que se registrara su residencia.
El abogado de Hopkins, Kelly O’Connell, dijo a reporteros fuera del juzgado de Nuevo México que su cliente se declaró inocente, según la afiliada de CNN, KTSM.
O’Connell dijo que las armas y municiones no pertenecían a Hopkins.
“De acuerdo con los cargos que leí, esto no se trata de lo que está pasando aquí”, dijo O’Connell, refiriéndose a la presencia de la milicia en la frontera.
El documento de la corte también detalla lo que los testigos alegaron sobre Hopkins y la milicia cuando contactaron al FBI.
Reportes a una línea del FBI en octubre de 2017 indicaban una “actividad extremista de la milicia” en Flora Vista, según la declaración de causa probable de un agente del FBI.
Hopkins fue identificado como el comandante del grupo y su hogar era su “base”, según documentos de la corte.
Según los documentos de la corte, testigos dijeron haber visto a unos 20 miembros de la milicia “armados con rifles AK-47 y otras armas de fuego” en la residencia de Hopkins.
“Hopkins supuestamente también hizo la declaración de que los Patriotas Constitucionales de Estados Unidos estaban entrenando para asesinar a George Soros, Hillary Clinton y Barack Obama, debido al apoyo de estos individuos a Antifa”, según documentos judiciales.
Soros es un inversionista y filántropo multimillonario.
Los documentos de la corte no indican cuándo supuestamente Hopkins hizo la declaración.
Se reportó que el grupo armado detuvo a inmigrantes cerca de Sunland Park, Nuevo México, dijeron los fiscales federales.
La semana pasada, videos publicados en línea mostraban presuntamente a los inmigrantes retenidos por la milicia antes de ser entregados a la Patrulla Fronteriza de Estados Unidos. En las imágenes, se puede ver a las personas que llevan uniforme militar completo con pistolas atadas a los costados, guantes y máscaras negras.
Las imágenes han provocado una condena de parte de la Unión de Libertades Civiles de Nuevo México, que en una carta comparó las acciones de la milicia con el secuestro.
Un portavoz del grupo dijo anteriormente que sus acciones eran legales, “comparando la detención de los inmigrantes con ‘un arresto ciudadano’”, según un informe de The New York Times.
Jim Benvie, el portavoz, le dijo al diario Albuquerque Journal el lunes que los miembros de la milicia son “solo un grupo de patriotas voluntarios, veteranos en la aplicación de la ley”.
Hopkins estaba desarmado mientras vivía en el campamento cerca de la valla fronteriza, le dijo al periódico. “No tenía un arma. No trajo una pistola. Johnny no trajo una pistola”, dijo.
Hopkins es un “veterano de Vietnam que estaba cocinando para las personas en el campamento. Fue una víctima”, dijo Benvie al periódico.
O’Connell dijo a los reporteros que el grupo cree que “están ayudando a hacer cumplir las leyes de Estados Unidos en materia de inmigración”.
Hopkins enfrenta una sentencia máxima de 10 años en la cárcel si es declarado culpable. Permanecerá bajo custodia mientras espera una audiencia preliminar programada para el 29 de abril.
Dakin Andone, Catherine Shoichet y Chris Boyette de CNN contribuyeron con este informe.