CNNEarrow-downclosecomment-02commentglobeplaylistsearchsocial-facebooksocial-googleplussocial-instagramsocial-linkedinsocial-mailsocial-moresocial-twittersocial-whatsapp-01social-whatsapptimestamptype-audiotype-gallery
Política

La semana de juicio político ya está aquí. Estos son los hechos más recientes

Por Zachary B. Wolf, análisis

Washington (CNN) -- El conteo regresivo empezó: faltan dos días para que inicie el juicio político contra el presidente Donald Trump.

En el podcast Impeachment Watch pasamos mucho tiempo preguntándonos sobre el estado mental del presidente mientras se prepara para, el miércoles, convertirse en el tercer presidente en la historia de Estados Unidos en ser sometido a un juicio político que podría terminar con su destitución.

También discutimos cómo no queda drama en este juicio político ya que el resultado final se siente como una conclusión inevitable.

El juicio en el Senado será barroco, quizá no un éxito de taquilla, si lo hacen bajo las reglas

¿Cómo será el juicio político? No lo sabemos. Pero pasé un tiempo la semana pasada mirando las 26 reglas vigentes con las que comenzarán los senadores. Hablamos con múltiples expertos en procedimientos parlamentarios del Senado. Lo que Trump puede no darse cuenta es que se trata de un asunto barroco.

Hay un anuncio cada mañana para poner en orden los procedimientos.

publicidad

Comienza así: "Escuchen, escuchen, escuchen bajo pena de prisión, todos deben permanecer en silencio".

Los senadores hacen preguntas pasando notas al presidente del tribunal John Roberts.

Los senadores pueden votar para cambiar cualquier regla que deseen, pero todo esto se basa en el juicio de Andrew Johnson. Es algo muy anticuado.

Lo que Mitch McConnell no tiene son 51 votos

Phil Mattingly de CNN escribió un artículo sobre las últimas negociaciones (o falta de ellas) entre republicanos y demócratas en un juicio en el Senado.

Punto clave: con 51 votos, McConnell puede hacer casi todo lo que quiera en el inminente juicio de juicio político del Senado. Pero en esta etapa, McConnell no tiene el compromiso de al menos 51 de los 53 senadores en su partido para hacer algo. Eso significa que lo que sucede a continuación, y el alcance del apalancamiento real de Schumer en este momento, aún son incógnitas.

¿Cometieron los demócratas de la Cámara un gran error?

El líder de la minoría del Senado, Chuck Schumer, quiere nuevos testigos para que los demócratas puedan volver a litigar los méritos de este caso. Muchos republicanos han escuchado suficiente.

El senador Joni Ernst, un republicano de Iowa, expresó muy bien esta línea de pensamiento: "Este es un ejercicio político. Acabemos con esto".

Schumer tiene una lista de testigos que le gustaría presentar en el proceso de juicio político en el Senado. Lo curioso es que todos son los testigos que los demócratas de la Cámara decidieron no citar a principios de este año.

¿Por qué los demócratas de la Cámara no esperaron a estos testigos?

El representante de California, Adam Schiff, y los demócratas en la Comisión de Inteligencia de la Cámara decidieron avanzar con el juicio político en lugar de esperar a que los tribunales obligaran a las personas como el jefe de gabinete de la Casa Blanca Mick Mulvaney o el exasesor de Seguridad Nacional John Bolton a no tener en cuenta el reclamo de privilegio de Trump. La revisión judicial de estas cosas puede llevar meses o más.

Bolton, en particular, dijo que tenía información pertinente y prácticamente rogó a testificar.

Cuando se le preguntó si pensaba que la Cámara debería haber acudido a los tribunales para tratar de obligar que los cuatro testigos que solicitó rindieran testimonio, Schumer dijo que no "cuestionaría" a la Cámara, pero agregó que "no hay un buen argumento" para no tener a estas personas testificando en un posible juicio en el Senado "si le interesan los hechos".

Las opiniones no han cambiado

Por otro lado, dado que nada en los testimonio de juicio político parece haber cambiado la opinión de un solo respublicano, a pesar del testimonio creíble de los servidores públicos de carrera, hay cierta lógica en la decisión estratégica de los demócratas de seguir adelante con sus planes.

Los tribunales se demoran mucho tiempo

De hecho, el caso sobre si el exabogado de la Casa Blanca Don McGahn debería testificar sobre los hallazgos del exfiscal especial Robert Mueller, es anterior al escándalo de Ucrania. La próxima cita en la corte es el 3 de enero, momento en el que Trump ya habrá sido acusado.

¿Es un caso defectuoso?

Los republicanos, como la secretaria de Prensa de la Casa Blanca, Stephanie Grisham, dijeron que la solicitud de testigos de Schumer era evidencia de que la Cámara no probó su caso.

"Los demócratas de la Cámara de Representantes violaron sus propias reglas y cualquier precedente histórico de equidad al realizar su simulacro de juicio político ilegítimo. La carta del senador Schumer es solo una prueba más de que la única evidencia que la Cámara presentó, en realidad prueba que el presidente Trump no hizo nada malo", dijo.

Por supuesto, la Cámara solo podía presentar evidencia en forma de testimonio de testigos que respetaran sus citaciones.

En realidad, hay muchas pruebas contra el presidente, pero cada vez que los republicanos pueden atacar el proceso, pueden tratar de reducir el apoyo público para la destitución.

Giuliani a The New Yorker: 'Necesitaba a Yovanovitch fuera del camino'

Confirmando el testimonio de los diplomáticos en las audiencias de juicio político, Rudy Giuliani, en comentarios a la revista The New Yorker, vinculó la expulsión de la embajadora de EE. UU. en Ucrania, Marie Yovanovitch, a su esfuerzo por desenterrar información comprometedora de los Biden.

"Creí que necesitaba a Yovanovitch fuera del camino", dijo. "Ella iba a dificultar las investigaciones para todos".

Sacar a Yovanovitch de su posición no se encuentra entre los cargos de juicio político, pero la admisión de Giuliani ciertamente juega en la narrativa más amplia sobre su búsqueda de investigaciones y la de Trump para dañar a sus rivales políticos.

Este es un año ocupado para los verificadores de datos

El presidente Donald Trump aumentó más del doble el número de afirmaciones falsas o engañosas que hizo este año, a más de 15.000, según Fact Checker del diario The Washington Post.