Bruselas, Bélgica (CNN) - Los líderes europeos deben unirse para salvar el euro, dijeron el jueves los líderes de las dos mayores economías de la eurozona, al tiempo que el jefe del Banco Central Europeo advertía de los malos tiempos económicos que se avecinan.
No llegar a un acuerdo en la cumbre en Bruselas es un “lujo que no nos podemos dar”, dijo el presidente francés, Nicolas Sarkozy.
“Ese es nuestro deber. No tenemos otra opción”, dijo, advirtiendo que la Unión Europea no tendrá una segunda oportunidad.
La canciller alemana Angela Merkel dijo por su parte que los países tienen que poner a un lado sus “egoísmos nacionales” y buscar una solución conjunta a la crisis de la deuda del continente.
Las deudas individuales de los países miembros del euro, como Irlanda y Grecia, han empujado la moneda común al borde del colapso, obligando a los prestamistas internacionales a lanzarse en picada con planes de rescate.
Los recortes presupuestarios adoptados generaron protestas masivas que terminaron con el derrocamiento de los gobiernos de ambos países - y no son los únicas con niveles preocupantes de la deuda.
El ministro francés de Asuntos Europeos, Jean Leonetti, advirtió el jueves que el euro podría “explotar” y que Europa podría “desintegrarse”.
Eso sería un “desastre no sólo para Europa, sino para el mundo entero”, dijo Leonetti a Canal+ de la televisión francesa el jueves por la mañana.
Horas más tarde, el Banco Central Europeo redujo la tasa de interés clave al 1%, efectivo desde el 14 de diciembre. Es el segundo recorte de la tasa en dos meses, llevándola su nivel más bajo.
El jefe del banco, Mario Draghi, advirtió que es probable que la inflación se mantenga alta en la eurozona y el crecimiento se mantenga bajo, y anunció medidas extraordinarias para facilitar los mercados financieros.