CNNEarrow-downclosecomment-02commentglobeplaylistsearchsocial-facebooksocial-googleplussocial-instagramsocial-linkedinsocial-mailsocial-moresocial-twittersocial-whatsapp-01social-whatsapptimestamptype-audiotype-gallery
Noticias Recientes

El congreso, el presidente, el senado y los atascos del poder

Por cnninvitationsaccount, CNN en Español

Washington (CNN) – El punto muerto en el que se encuentra el Congreso de EE.UU. respecto a la extensión de los recortes impositivos a la renta del trabajo, se transformó en una confrontación entre el presidente Obama y el presidente de la Cámara de Representantes, John Boehner.

Luego de que la Cámara de Representantes controlada por los republicanos, aprobara un llamado a más negociaciones, Boehner hizo pública una carta a Obama, en donde le urgía que llame al Senado de su receso navideño para que participe en nuevas conversaciones.

Los líderes del Senado, controlado por los demócratas, rechazaron la idea, secundada por Obama.

El presidente hizo su descargo en una conferencia de prensa que no estaba anunciada, donde dijo que la Cámara de Representantes debía aprobar una extensión de recortes impositivos de dos meses, que el Senado ya había aprobado por 89 votos contra 10. “El compromiso bipartidario al que se llegó el sábado es la única opción viable para que no haya una suba de impuestos el 1ero de enero. Es la única opción,” dijo Obama.

Mientras tanto, los miembros de la Cámara de Representantes comenzaron su feriado de navidad luego de finalizada la sesión del martes.

La medida que aprobó el Senado el sábado pedía una extensión en el recorte de impuestos a la nómina, una extensión de los beneficios de desempleo y una modificación a los pagos a los médicos dentro del programa de Medicare. Este era el plan alternativo para darles a ambas partes más tiempo para negociar.

publicidad

Pero ahora el compromiso se estrelló contra la barricada republicana. “Esta prolongada disputa está hiriendo al partido Republican, dijo el excandidato a presidente John McCain “Está lastimando y mucho la visión de los estadounidenses respecto al Congreso” agregó.

Mientras el reloj sigue marcando las horas, nadie quiere dar el brazo a torcer y ninguna de las partes parece saber cómo terminar con el atasco.

El republicano Boehner formó un comité de negociadores. Los demócratas contestaron que no harán lo mismo. La estrategia republicana es, generar la mayor cantidad de cobertura periodística de sus comités y negociadores, durante estos días de vacaciones, para presionar a los demócratas a negociar. “Vamos a tratar de recordarle a la gente que nos quedamos en Washington dispuestos a trabajar, dijo un asesor. Ya, uno de los negociadores, el representante Fred Upton por Michigan, le avisó a su familia que pasará la navidad en Washington DC.

El vocero de la Casa Blanca, Jay Carney dijo a la prensa que la Cámara de Representantes necesita aprobar la extensión de dos meses (que ya aprobó el Senado) para que se pueda empezar a trabajar en una extensión por un año. “Tienen que aprobarlo los Representantes. Obama no puede ordenar la extensión; es el Congreso el que tiene que tomar cartas en el asunto,” dijo.

La falta de confianza entre ambos partidos es palpable. Cuando se preguntó si la culpa del estancamiento era de los demócratas al no querer nombrar negociadores, Pelosi dijo que el tema era la negativa de los republicanos de la Cámara de Representantes a apoyar el plan del Senado. “Lo que digan es irrelevante. Lo que están haciendo es no darles una exención impositiva a 160 millones de estadounidenses.”

Es que la inacción del Congreso significará que las familias de EE.UU. pagarán un promedio de 1000 dólares más de impuestos.

“Este esfuerzo se dirige hacia capitalizar más votos que hacia el crecimiento económico,” dijo el representante republicano Jeff Flake de Arizona.

Sin embargo cinco senadores republicanos (de tendencia moderada) han pedido a los representantes que apoyen la medida de extensión por dos meses, ya aprobada por el Senado. Scott Brown, de Massachusetts sacó un comunicado el martes diciendo que la Cámara de Representantes “prefiere continuar jugando a la política antes de encontrar soluciones.” Y agregó que “sus acciones van a lastimar a las familias estadounidenses y va a ir en detrimento de la ya frágil economía,” concluyó el político que se enfrentará a una difícil reelección en Massachusetts en 2012, un estado mayoritariamente demócrata.