El Cirque du Soleil de Los Ángeles viaja a través del mundo del cine

(CNN) — Cirque du Soleil, la renombrada compañía internacional de acróbatas, bailarines, contorsionistas, gimnastas y artistas de circo, por fin ha establecido un espectáculo permanente en Los Ángeles, y el espectáculo no podría tener un mejor tema: el cine.

En el lanzamiento de IRIS: A Journey Through the World of Cinema, el circo ha elegido apropiadamente el Teatro Kodak de Hollywood como su carpa, mejor conocido como el escenario de los Premios Oscar.

De hecho, cuando la ceremonia de los Oscar comience a prepararse para su transmisión por televisión el 26 de febrero del próximo año, el espectáculo tendrá su receso anual, del 23 de enero al 27 de marzo.

Desde 1984, el Cirque du Soleil ha entretenido a 100 millones de personas en casi 300 países, con actuaciones enfocadas en todo, desde la evolución de la humanidad hasta el mundo de los insectos, y más recientemente, Michael Jackson.

Para evocar la creatividad involucrada en el cine de Hollywood, el espectáculo despliega una vertiginosa conjugación de danza, vídeo en vivo, imágenes de cine y proyecciones interactivas. En total, la producción cuenta con 72 artistas, 200 disfraces, 20 proyectores de video y dos personajes centrales, Buster y Scarlett, que viajan a través de “una poética fantasmagoría inspirada en el mundo del cine”, según los creadores del programa.

Una declaración describe el espectáculo como la presentación de “un viaje imaginario a través de la evolución del cine — desde los cimientos de esta forma de arte hasta el bullicio del plató— a través de efectos ópticos y los géneros cinematográficos”.

Entre los actos más memorables se encuentran las escenas de acción sincronizadas en trampolines, realizadas por numerosos dobles de acción en homenaje a las películas de gángsters, con metralletas en mano. Sus saltos y caídas desde edificios, andamios y una torre de agua evocan una película de acción, aunque se ejecutan en un escenario de teatro.

Otro acto presenta una burla a una tira de película: interpretando al unísono, los bailarines se mueven entre puertas que semejan fotogramas de una película, y los artistas recrean una imagen en movimiento.

Además de los artistas que llevan el rendimiento del cuerpo humano a una perfección que Miguel Ángel admiraría, la diseñadora de vestuario del espectáculo, Philippe Guillotel, ha creado personajes mitad humanos, mitad máquina cuyo atuendo incorpora las invenciones técnicas de la producción inicial de películas.

Vagando entre la multitud antes del acto de apertura está una mujer joven con una falda corta y cilíndrica semejante a un praxinoscopio, un antiguo dispositivo de animación que se hace girar rápidamente para mostrar una imagen en movimiento de dos boxeadores en acción.

“Soy un devoto fanático del universo de Julio Verne, con todos sus engranajes mecánicos y remaches”, dijo Guillotel. “Cuando veo una vieja cámara de madera y bronce inmediatamente quiero hacer un disfraz. Y quiero que todo el que vea los trajes de IRIS piense inmediatamente en una palabra: cine”.