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Crimen

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El asesino confeso de Noruega dice que se entrenó para matar con videojuegos

Por CNN en Español

OSLO, Noruega (CNN) — Anders Behring Breivik, quien admitió haber matado a 77 personas en Noruega el verano pasado, entrenó con videojuegos sus ataques, aseguró este jueves durante el juicio que se le sigue por terrorismo y homicidio.

El presunto atacante dijo que practicó con Modern Warfare 2.

Breivik, que se jacta de ser un ultranacionalista que mató a sus víctimas como parte de una lucha contra el multiculturalismo en Noruega, declaró también que jugaba World of Warcraft hasta 16 horas al día.

El hombre había previsto inicialmente llevar a cabo tres ataques con bomba seguidos por un ataque armado, dijo a la corte, pero al final solo fue capaz de producir suficientes explosivos para un solo coche bomba, que mató a ocho personas en el centro de Oslo.

Indagado sobre los objetivos de los ataques, Breivik, dijo: "Los dos primeros eran claros: el gobierno y la sede del Partido Laborista. Del tercero no estaba seguro".

Dijo que en un principio tenía reservas en cuanto a atacar la sede del Partido Laborista, debido a la presencia de civiles y personas inocentes en las oficinas en todo el edificio. "Pero entonces pensé: no hay muchos mejores objetivos en Noruega", dijo.

Breivik dijo que también había considerado bombardear el Palacio Real (sin dañar a la familia real) así como el ayuntamiento y el periódico local Aftenposten.

Finalmente decidió llevar a cabo un ataque armado contra un campamento juvenil del Partido Laborista en la isla de Utoya, donde mató a tiros a 69 personas, después de que su plan inicial de dirigirse a una conferencia de periodistas no funcionó, dijo.

Breivik bromeó acerca de los psiquiatras que lo han calificado de loco y restó importancia a una pregunta acerca de cómo piensa que los familiares de las víctimas se sienten cuando lo ven sonreír en la corte.

"Creo que reaccionan de una manera natural", dijo.

El hombre no levantó su puño en señal de saludo cuando entró en la corte este jueves, respetando la petición de las familias de sus víctimas.

Los familiares estaban molestos porque él hacía dicho gesto cada mañana, dijo este miércoles su abogado, Geir Lippestad.

Breivik dijo en la corte este miércoles que debe recibir la pena de muerte o la absolución, ridiculizando la idea de que sería enviado a la cárcel o un hospital psiquiátrico por sus acciones. Noruega no tiene en su legislación la pena de muerte.

Se espera que el juicio de Breivik dure hasta 10 semanas.

Este miércoles fue cuestionado sobre reuniones con otros ultranacionalistas en Liberia y Londres unos nueve días antes de los atentados, y de alguna forma fue evasivo, dijeron reporteros que acudieron al juicio.

El fiscal Inga Bejer Eng dijo que había evidencia para probar que Behring Breivik había visitado ambos lugares.

El martes, el presunto atacante dijo que había llevado a cabo "los ataques políticos más sofisticados y espectaculares en Europa desde la Segunda Guerra Mundial" y que lo haría de nuevo si tuviera la oportunidad.

"Porque las ofensas contra mi pueblo y mis compañeros partidarios son en muchas formas tan malas", dijo Breivik a la corte en el segundo día de su juicio. Planeaba llevar a cabo las matanzas como un ataque suicida, dijo.

"No esperaba sobrevivir ese día".

Breivik enfrenta un juicio por cargos de homicidio y de cometer actos terroristas durante el 22 de julio del 2011. Ocho personas murieron en un atentado en el centro de Oslo y 69 personas en la cercana isla de Utoya.

El hombre ha dicho que su ataque estaba destinado a salvar a Noruega de ser tomada por las fuerzas multiculturales, así como para evitar la limpieza étnica de los noruegos.

En un manifiesto de 1.500 páginas que se le atribuyen, Breivik arremetió contra la inmigración musulmana y el liberalismo europeo, incluido el gobernante Partido Laborista, que dijo que estaba permitiendo la "islamización de Europa".

Olav Mellingsaeter contribuyó con este reporte