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Por Saad Abedine y Holly Yan, CNN

(CNN) – El líder de un importante grupo de oposición sirio afirmó que el presidente de Estados Unidos Barack Obama debería tomar más acción en Siria y no estar preocupado de si la “decisión correcta” afectaría a su campaña de reelección.

La petición se produce después de que presuntamente fueran asesinadas 200 personas la semana pasada en una masacre en el pueblo sirio de Tremseh.

“Queremos que Estados Unidos y los países occidentales lleven a cabo su responsabilidad a través del Consejo de Seguridad de la ONU y trabajen para que se adopte una resolución bajo el artículo 7 para obligar que el régimen deje de matar sirios”, dijo Abdulbaset Sieda, presidente del Consejo Nacional de Siria, en una entrevista este domingo con Fareed Zakaria GPS de CNN.

“Respecto a Estados Unidos, específicamente, nos gustaría decirle al presidente Obama que esperar el día de la elección para tomar la decisión correcta sobre Siria es inaceptable. No entendemos que una superpotencia ignore los decenas de miles de muertos de civiles porque en la campaña presidencial se pueda ganar o perder. Es por eso que estamos diciendo que se debe trabajar con el Consejo de Seguridad”.

Funcionarios estadounidenses han denunciado al régimen sirio y llamaron a que el presidente Bachar al Asad renuncie. Sin embargo, en los intentos previos para aprobar la resolución de condena del régimen de al Asad en el Consejo de Seguridad fracasaron debido a los vetos de China y Rusia.

Kofi Annan, enviado especial de las Naciones Unidas y la Liga Árabe en Siria, visitará Moscú este lunes para reunirse con el presidente de Rusia y el ministro de Relaciones Exteriores.

Si los esfuerzos continuos fallan, Estados Unidos y otros países “pueden moverse fuera del ámbito del Consejo de Seguridad” dijo Sieda.

Este domingo, los observadores de la ONU volverán al pueblo de Tremseh, donde activistas denunciaron el asesinato de 200 personas el jueves, el día de más muertes en los 16 meses de la crisis en Siria.

“El ataqué aparentemente fue dirigido a grupos específicos y a casas, principalmente de desertores del Ejército y activistas”, informó Sausan Ghosheh, vocera del jefe de la misión de observadores de la ONU. “Había charcos de sangre en las salas de las casas junto con varios casquillos de bala”.

Ghosheh dijo este sábado que se utilizaron una amplia gama de armas, entre ellas artillería, morteros y armas pequeñas, pero el número de víctimas en Tremseh todavía no estaba claro.

El portavoz del Ministerio de Exteriores sirio, Jihad Makdissi, dijo este domingo que lo ocurrido en Tremseh “fue una operación militar y no una masacre”.

El régimen sirio ha culpado a “grupos armados terroristas” por las muertes en Tremseh, al afirmar que los residentes llamaron a las fuerzas de seguridad en busca de ayuda luego de que los grupos terroristas atacaran la ciudad.

“Permítanme explicar que Tremseh es un pueblo muy pequeño. Es bastante absurdo que algunos medios de comunicación extiendan rumores de que el Ejército sirio envió 150 tanques en un área tan pequeña”, afirmó Makdissi,  agregó que las denuncias de ataques de artillería y el uso de los helicópteros son “infundadas”.

Citando una fuente anónima, el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores ofreció una cifra mucho menor de la que activistas de la oposición informaron sobre Tremseh.

“No puedo revelar el nombre del testigo, pero declaró que en Tremseh fueron asesinadas 37 personas, y sólo dos civiles”, informó el ministro de exteriores.

La agencia estatal de Siria, Arab News, informó que dos terroristas “confesaron haber participado en una serie de asesinatos y actos de terrorismo antes de que el Ejército entrara en la ciudad” de Tremseh.

Este hecho renovó la indignación internacional contra el régimen sirio y subrayó la necesidad desesperada de encontrar una solución al conflicto que ha matado a miles.

Kofi Annan, el enviado especial de la ONU, tiene previsto visitar Moscú durante dos días a partir de este lunes para conversaciones con el presidente ruso Vladimir Putin y el ministro de Relaciones Exteriores, Serguei Lavrov, dijo el portavoz de Annan.

Annan negoció un plan de paz de seis puntos para Siria, que tanto el régimen sirio y los rebeldes acordaron, pero nunca fue implementado por completo. Una parte clave del plan llama a un cese de la violencia “en todas las partes”.

Desde que el conflicto inició en marzo de 2011, las Naciones Unidas estiman que más de 10.000 personas han muerto por la violencia, grupos de la oposición dicen que han muerto miles más.

Sieda dijo que es importante recordar que a pesar de los costos siguen surgiendo víctimas, la muerte de cada víctima es una tragedia.

“Se trata de números y se olvidan que estas personas son seres humanos que tienen padres, madres, hermanos, hermanas y amigos”.