(CNN) — La Liga Árabe ofrecerá a Bachar al Asad “una salida segura” en caso de aceptar dimitir rápidamente y salir del país, informó un alto funcionario de la organización, lo cual marca el último intento de conseguir la renuncia del presidente sirio y terminar con el derramamiento de sangre.
El funcionario no dio más detalles porque no está autorizado para hablar con los medios de comunicación.
El ministro de Relaciones Exteriores de Qatar, el jeque Hamad bin Khalifa Al Thani, no discutió sobre el plan para la salida de al Asad, pero confirmó que “no hay un acuerdo sobre la necesidad de la renuncia”, en una reunión con periodistas este domingo.
“Hacemos un llamado a la oposición y el Ejército Libre sirio a formar un gobierno de unidad nacional”, dijo Hamad.
A pesar de la oferta propuesta por la Liga Árabe, la violencia no cede en Siria. Al menos 19 personas murieron este lunes, según los Comités de Coordinación Locales de Siria (LCC, por sus siglas en inglés).
La Liga Árabe no sería la primera en ofrecer una salida para al Asad.
Túnez —la cuna de los levantamientos de la primavera árabe y el primer país en derrocar a su gobernante, el año pasado — ofreció en febrero asilo al presidente de Siria, en un intento por detener el derramamiento de sangre.
La hija del emir de Qatar ha sugerido el exilio en Doha, de acuerdo con unos correos electrónicos filtrados a CNN a principios de este año.
Si al Asad se fuera, él seguiría a una serie de gobernantes que han sucumbido en la región a raíz de las revueltas populares, entre ellos el ex presidente egipcio, Hosni Mubarak; el depuesto dictador libio Muammar Gadafi; y el ex presidente de Yemen, Ali Abdullah Saleh, que dejó el cargo en un acuerdo de transferencia del poder.
En un video publicado en internet este domingo, el jefe del Ejército Libre de Siria en Alepo anunció una “operación para liberar a la ciudad de los asesinos de Asad, que tienen manchadas las manos de sangre por los crímenes contra nuestro pueblo”.
El general Abdel Jabbar Al-Obeidi pidió a los soldados del régimen a desertar o dar un paso atrás y no luchar contra sus hombres, con la promesa de que nadie será dañado.
La noche de este domingo, la televisión siria transmitió un “importante” comunicado del Ministerio de Información de Inteligencia Occidental para informar que “algunas partes árabes” planean secuestrar la frecuencia de la televisión siria y dar reportes falsos de un golpe de Estado, de las deserciones o las ciudades que han sido tomadas por los rebeldes.
En la televisión se informó que las estaciones “usarían a periodistas sirios, bajo presión”.
Este domingo se registraron enfrentamientos entre las fuerzas del régimen y los rebeldes en Alepo, centro comercial de Siria, informaron activistas de la oposición.
“Un edificio colapsó en el vecindario de Seif al-Dawla después de que un tanque del régimen (…) lo tuvo de objetivo”, informaron los Comités de Coordinación Locales de Siria (LCC, por sus siglas en inglés).
La televisión Siria citó una fuente oficial negando los reportes acerca de Alepo.
“Algunos terroristas han movilizado a grupos armados en la ciudad, en un intento similar de distorsionar la realidad, como lo ocurrido en Damasco”, informó la televisión.
“Nuestras heroicas fuerzas armadas y las autoridades especiales en Alepo (…) han encontrado terroristas, matando a gran número de ellos”. Otros se rindieron, mientras otros se fueron a Turquía, de acuerdo con el reporte.
Este domingo murieron 111 personas en Siria, 56 en los alrededores de Alepo y Damasco, informaron los LCC.
Si los rebeldes logran el control de Alepo, marcaría un punto de inflexión en la crisis de Sira, ya que golpearía las finanzas de al Asad.
Los rebeldes dijeron este domingo que se habían apoderado de una entrada de la frontera de Siria y Turquía en Bad al Salam.
“Intentaron tener el control del paso fronterizo de Bad al Salam en los últimos tres días”, informó a CNN Malik Kurdi, subcomandante del Ejército Libre de Siria (FSA, por sus siglas en inglés). “Ayer en la noche, el FSA tomó el control por completo de la puerta y ahora los helicópteros sirios están volando alrededor”.
Dijo que están preocupados por un posible ataque de las fuerzas sirias a la puerta.
Otro combatiente del FSA, que dijo llamarse Abu Shawki, informó que los rebeldes tomaron el control de Bab al Salam después de violentos enfrentamientos donde murieron varias personas, y detalló que las fuerzas del régimen abandonaron algunos de sus tanques.
Alepo y la capital Damasco han sido bastiones de al Asad, sin embargo, los fuertes enfrentamientos en Damasco la semana pasada, junto con un reciente bombardeo que mató a cuatro miembros del círculo cercano del gobierno de Asad, sugieren rupturas en el régimen.
Una mezquita en Damasco fue destruida por ataques con misiles este domingo y por bombardeos de helicópteros, mientras había personas adentro, informaron los LCC. La mezquita fue incendiada y “varios” murieron, dijo el grupo.
Sin embargo, el régimen sirio negó los reportes de que helicópteros atacaron Damasco, y afirmó que la “vida es normal” en la ciudad, según informó la televisión siria este domingo.
CNN no pudo confirmar de forma independiente los reportes de la violencia, porque el gobierno restringe el acceso a los periodistas extranjeros.
Alex Thomson, corresponsal de ITN, afiliada a CNN, escribió este domingo en Twitter que un hospital militar en Damasco estaba incendiado y que hubo un tiroteo de 90 minutos cuando al parecer los rebeldes atacaron el edificio. Los cuerpos de los soldados estaban en el hospital, dijo, sus funerales fueron cancelados por los ataques.
Thompson publicó en un blog que no podía decir con seguridad que los rebeldes atacaron el hospital, pero los soldados insistieron que el ataque fue realizado por ellos.
Mientras tanto, un grupo de la oposición dijo este sábado que un científico experto en el programa de misiles de Siria fue asesinado, junto con su esposa e hijo.
El general de división retirado Nabil Zugheib fue asesinado en el vecindario de Bab Touma, en Damasco, informó el Observatorio para los Derechos Humanos de Siria. Nadie se atribuyó la responsabilidad.
Damasco está aislado por puestos de control y tanques, dijeron testigos este sábado. Los grupos de la oposición informaron que no hay medicinas y los residentes están pidiendo ayuda.
La crisis inició en marzo de 2011, cuando se dio una represión del gobierno contra manifestantes, lo que se transformó en un levantamiento nacional contra el régimen.
Las Naciones Unidas estiman que más de 10,000 personas han muerto desde que comenzó la crisis hace más de 16 meses. Sin embargo, Rupert Colville, vocero de la oficina del Alto Comisionado para los derechos humanos, dijo que la ONU no ha dado las cifras totales de las muertes desde diciembre, “porque es imposible verificar los números de una manera significativa.”
Los grupos de la oposición que han seguido el número de muertes han dicho que la cifra es más elevada. El LCC, por ejemplo, estima que más de 16.000 personas ha muerto han muerto.
El régimen ha registrado deserciones militares. Dos generales de brigada llegaron a Turquía el pasado viernes por la noche, informó un funcionario de Relaciones Exteriores, y aseguró que dos docenas de generales sirios han huido a ese país.
Mohamed Fadel Fahmy, Yousuf Basil, Holly Yan, Saad Abedine, Roba Alhenawi, Ivan Watson, Raja Razek, Yesim Comert y Shiyar Sayed Mohamad, contribuyeron con este reporte