(CNN) — Dos cohetes lanzados desde Gaza se estrellaron este jueves por la mañana en el sur de Israel, cuando el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, preparaba su traslado de Jerusalén a Ramallah, para reunirse con representantes de la Autoridad Palestina.
Uno de los cohetes cayó en el patio de una casa en la ciudad de Sderot, pero no hubo lesionados, dijo el portavoz de la Policía israelí, Micky Rosenfeld.
Un experto en desactivación busca el otro cohete, señaló Rosenfeld.
Obama realiza una visita de cuatro días a Israel y la Ribera Occidental del Jordán, su primera gira a la región desde que asumió el cargo.
Este jueves Obama se reunió con el presidente palestino, Mahmoud Abbas.
Israel se apoderó de Gaza en la guerra de 1967 y retiró a los colonos de allí en 2005. Desde entonces, frecuentemente los militantes de Gaza lanzan cohetes al sur de Israel.
En noviembre pasado, el gobierno israelí inició la operación Pilar de Defensa, una serie de ataques militares en contra de Gaza para frenar el lanzamiento de cohetes.
Durante ocho días hubo enfrentamientos entre Israel y Hamas, el movimiento palestino que controla Gaza.
Mientras Israel atacaba a los comandantes militares y el arsenal de Hamas, los militantes palestinos lanzaban cohetes hacia el territorio israelí, hasta que alcanzaron dos ciudades principales: Jerusalén y Tel Aviv.
Israel llamó a los reservistas y concentró sus fuerzas en la frontera con Gaza, en una amenaza de invasión terrestre. Muchos temían una repetición de la ofensiva israelí Plomo Fundidoen contra militantes palestinos a finales de 2008, una operación que condujo a una sangrienta guerra de tres semanas.
Los combates en noviembre tuvieron su efecto: más de 160 palestinos, la mayoría civiles, fueron asesinados. Seis israelíes murieron, entre civiles y soldados. Cientos de personas resultaron heridas.
La lucha terminó después de que Egipto y Estados Unidos ayudaron a negociar el cese del fuego que duró hasta el 26 de febrero.
Ese día, un cohete dañó una carretera a las afueras de la ciudad de Ashkelon, a unos 15 kilómetros de Gaza.
Las Brigadas de los Mártires de Al Aqsa, un grupo militante de Gaza, se atribuyó la responsabilidad del ataque.
Michael Schwartz informó desde Jerusalén y Karen Smith en Atlanta