Por Meghan Dunn, CNN
Pittstown, Nueva Jersey (CNN) – Cuando Chip Paillex empezó una huerta con su hija de cuatro años en 2002, nunca se imaginó que cambiaría la vida de miles de personas.
Ese primer año, produjeron mucho más de lo que podían consumir. Paillex no quiso que se desperdiciara el excedente, así que empezó a dárselo a sus amigos y compañeros de trabajo. Luego, se enteró de otras personas que lo necesitaban más.
“Vimos un artículo de tres líneas en el periódico”, recuerda Paillex. “Decía: ‘Si te sobran productos de la huerta, tráelos a la despensa de alimentos’”.
A través de su organización sin ánimo de lucro, Paillex (en la foto con su hija, Kyra) ha dado alimentos a unas 140.000 personas.
Paillex y su hija donaron 55 kilos de hortalizas ese año. Él sabía que la experiencia sería una buena lección para ella. Pero también le abrió los ojos a él.
“Al principio pensé que las personas simplemente tenían hambre”, cuenta Paillex. “Pero después me di cuenta de que la gente tenía hambre de frutas y verduras frescas”.
Su organización America’s Grow-a-Row ahora cultiva y cosecha frutas y verduras para los necesitados en todo el estado de Nueva Jersey.
“Nueva Jersey, el Estado Jardín, es famoso por sus hortalizas”, dijo Paillex, de 47 años. “Pero muchos de esos productos lamentablemente no llegan a mucha gente con necesidad”.
Repartiendo la riqueza
Paillex inició su organización a partir de su pequeña parcela, con la ayuda de familiares y amigos. Cada día de la semana durante casi cuatro años trabajó en el huerto de 5 a 8 de la mañana antes de ir a su trabajo. Luego volvía a trabajar en el huerto hasta el anochecer.
En 2007, dejó su trabajo en una empresa para dedicarse a tiempo completo a la organización. Ahora tiene 49 acres (19.8296 hectáreas) de tierra cultivable y cuenta con casi 4.000 voluntarios.
Para ayudar a distribuir los cientos de miles de kilos de productos que cultiva cada año, se asoció con el Banco de Alimentos de la Comunidad de Nueva Jersey. También recolectan los sobrantes de otras granjas y supermercados de la zona. Esto lo donan a los bancos de alimentos en todo el estado.
Cuando Paillex se enteró de la existencia de los desiertos de alimentos, las áreas del país que no tienen acceso a alimentos saludables y económicos, él y su grupo crearon mercados agrícolas para ofrecer productos frescos gratuitos a los residentes de estas áreas.
De julio a noviembre, el grupo mantiene sus mercados agrícolas gratuitos en cinco ciudades de Nueva Jersey, incluidas Camden y Newark. Los residentes también reciben recetas saludables para preparar esos productos.
Estos mercados agrícolas gratuitos han sido la salvación para Imogene Thompson. La mujer de 64 años, que vive de un ingreso fijo, tenía problemas para conseguir alimentos frescos necesarios para su salud.
“Nuestra meta es hacer que todos en el estado - ya sea un niño o un adulto - puedan comer saludablemente”, explica Paillex. “No debería ser un lujo”.
“Yo sufro de diabetes e hipertensión. Comer sano es muy importante para mí”, dijo ella. Algunas cosas que necesito para mi dieta, muchas veces no las puedo pagar, especialmente frutas y verduras”.
Thompson ahora va a los mercados agrícolas del grupo en la ciudad de Jersey, y las cosas han cambiado para ella.
“He perdido un poco de peso. Mi nivel de azúcar está mejor controlado, y las verduras y la comida son deliciosas”, comentó Thompson. “Sin la ayuda de Chip, nadie aquí podría comer frutas y verduras frescas”.
Pequeños agricultores
Para Paillex y su grupo, el trabajo es algo más que alimentar a la gente. El objetivo también es enseñarles a las personas de todas las edades acerca de dónde provienen sus alimentos y por qué es importante. Paillex dijo que los beneficiarios también regresan para ser voluntarios del grupo.
“Hay un sentido de comunidad que sale de este programa”, señaló.
El programa de verano para jóvenes que tiene el grupo introduce a los niños de las zonas urbanas de Nueva Jersey a la agricultura y alimentación saludable. Para muchos de estos niños, es su primera vez en una granja.
“Quedan impresionados inmediatamente por el hecho de que los alimentos crecen en la tierra”, contó Paillex. “Para ellos poder extraerlos de la tierra y cosecharlos, y luego llevarlos a casa con sus familias, es algo grande”.
America’s Grow-A-Row ha donado casi 1.300 toneladas métricas de productos frescos, que han llegado a unas 140.000 personas. Paillex planea ampliar el programa a otros estados.
“No hay mejor sentimiento y mayor recompensa”, manifestó Paillex, “que poder llevar alimentos frescos al plato de alguien que tiene hambre esa noche”.
¿Quieres participar? Visita el sitio web de America’s Grow-a-Row en www.americasgrowarow.org y descubre cómo ayudar.