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Un año de Airbnb: este hombre vive solamente en sitios que alquila en línea
Por Zoe Li, para CNN
¿Qué llevaría a un hombre a abandonar el lujo de los apartamentos equipados por nada menos que los alquileres de Airbnb —algunos buenos, algunos terribles— durante todo un año?
Pregúntale a Kevin Lynch.
Lynch, quien es originario de Chicago, se trasladó a Shanghái hace más de un año con su esposa e hija "para vivir una aventura".
Cuando se abrió un puesto de trabajo en la compañía de publicidad para la que trabaja en el sur de China, él empezó a hacer prolongados viajes de negocios a Hong Kong, y cada vez se hospedaba en un lugar distinto que encontraba en Airbnb.
Originalmente, Lynch prometió mantener su estilo de vida de Airbnb durante un año, pero ahora ha quedado enganchado y dice que continuará el experimento de forma indefinida.
Sal de la 'burbuja del expatriado'
"Yo quería compensar el hecho de que no crecí en Hong Kong para ganar credibilidad con los clientes y realmente entender la región más allá de la burbuja del expatriado en la que mucha gente se queda", dice Lynch.
"Y sonaba divertido", añade.
El intrépido viajero ha rodado su maleta por todo el territorio y deliberadamente ha elegido vecindarios alejados del camino transitado.
Cuando hablamos con él, Lynch estaba en su estadía número 80 con Airbnb en Lau Fau Shan, un área casi en la frontera noroeste de Hong Kong, conocida por una industria de cultivo de ostras que una vez tuvo mucho éxito.
"Lo que más me impacta de Hong Kong es la diversidad de los lugares en los que he estado", dice.
"Si no eres de aquí, lo único que ves es el teleférico, la Cumbre Victoria y los densos vecindarios urbanos en Mongkok y el Distrito Central".
"Pero lo que me ha gustado muchísimo son las islas distantes, Shek O y Big Wave Bay".
"Ellas tienen el estilo del sudeste asiático; sin embargo, puedes subirte a un tren o un bus y 20 minutos más tarde te encuentras nuevamente en el caos".
El creativo de publicidad dice que él comenzó su proyecto de Airbnb por iniciativa propia y trabaja independientemente de la compañía.
"Nos conocemos el uno al otro y nos agradamos el uno al otro", dice Lynch respecto a su relación con Airbnb.
"No hay compensación, no hay descuentos ni nada", dice Lynch. "Han tenido un par de reuniones con la comunidad aquí en Hong Kong a las que me han invitado, pero aparte de eso sabemos cómo apreciarnos el uno al otro".
Le preguntamos a Lynch cuáles han sido sus cinco estadías más memorables y felizmente colaboró.
Soho
"Realmente creo que esto fue, por mucho, lo más destacado de mi año", dice Lynch.
"Fue en uno de los barrios más predecibles... aquella burbuja del expatriado que mencioné", dice. "Este lugar estaba precisamente en Staunton Street justo frente a la escalera mecánica de SoHo".
"Estoy acostumbrado a caminar en lugares que son muy pequeños, pero cuando entré a este lugar, todo lo que vi fue el pequeño sofá y la mesa, y pensé que iba a tener que dormir en el sofá".
"Luego el sujeto presionó un botón en la pared, y el techo se baja y se detiene justo a un par de centímetros sobre la mesa".
"Era la cama".
"Considerando cualquier otro espacio en el que haya estado antes, este, por sí solo, es el aspecto más descabellado. Probablemente no fue el lugar donde mejor dormí, pero sí fue el más memorable".
Cheung Chau
Lynch llegó a Cheung Chau sin tener una idea de en qué se estaba metiendo.
"Fue durante la semana en la que tenemos la celebración del cumpleaños de Buda", dice Lynch. "Pensé que me iba a hospedar cerca de la playa, así que solo estaba buscando una isla dónde quedarme y encontré este lugar en la lista".
Cuando reservó el apartamento, la anfitriona le preguntó si estaba bien que esa semana hubiera una prohibición sobre la carne en la isla.
"Me pareció extraño, pero estuve de acuerdo".
"Luego me preguntó si me importaba que pasara un desfile justo frente a mi puerta. Resulta que el lugar está a 28 pasos —los conté— de distancia de las torres de panecillos".
"Me encontré en el corazón de este descabellado y único festival de los panecillos. Fue uno de los días más memorables y no tenía idea de lo que me esperaba".
Mui Wo
Para su estadía en Mui Wo en la Isla de Lantau, tratar de encontrar el lugar fue la mitad de la diversión.
"Las indicaciones de la anfitriona fueron no recuerdo cuántos cruces y puentes, y estar atento a este edificio y aquel. Eran todas esas cosas dibujadas a mano".
"Me asombra que todas estas cosas estén a tan solo un viaje en ferry desde el Distrito Central y que conserven su carácter tan bien".
La casa donde se quedó era un establo renovado.
"Busco vecindarios a los que nunca antes he ido, al igual que cualquier cosa que se vea interesante... ya sea para bien o para mal".
"Fui la última persona que se quedó en el establo antes de que comenzaran a renovar el lugar. Espero que mantengan el techo".
Discovery Bay
Cuando la hija de Lynch vino a visitarlo, él quiso encontrar un sitio especial dónde alojarse.
Un yate de 18 metros en un lujoso puerto deportivo en Discovery Bay se ajustaba perfectamente.
"El barco era increíble", dice Lynch. "Había un ayudante, cuatro dormitorios, y como nuestro vuelo a Hong Kong se retrasó no pudimos disfrutar mucho del barco en nuestra estadía inicial, por lo que el anfitrión nos dio otra noche gratis para compensarlo".
Sea Rach
Este desarrollo residencial en el extremo sur de la isla de Lantau solo es accesible en barco o a pie.
"En la década de 1970 era un lugar de moda, pero ha pasado por varias bancarrotas y ahora hay pocas personas viviendo allí".
"Tiene su propio servicio privado de ferry desde la isla de Cheung Chau".
"Tomé el ferry cuatro veces y en cada una de esas ocasiones no había más de tres personas en él y nadie hablaba. Era escalofriante".
