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Salud

Los riesgos y daños potenciales de los suplementos dietéticos

Por Álvaro Valderrama

Por David S. Seres

Nota del editor: El médico David S. Seres es director de nutrición médica y profesor de Medicina en el Instituto de Nutrición Humana en el Centro Médico de la Universidad Columbia. Es un miembro del Proyecto Op-Ed. Las opiniones recogidas en este texto pertenecen exclusivamente a David S. Seres.

(CNN) — Hubo algunas buenas noticias en Estados Unidos esta semana. La oficina del ministro de justicia del estado de Nueva York dijo a cuatro grandes tiendas minoristas (Walmart, GNC, Target y Walgreens) que detuvieran las ventas de sus suplementos herbales de marca libre porque sus productos en realidad no contienen las hierbas que supuestamente muestran en sus etiquetas. Estos suplementos herbales contienen en su mayoría rellenos y en algunos casos, potenciales alergenos. Pero otros suplementos son más preocupantes.

Como experto en nutrición, estoy horrorizado por el bombardeo diario de pretensiones escandalosas y sin fundamento que promocionan curas de todo desde el E.coli hasta el ébola. Si buscas en la web sobre cualquier enfermedad, encontrarás anuncios cuidadosamente escritos que promueven terapias nutricionales no probadas. Lo peor, algunas de estas pueden ser dañinas. Por ejemplo, algunas personas han sufrido un daño de hígado por el extracto de té verde tan grave, que necesitaron un trasplante de hígado. Y la frecuencia del daño por los suplementos dietéticos está en aumento.

Los suplementos dietéticos no son píldoras milagrosas. Pocas afirmaciones son respaldadas por la ciencia, incluso cuando la sustancia en la etiqueta en realidad está en la botella (que hemos aprendido que no podemos saber al 100%), y muchas otras han demostrado ser inefectivas.

Afortunadamente, algunos desarrollos recientes en Estados Unidos son alentadores. La Comisión Federal de Comercio de Estados Unidos (FTC, por sus siglas en inglés) ganó una demanda contra NourishLife, LLC y su dueño, Mark Nottoli, quien afirmó que los suplementos dietéticos de su empresa, que en su mayoría son aceite de pescado, trataban problemas del habla en niños con autismo. La FTC también ganó una demanda contra Lindsey Duncan y Pure Health, LLC luego de que promocionara su producto de té verde como un milagro para perder peso con voceros falsos en The Dr. Oz Show.

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En Estados Unidos hay poca regulación de cualquier cosa llamada suplemento dietético. La FTC casi tiene que hacer todo para perseguir a las empresas por fraude por sus afirmaciones sin fundamentos sobre los suplementos. Estas empresas son astutas en cómo afirman cuando el efecto de salud, y seguridad, de sus suplementos no están probados.

Pero aquellos de nosotros en la comunidad de salud en parte tenemos la culpa por la confusión que impulsa al enorme mercado de la medicina alternativa.

Primero, nos contradecimos cada vez que emitimos una nueva serie de pautas. Por ejemplo, el Departamento de Agricultura de Estados Unidos emite nuevas pautas dietéticas aproximadamente cada cinco años. Desde la década de 1980, ha estado el Plato del Buen Comer, la Pirámide de Alimentación, el Sistema de Guía de Comida MyPyramid y MyPlate. Cada una de estas pautas cambió sustancialmente cómo se supone que debemos pensar sobre nuestras dietas. El Departamento de Agricultura planea publicar otra pauta el próximo año.

Y hay docenas de pautas de dieta adicionales publicadas cada año por organizaciones profesionales que abarcan todo desde prevenir el cáncer hasta controlar la diabetes. Invadidos con todas estas pautas diferentes, los consumidores pueden sentirse abrumados y al pensar que los expertos de salud no tienen todas las respuestas, acuden a modas y suplementos de salud.

En segundo lugar, no hay controles, en lo que respecta a los suplementos, para regular cómo podríamos estar sesgados por conflictos de interés. Esto es ilegal en lo que se refiere a los farmacéuticos. No tanto con los suplementos.

Por ejemplo, Duncan de Pure Health, LLC, afirmó ser un experto en nutrición a pesar de no tener educación creíble o un grado para comprobarlo. Actualmente, es demandado por el ministro de justicia de Texas por afirmaciones de representarse falsamente como médico.

Los autores y partidarios de charlatanería nutricional son rápidos en afirmar que hay poco daño potencial. Después de todo, hablamos de nutrientes. Todos necesitamos nutrientes, así que por supuesto que están seguros, ¿verdad? El pensamiento mágico de que los nutrientes o las hierbas que consumismos no tienen potencial de daño a veces no se cuestiona. Pero hemos visto de vez en cuando que las intervenciones nutricionales que suenan grandiosas pueden resultar dañinas. Por ejemplo, en grandes pruebas al azar, beta caroteno aumenta la incidencia de cáncer de pulmón. En otros estudios, la vitamina E y el selenio aumentaron significativamente la incidencia de cáncer de próstata.

La ciencia nutricional es muy compleja. Si estas sustancias son efectivas, actúan como medicamentos y deben regularse como tal. Debido al claro potencial de daño, e incluso muerte, de estos suplementos no regulados, y la falta de ética en la ausencia de fuertes prohibiciones, es tiempo de mejores leyes. Pero, mientras tanto, hay que dejar que los compradores tengan cuidado.