CNNEarrow-downclosecomment-02commentglobeplaylistsearchsocial-facebooksocial-googleplussocial-instagramsocial-linkedinsocial-mailsocial-moresocial-twittersocial-whatsapp-01social-whatsapptimestamptype-audiotype-gallery
Asia

Las feministas chinas ya no están en la cárcel, pero no son libres

Por Steven Jiang

Beijing (CNN) – Un día después de que el gobierno chino liberara bajo fianza a cinco jóvenes feministas, sus familias y seguidores expresaron una mezcla de emociones ante el acontecimiento inesperado.  

Wei Tingting, Wang Man, Zheng Churan, Li Tingting y Wu Rongrong fueron liberadas del Centro de Reclusión de Haidian en las afueras de Beijing el lunes por la noche.  

Las cinco activistas por los derechos de la mujer —cuyas edades están comprendidas entre los 25 y 32 años— fueron capturadas por la policía en tres ciudades distintas justo antes del 8 de marzo, el Día Internacional de la Mujer. Habían estado planificando una campaña contra el acoso sexual en medios de transporte público.  

"Aún estoy sin palabras y no sé cómo reaccionar", tuiteó la novia de Li, Suan Xiaola, a los amigos de la pareja al escuchar la noticia. "Sin lágrimas, sin euforia...solo nos preguntamos qué vamos a hacer después".  

"No puedo esconder mi felicidad por las mujeres, pero ser liberadas bajo fianza no es el final de su prueba", comentó el abogado de Li, Yan Xin, en las redes sociales chinas. "Hasta que sus casos no sean cerrados no podrán vivir sin ataduras; tenemos mucho trabajo por hacer".  

Cargos futuros  

publicidad

La policía había recomendado la semana pasada que los fiscales presentaran cargos por "reunir a una multitud con el fin de alterar el orden público", lo que conlleva una pena máxima de cinco años en prisión.  

Las mujeres aún son consideradas como sospechosas en una investigación criminal que se está llevando a cabo y podrían enfrentar cargos en el futuro, dijo a CNN el abogado de Wu, Liang Xiaojun.  

Estarán bajo vigilancia durante un año y habrá restricción de sus movimientos y actividades; además, la policía puede interrogarlas sobre cualquier tema en cualquier momento, dijo Liang.  

"Este no debería ser un momento de celebración", dijo. "La detención arbitraria y liberación de estas mujeres realmente evidencia el atraso del sistema legal de China".  

Bajo el sistema de registro familiar de China, solamente Li es considerada residente de Beijing. La policía envió a las otras cuatro de vuelta a sus lugares de origen, con lo que interrumpieron el desarrollo de sus trabajos y sus vidas, según los abogados de las mujeres.  

Pioneras  

Muchos han calificado a las cinco integrantes del Grupo de Acción por los Derechos de las Mujeres como pioneras.  

Organizaban sus protestas a través de espectáculos de arte o movilizaciones instantáneas, y hacían énfasis en causas feministas que van desde la lucha contra la violencia doméstica, la igualdad de género en el trabajo, hasta que hubiera más baños públicos para mujeres. Esto llamó la atención del país e incluso generó elogios por parte de los medios de comunicación estatales.  

Su detención había dado lugar a una condena generalizada, incluso de los Estados Unidos.  

"Todos y cada uno de nosotros tenemos el derecho de hablar en contra del acoso sexual y de las muchas otras injusticias que millones de mujeres y niñas sufren en todo el mundo", dijo John Kerry, el secretario de Estado de EE.UU., en un comunicado el viernes.  

"Apoyamos enérgicamente los esfuerzos de estas activistas para lograr un avance en estos temas delicados, y creemos que las autoridades chinas también deberían apoyarlas, no silenciarlas".  

La predecesora de Kerry, Hillary Clinton —quien durante mucho tiempo defendió los derechos de las mujeres y acaba de anunciar que se postula a la presidencia— calificó al encarcelamiento de las feministas como algo "inexcusable" en Twitter, y se unió a la campaña con la etiqueta "liberen a las cinco".  

LEE: Hillary Clinton disgusta al gobierno de China

China había rechazado todas las críticas internacionales, insistiendo que es un país donde rige la ley y que su soberanía judicial debe ser respetada.  

Sin embargo, los partidarios de las mujeres activistas, presienten el escalofriante efecto de su experiencia en la incipiente sociedad civil de China, a medida que el gobernante Partido Comunista bajo el presidente Xi Jinping sigue ejerciendo un férreo control sobre el país.  

"Por supuesto que las personas tendrán más temor", dijo el abogado de Wei, Wang Qiushi. "El tema de los derechos de las mujeres es uno de los asuntos más correctos desde el punto de vista político en China... ahora hasta los que asumen esta causa terminan en la cárcel".