(CNN)– Durante casi 2000 años -de vuelta a los días en que Cristo caminó sobre la tierra- el Templo de Bel ha sido el centro de la vida religiosa en la ciudad siria de Palmira.
Pero ahora, al menos parte del templo de más importancia histórica en Palmira, ha sido destruido por ISIS, según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos, que está citando “fuentes privadas”.
El director de Antigüedades de Siria dijo a CNN este lunes que las autoridades estaban trabajando para confirmar los informes con las fuentes de la ciudad.
Maamoun Abdulakarim decribió el Templo de Bel como “el templo más importante de Siria y de los más importantes en todo Medio Oriente”.
“Estamos a la espera para obtener detalles sobre la verdad de lo ocurrido, la ubicación exacta dentro del templo, y el tamaño de la destrucción”, dijo Abdulakarim.
El templo, del siglo I, es uno de los más grandes y mejor conservados de la región y representa un punto de encuentro entre la arquitectura clásica y oriental, agregó.
Destrucción de santuarios
ISIS se apoderó de la ciudad –con una antigüedad de 2000 años y Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO- en mayo. Los militantes destruyeron dos santuarios musulmanes y publicaron fotos de la destrucción en Facebook, dijo que el gobierno sirio.
La pasada semana se reportó la destrucción del Templo de Baalshamin con grandes cantidades de explosivos.
Otros monumentos, templos y edificios históricos fueron extraídos, y una estatua de un león a la entrada al museo de Palmira fue destruida.
A medida que ha conquistado territorio, ISIS fue destruyendo sitios arqueológicos, alegando que considera a los santuarios religiosos idolatría.