CNNEarrow-downclosecomment-02commentglobeplaylistsearchsocial-facebooksocial-googleplussocial-instagramsocial-linkedinsocial-mailsocial-moresocial-twittersocial-whatsapp-01social-whatsapptimestamptype-audiotype-gallery
Política

Los ataques de Trump son cosa seria, advierten inmigrantes afuera de los estudios de "SNL"

Por Yilber Vega

(CNN Español) - A pesar de las protestas frente a los estudios de NBC, en Nueva York, y de la indignación de varios activistas, organizaciones defensoras de los inmigrantes y políticos hispanos, Donald Trump fue el invitado principal del programa de sátira y humor político “Saturday Night Live”.

En las protestas participaron unos 300 manifestantes convocados por más de una docena de organizaciones latinas y se desarrollaron de manera pacífica.

Los inconformes lamentaron que el popular programa se hubiera convertido en una plataforma para divulgar lo que definieron como retórica racista contra los inmigrantes.

Por segunda ocasión, el magnate y ahora aspirante presidencial republicano fue el conductor de “Saturday Night live”, que se transmite por la televisión estadounidense.

publicidad

Trump condujo el show y se burló de sí mismo. 

"Parte de la razón por la que estoy aquí es que se cómo tomar una broma", aseguró el magnate.

Durante el monólogo introductorio, Trump escuchó el grito de "racista" del comediante Larry David, en una escena preparada, para hacer referencia a la recompensa ofrecida por una organización de activistas latinos para quienes en el público que se atrevieran a interrumpir el show.

"¡Trump es un racista!", le soltó Larry David.

"Es Larry David, ¿qué estás haciendo, Larry?", preguntó Trump siguiendo el guión.

"Bueno escuché que si gritaba me darían 5.000 dólares", completó David la broma preparada.

El programa recreó una reunión imaginaria del gabinete presidencial del 2018, encabezada por Trump, y en la que su hija Ivanka actúa como secretaria del Interior.

En ese momento, un actor que interpretó al presidente de México le entregó un supuesto cheque, satirizando la promesa de Donald Trump de construir un muro en la frontera sur de Estados Unidos y hacer que México pague por ello.

Durante una hora y media, el magnate no solo condujo el programa sino que bailó, cantó, envió mensajes por twitter y se burló de su apariencia física, sus gestos y sus comentarios.

Pero fuera de los estudios, algunos manifestantes dijeron que las posiciones de Trump son un tema serio.

“El racismo no es cosa de chiste, nuestras familias son las que van a pagar las consecuencias por el racismo de Trump” advirtió Karina García, activista de Answer Coalition.

“Todos necesitamos y merecemos respeto y él no nos los está dando, haciendo bromas de nosotros, eso no está bien", dijo la inmigrante mexicana Marta Morales. 

"Me ofendió que me haya dicho, que soy un violador que soy un narcotraficante. Yo trabajo, yo no hago ese tipo de cosas, así que cuando él me demuestre que soy un criminal, entonces le doy la razón", enfatizó Jaime González, otro inmigrante mexicano.

Este domingo, Donald Trump le dijo a CNN que se sintió feliz participando en el programa y se mostró seguro que "Saturday Nigh Live" registrará uno de los niveles de audiencia más altos de sus 40 años de historia.