(CNN) – Un atleta olímpico australiano dice que el dopaje ruso le robó una medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Londres en 2012… y quiere lo que por derecho le pertenece.
Jared Tallent, quien practica la marcha atlética, terminó en segundo lugar en la marcha de 50 kilómetros detrás del ruso Sergey Kirdyapkin, quien dio positivo en pruebas de dopaje antes y después de los Juegos Olímpicos de Londres, pero aun así le permitieron que compitiera.
“Ha sido un largo proceso para llegar a este punto y ver que los resultados en el informe más amplio muestran todo lo que ha estado pasando se siente increíble. La mayoría de personas ha sabido sobre los grandes problemas que existen durante algún tiempo”, le dijo Tallent a CNN.
Tallent hizo sus comentarios luego de la publicación de un informe condenatorio, encargado por la Agencia Mundial Antidopaje (WADA, por sus siglas en inglés), el cual afirma que existe una “cultura profundamente arraigada de hacer trampa en todos los niveles” dentro de los deportes rusos, y también implicó a la IAAF en cubrir el abuso.
“Han pasado 1.185 días desde que participé en la competencia en Londres. ¿Cuántos días más tengo que esperar para recibir mi medalla olímpica?”, tuiteó Tallent.
El informe hace un llamado a que se impusieran sanciones contra la federación de atletismo de Rusia, y recomienda que cinco atletas y cinco entrenadores, todos de Rusia, enfrenten una prohibición de por vida, entre ellos el entrenador de marcha atlética Viktor Chegin, quien ayudó a entrenar a Kirdyapkin, el rival de Tallent.
Prolongada campaña
Tallent ha estado haciendo campaña para recibir un reconocimiento legítimo en la carrera olímpica desde que se llevó la medalla de plata en agosto de 2012.
“He tenido que soportar abuso en Twitter y Facebook por parte de rusos que creen que me estoy quejando”, le dijo Tallent a los medios locales el martes.
“Los atletas rusos que practican la marcha han enfrentado grandes problemas durante varios años… esto es algo que debería haber sido abordado probablemente hace siete años”, dijo Tallent, quien ha ganado tres medallas olímpicas en el transcurso de su carrera, entre ellas una medalla de bronce y una de plata en los Juegos Olímpicos de Beijing en 2008.
Aunque Tallent dice que él se siente reivindicado por los hallazgos del informe de la WADA, aún está a la espera de obtener esa medalla, y señala que no es el único a quien le han dejado de dar el reconocimiento que merece.
“Está el caso de un irlandés que practica la marcha; él no logró pararse en el podio. Terminó en cuarto lugar en la marcha atlética de 50 km en los Juegos Olímpicos de Londres, y no pudo disfrutar de su éxito en el podio. Ha habido varias competencias de las que muchos han quedado fuera a pesar de tener un buen desempeño”, le dijo a CNN.
“Espero que la medalla de oro venga a mí desde Londres. Solo estoy esperando que eso suceda”.
El atleta a quien Tallent se refiere es Robert Heffernan, quien se describe a sí mismo en su cuenta de Twitter como un “medallista olímpico a la espera”.
‘La IAAF debería nivelar el campo de juego’
El director ejecutivo de Athletics Australia, Phil Jones, publicó una declaración el martes en la que decía que la asociación aceptaba la decisión de empezar a considerar sanciones contra la Federación Rusa de Atletismo.
“Reiteramos nuestra posición absoluta en contra del dopaje en el deporte y le pedimos a la IAAF que tome todas las acciones necesarias para nivelar el campo de juego para los atletas. No se debe permitir que circunstancias como las establecidas en este informe continúen”, indicó la declaración.
También le pidió a la IAAF que reconsiderara que Rusia fuera la sede del Campeonato Mundial de Equipos de Marcha Atlética del próximo año.
“Al comprender las acusaciones hechas antes de este informe y dentro del mismo, animamos al Consejo de la IAAF a que reconsidere si la Federación Rusa de Atletismo son los organizadores apropiados. Athletics Australia recomienda que apoyemos a cualquier atleta que desee boicotear los eventos a no ser que se cambie el lugar”.