(CNN Español) – En el turístico puerto mexicano de Acapulco, muchos comerciantes y dueños de negocios han bajado las cortinas. Detrás de la decisión, según han reconocido algunos, está el crimen organizado.
Cifras de la Asociación de Comerciantes establecidos en La Costera, revelan que en los últimos meses, cerca de 200 locales han cerrado por la inseguridad.
Para Laura Caballero, quien preside ésta agrupación la situación ha llegado a tal punto que no hay dinero que alcance para pagar al fisco y a los criminales que los extorsionan. Por ello, ha propuesto buscar un acuerdo de paz con la delincuencia.
Entrevistada por CNN, Caballero dijo que el pacto seria para que todos puedan trabajar tranquilos: “Yo creo que es algo que existe en todas partes del mundo, no estamos pidiendo que se aniquilen, estamos pidiendo que quien decide trabajar como nosotros por el camino espinoso y que sabe que lleva en riesgo la vida, que vaya pero que vea que también que hay quien queremos trabajar por el camino de la luz, sin ningún problema y lo que queremos es respeto para todos lados”.
De acuerdo a cifras oficiales, entre enero y febrero, en Guerrero han sido asesinadas 452 personas -79 más que en el mismo período de 2015- y se han abierto averiguaciones por 24 secuestros e igual número de casos por extorsión.
Laura Caballero dice que “no se puede tapar el sol con un dedo” y que la violencia no ha podido disminuir a pesar, señala, de la importante movilización de fuerzas federales en los últimos dos años. 4 mil elementos tan solo durante la temporada vacacional de Semana Santa.
“Contamos efectivamente con un sinnúmero de efectivos sobre la costera Miguel Alemán y en Guerrero, pero la violencia siguió. Quiero decir que no es con esos antiguos esquemas que se han venido trabajando y proponiendo como vamos a detener la violencia. Vamos a apostarle a algo nuevo, vamos a arriesgarnos a pedir la paz y vamos a arriesgarnos con acciones”, dice Caballero
Y su manera de arriesgarse dice, es intentar una tregua con la delincuencia organizada.
El Fiscal de Guerrero, Xavier Olea, ha señalado que en el estado operan al menos 50 grupos criminales quienes se pelean el control de varias zonas y que la causa de la disputa dice, es la goma de opio que después convierten en heroína.
Otros investigadores señalan que Guerrero es disputado por seis cárteles de la droga, mediante 17 grupos de sicarios, quienes buscan controlar ésta entidad clave para el trasiego de droga por la ruta del pacífico.
En medio de la batalla, están pobladores como Caballero quien afirma que quieren que el puerto de Acapulco, recobre su brillo. “Queremos seguir siendo favorecidos por todos los turistas que son bien recibidos y de verdad que vivimos en el paraíso y no queremos que éste paraíso se convierta en un infierno”, sostiene.
Y para que no se convierta en un infierno dice, es que impulsa ésta particular y controversial iniciativa, que de momento, no ha obtenido respuesta por parte de las autoridades locales.