(CNNMoney) – Los líderes republicanos tienen una larga lista de puntos para discutir los defectos de la ley de salud conocida como Obamacare.
Poco antes de su toma de posesión el mes pasado, Donald Trump dijo que el Obamacare es “un completo y total desastre. Está implosionando mientras estamos sentados”. Y el Partido Republicano ha señalado una serie de problemas, incluyendo los aumentos de primas que en promedio son de más del 20%, una caída en el número de aseguradoras que compiten en los mercados de Obamacare y el creciente descontento de los consumidores con altos deducibles y redes de médicos limitadas.
¿Qué quitarían y qué dejarían los usuarios del Obamacare?
Hasta ahora, un cuidadoso análisis sobre cuatro quejas de los republicanos muestra una situación más matizada y sugiere que las peleas políticas frente la ley pudieron haber contribuido a algunos de sus problemas.
A continuación una guía y análisis de los puntos del Obamacare que más resaltan los miembros del Partido Republicano.
#1: El mercado de seguros de salud individual está colapsando
— El portavoz de la Cámara de Representantes, Paul Ryan, dijo en “Meet the Press” de CNN a principios de este mes que “la ley está literalmente en medio del colapso”.
— El líder de la mayoría en el Senado, Mitch McConnell, dijo en enero que “Obamacare sigue despedazándose en todo nivel, dejando que los estadounidenses recojan las piezas”.
Los republicanos están en lo correcto sobre que el mercado individual —que la Ley del Cuidado de Salud Asequible (ACA, por sus siglas en inglés) buscaba revisar— tiene desafíos en este momento. Muchas compañías de seguros dejaron los intercambios a finales de 2016 después de perder dinero, lo que redujo las opciones para los individuos. Cinco estados tienen solamente un solo asegurador para proporcionar la cobertura en 2017.
Pero incluso con esos desafíos, los intercambios de la ley de salud están dándole cubrimiento a más de 10 millones de estadounidenses. Algunos analistas dicen que estos están lejos de colapsar.
“Nunca he creído que el mercado individual estuviera en una verdadera espiral de la muerte”, dice Joe Antos del conservador American Enterprise Insitute. Un espiral de la muerte es cuando muchas personas sanas dejan un mercado en el que solo quedan personas enfermas y las aseguradoras no pueden repartir los costos.
Los mercados de seguros también varían mucho según el estado, dijo John Ayanian, director del Instituto de Política e Innovación en Salud de la Universidad de Michigan.
“Hay un buen número de estados donde los intercambios están funcionando bastante bien, los costos no aumentan demasiado rápido, y la gente tiene una serie de opciones de planes de salud”, dijo Ayanian. “Hay otros estados donde tienen una sola opción y los precios están subiendo”.
Al mismo tiempo, la legislación escrita por los republicanos ha dado lugar a algunos de los problemas en los intercambios. Más directamente, el Congreso limitó los pagos federales a las aseguradoras que encontraron costos más altos de lo esperado en los intercambios. Los republicanos llamaron a los pagos “rescates para las compañías de seguros”, a pesar de que medidas federales similares se han utilizado en otros mercados, como los planes de medicamentos de Medicare implementados hace más de una década.
#2: Los gastos extras son muy altos
— Ryan dijo en CNN el mes pasado que “Los deducibles son tan altos que ni siquiera se siente como si tuvieras un seguro”.
— McConnell escribió en una columna de opinión en CNN el año pasado que Obamacare está “aumentando los costos a niveles anteriores inimaginables y está perjudicando a la misma gente que tenía la intención de ayudar”.
Los gastos extras son una de las principales preocupaciones de los votantes cuando se trata de atención médica. En enero de 2017, la encuesta de seguimiento de la Fundación de la Familia Kaiser encontró que el 67% de los encuestados dijo que su principal prioridad de salud era “reducir la cantidad que los individuos debían pagar por el cuidado de la salud”, seguida muy de cerca por “reducir el costo de los medicamentos recetados”, con un 61%.
Los altos deducibles —usualmente de miles de dólares— se han vuelto parte del problema.
Las personas que están mas molestas sobre el ACA, dice Chris Jennings, un funcionario de salud de los gobiernos de Clinton y Obama, “quieren deducibles más bajos y más beneficios”.
Pero las propuestas más populares de los republicanos para reemplazar los actuales planes de seguro individual — reducir los beneficios requeridos y dar más acceso a las cuentas de ahorros de salud preferenciales— podrían incrementar los gastos extras para quienes usan los servicios de salud. Sin embargo, sería menos costoso para las personas que están sanas durante la mayor parte del año.
Dejar que las personas compren pólizas básicas “significa que los seguros no empiezan a tener efecto hasta que las personas tenga facturas médicas muy significativas”, dice Ayanian.
En una Conferencia Nacional de Políticas de Salud el mes pasado, una exfuncionaria de salud del gobierno de Obama, Sherry Glied, preguntó si tener un deducible de 10.000 o 20.000 dólares con una cuenta de ahorros para la salud de quizá 1.000 dólares “¿es mejor que no tener cobertura en absoluto? Mucha gente quedaría en bancarrota con 20.000”, particularmente si no tienen los recursos para financiar una cuenta de ahorros de salud.
#3: Los pacientes de Medicaid no pueden encontrar doctores que los traten
— El senador Bill Cassidy dijo en el Senado el mes pasado que [Obamacare] “Es la ilusión de cobertura sin el poder de acceder”.
— En un foro ciudadano de CNN, Ryan preguntó “… nuestra preocupación es que las personas en Medicaid no puedan tener acceso a un médico y si no puede, ¿qué es lo bueno de su cobertura?
Los estudios sugieren que un pago más bajo —cada estado establece sus propias tarifas— disminuye la participación de los médicos en Medicaid y encontrar atención especializada puede ser difícil en algunas partes del país. Pero en general la literatura académica muestra que los pacientes de Medicaid tienen un momento mucho más fácil y son mucho más propensos a obtener servicios de atención de salud que las personas sin seguro.
Benjamin Sommers de la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Harvard, que ha estudiado este tema, dijo que la idea de que los pacientes con Medicaid no pueden obtener atención viene de ver la cantidad de médicos y otros proveedores que aceptan el pago del programa generalmente más bajo y con mayores cargas administrativas.
“Pero esa no es la mejor manera de estudiar esto. La mejor pregunta es cuando hablas con la gente con cubrimiento y les preguntas si pueden tener la atención que necesitan”.
Y añade que “estudio tras estudio” muestra que “cuando las personas obtienen Medicaid, su acceso a la salud mejora dramáticamente”, incluyendo un mayor uso de la atención primaria, la detección preventiva y el cuidado de las enfermedades crónicas. “Incluso con algunas limitaciones potenciales de la participación del proveedor, los pacientes están mucho mejor cuando reciben esa cobertura [de Medicaid]”, dijo Sommers.
#4: ACA reduce empleos
— El secretario de Salud Tom Price dijo durante su sesión de confirmación en el Senado el mes pasado que “ACA ha disminuido la mano de obra al equivalente de 2 millones de empleados de tiempo completo”.
— El presidente del Comité de Salud del Senado, Lamar Alexander, dijo en enero: “En todo el país … los empleadores han reducido empleos para pagar los costos de Obamacare”.
Gran parte de este punto de discusión proviene de un informe de la Oficina de Presupuesto del Congreso en 2014 que proyectaba que la fuerza laboral de la nación se reduciría en alrededor de 2 millones de empleos debido a la ley de salud, así como informes anecdóticos acerca de empleadores que reducían las horas de los trabajadores para evitar que se active el requisito de la ley por el que ofrecen el seguro de salud.
Pero una lectura cuidadosa del informe señala que la disminución que se estiman sería más por parte de los trabajadores más viejos que voluntariamente optan por trabajar menos horas que porque los empleadores recorten los horarios de los trabajadores.
Esto es quizás porque ellos temen perder sus subsidios o su elegibilidad de Medicaid, o se han retirado porque ya no tienen que trabajar más para obtener un seguro de salud.
Es cierto que algunos empleadores reducen las horas de trabajo de los empleados por debajo del umbral de las 30 horas para evitar el requisito de cobertura del empleador.
Sin embargo, el fortalecimiento de la economía, incluso en el sector de la salud, ha reducido la mano de obra de tiempo parcial y ha ampliado el empleo a tiempo completo, mucho más allá de las cifras reducidas por la Ley de de Cuidado de Salud Asequible, según la mayoría de los analistas.
De hecho, se han creado tantos puestos de trabajo en la industria desde que ACA se convirtió en ley, que se está convirtiendo en un problema en sí mismo, porque tener una porción tan grande de la economía dedicada a la atención médica hace más difícil reducir el gasto en salud.