Nota de programación: mire CNN Special Report “Missing: Madeleine McCann” este viernes 5 de mayo a las 02:00 GMT y el sábado 6 a las 0600 GMT en la señal de CNN Internacional para descubrir lo más reciente en esta investigación.
(CNN) – Mientras sus padres compartían tapas con amigos en un restaurante a sólo 54 metros de distancia, se suponía que Madeleine McCann dormía en el apartamento de vacaciones de su familia, en el pintoresco pueblo portugués de Praia da Luz.
Pero cuando su madre, Kate McCann, fue a ver a Madeleine y a sus hermanos gemelos más pequeños alrededor de las 10:00 p.m. el 3 de mayo del 2007, lo que descubrió transformó las vacaciones de ensueño de la familia en una pesadilla, una que continúa después de una década.
A pocos días de su cuarto cumpleaños, la niña británica había desaparecido sin dejar rastro de la casa que su familia alquilaba en la región del Algarve, en la costa sur de Portugal. Desde entonces se han reportado avistamientos en todo el mundo, desde Europa y Marruecos hasta Brasil y Nueva Zelandia. Algunos sospechosos incluso han sido nombrados e investigados, pero la búsqueda de Madeleine continúa.
Luego de 10 años, esto es lo que necesitas saber sobre el caso.
“Se siente como si nos la hubieran robado”
Hablando unos pocos días antes del “difícil” aniversario, los padres de Madeleine (Kate y Gerry McCann) trataron de poner en palabras la gama de emociones que han soportado durante su larga experiencia de una década.
Para Kate, quien reveló que sigue comprando regalos de cumpleaños y de Navidad para Madeleine, hay ira y dolor por lo que se les quitó. En sólo unas semanas, Madeleine tendría 14 años.
“Ya es hora de que hubiéramos encontrado a Madeleine”, dijo Kate. “Deberíamos haber sido una familia de cinco personas durante todo este tiempo y, sí … se siente como si nos la hubieran robado”.
Pero la pareja también hizo hincapié en su determinación y esperanza de que la actual investigación les proporcionará respuestas largamente esperadas. También reafirmaron la creencia que dicen haber sostenido siempre, según la cual Madeleine todavía está viva en alguna parte.
“Ningún padre va a renunciar a su hijo a menos que sepa con certeza que está muerto”, afirmó Gerry. “Simplemente no tenemos ninguna evidencia”.
Un caso amplificado por la tecnología
Las autoridades dicen a menudo que las primeras horas después de que una persona desaparece son críticas para la investigación. En este caso, la evidencia descubierta en ese momento no ha respondido a preguntas sobre el destino de Madeleine, al menos no por el momento.
Pero examinar lo que sucedió en las horas y minutos después de que desapareció Madeleine ayuda a explicar por qué, después de 10 años, este caso sigue teniendo nuestra atención.
La desaparición de Madeleine en el 2007 coincidió con un crecimiento explosivo en la prevalencia de las cámaras de teléfonos móviles. Al mismo tiempo, el acceso a internet de alta velocidad y Facebook estaban comenzando a conectar el mundo como nunca antes.
“Probablemente el de ella fue el primer caso de niños desaparecidos de la era del internet”, le dijo a CNN Clarence Mitchell, portavoz desde hace muchos años de la familia McCann, en una reciente entrevista. “A pocos minutos de su desaparición, los familiares pudieron enviar un video de alta calidad de ella que se publicó en sitios web, páginas de Facebook y fue enviado a las salas de redacción.
Todo esto ayudó a impulsar el interés público inmediato en el caso, que ha perdurado durante una década.
“Todavía no tenemos pruebas definitivas”
Desde que Kate McCann alertó por primera vez sobre la desaparición de su hija, la búsqueda que siguió involucró a investigadores del Reino Unido, Portugal y otras agencias de todo el mundo. Actualmente, la Policía Metropolitana de Londres tiene un equipo dedicado de cuatro detectives que trabaja en el caso, junto con sus homólogos de la policía portuguesa.
Días antes del décimo aniversario de la desaparición de Madeleine, Mark Rowley, comisario adjunto de la Policía Metropolitana, destacó en una entrevista, el 25 de abril, que su equipo se dedica a encontrar respuestas, incluso si las concretas siguen siendo difíciles de alcanzar.
“Es inusual tener un caso como este en el que estás haciendo una investigación de una persona desaparecida, donde 10 años después, todavía no tenemos evidencia definitiva sobre lo que exactamente ha sucedido”, afirmó Rowley. “Y es por eso que tenemos la mente abierta, aunque la gente es pesimista sobre las perspectivas, porque no tenemos evidencia definitiva de lo que le ha pasado a Madeleine”.
Se redujo el alcance, pero aún no se presentaron cargos
En los días y meses después de la desaparición de Madeleine, la policía portuguesa centró su atención en unos pocos sospechosos (Robert Murat, un británico que vivía en Portugal, y luego los propios Gerry y Kate McCann), pero los casos fueron finalmente desechados, por lo que los tres fueron resarcidos económicamente y recibieron disculpas de varios medios de comunicación británicos.
En el 2013, la policía británica publicó bocetos de sospechosos potenciales y en el 2014 aseguró que estaban buscando a un hombre que asaltó a cinco mujeres británicas de vacaciones en la región. Pero diez años después, nadie ha sido acusado.
Desde que la Policía Metropolitana empezó a revisar el caso, en el 2011, Rowley dijo que su equipo ha recopilado más de 40.000 documentos (el trabajo acumulado de la policía portuguesa que lideró las primeras etapas de la investigación) además de la investigación de varios agentes privados y pistas generadas por las numerosas llamadas del público. Fuera de eso, miles de pistas potenciales fueron generadas, permitiendo que el equipo de Rowley redujera el alcance a unas 600 personas consideradas “interesantes para la investigación”.
“Eso no significa que todos ellos sean sospechosos, pero es gente que fue sospechosa en ese momento o que tiene un historial que nos hace sospechar sobre ellos”, afirmó Rowley.
A medida que la investigación (oficialmente llamada Operación Grange) entra en su sexto año, alrededor de 15,7 millones de dólares ya se han gastado en la búsqueda de Madeleine. En marzo, el Ministerio del Interior del Reino Unido aprobó 103.000 dólares para financiar la investigación hasta septiembre del 2017, y a pesar del considerable costo, Rowley dijo que los fondos son recursos bien gastados.
“Hemos examinado a muchos sospechosos potenciales. Hoy tenemos un equipo mucho más pequeño enfocado en un pequeño número de líneas de investigación críticas que creemos que son significativas”, dijo. “Si no pensáramos que fueran significativas, entonces no las estaríamos siguiendo”.