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Marihuana

Hay poca evidencia de que la marihuana ayude a controlar el dolor crónico, según estudio

Por Susan Scutti

(CNN) -- La marihuana medicinal es legal ahora en 28 estados y en el Distrito de Columbia en Estados Unidos. Y cada vez más hay gente que se está volcando al cannabis para tratar una cantidad de síntomas y condiciones de salud, como náuseas, desorden bipolar y convulsiones.

Pero cuando se trata de usar marihuana para tratar dolores crónicos o trastorno de estrés postraumático (PTSD por sus siglas en inglés), dos estudios relacionados publicados este lunes en la revista Annals of Internal Medicine encontraron poca evidencia científica para apoyar su efectividad o seguridad.

Casi del 80% de personas que requirieron marihuana medicinal querían aliviar el dolor, mientras que más de un tercio citaron PTSD como su razón primaria, escribieron investigadores del Departamento de Asuntos de Veteranos de Estados Unidos, citando un pequeño estudio reciente.

Como resultado, los autores señalaron que los médicos necesitan hablar cada vez con sus pacientes sobre los beneficios potenciales y riesgos del uso del cannabis. Pero, ¿dónde pueden los médicos recurrir a material basado en evidencia?

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¿Más daño que bien?

Los investigadores encontraron 27 estudios que examinaban el uso de productos de cannabis para dolores crónicos en adultos. Pero lo que descubrieron fue evidencia insuficiente para concluir si la marihuana medicinal era útil para quienes sufrían dolores crónicos, con una sola excepción: neuropatías y dolores nerviosos. Incluso allí, el equipo halló una débil evidencia de que el cannabis ayudara a aliviar dolores neuropáticos crónicos.

En contraste, los investigadores hallaron evidencia suficiente que concluía que el cannabis usado entre la población general probablemente incrementaba el riesgo de accidentes automovilísticos, síntomas psicóticos y deficiencia cognitiva a corto plazo.

Luego, el equipo revisó información de dos investigaciones y tres estudios que evaluaban preparaciones de cannabis usadas para tratar trastorno de estrés postraumático entre adultos. Aquí, los autores hallaron estudios científicos disponibles con fallos debido a la pequeña cantidad de participantes o a la falta de inclusión de los grupos de control que no consumían cannabis.

Una vez más, los investigadores decidieron que la evidencia era insuficiente y no lo demasiado rigurosa para tener conclusiones firmes sobre la efectividad del cannabis en esta población de pacientes. Peor aún, un estudio de veteranos con PTSD mostró un pequeño pero “significativo” empeoramiento de los síntomas entre los veteranos que empezaron o siguieron usando cannabis durante el periodo de estudio, dijo el equipo.

“Encontramos evidencia baja a moderada de que el uso del cannabis está asociado con un mayor riesgo de síntomas psicóticos, psicosis, manías y —en usuarios activos— disfunción cognitiva a corto plazo”, escribieron los autores.

El doctor Sanjay Gupta, jefe de corresponsales médicos de CNN, dijo que “es muy pronto para entender realmente qué tan efectivo puede ser el cannabis para tratar un dolor crónico o PTSD o para entender completamente las maneras en las que el cannabis puede dar alivio”.

La investigación adicional llevaría tiempo, dice Gupta, quien no estuvo involucrado en el nuevo estudio pero que ha reportado ampliamente sobre la marihuana medicinal en tres documentales de CNN sobre el tema que salieron al aire en 2015; estos ofrecen al público un asiento en primera fila sobre el primer estudio clínico federal aprobado sobre el uso de la marihuana para el PTSD.

Respecto a la nueva investigación Gupta asegura que los científicos necesitan primero abordar primero las cuestiones de seguridad y las estrategias de dosificación confiables y consistentes.

El cannabis sigue siendo una sustancia de la Lista I, la clasificación de la DEA para fármacos que se cree que tienen un alto potencial de abuso junto con algún potencial para crear una severa dependencia. Con restricciones federales impuestas a la marihuana, los científicos deben superar varios obstáculos legales y de procedimiento para investigarla. Algo que para Gupta "hace que estos importantes estudios sean más difíciles de llevar a cabo”.