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El Apunte de Camilo

Y se hizo la luz

Por Camilo Egaña

(CNN Español) -- Son unas señales de hidrógeno más bien debiluchas, pero señales, al fin y al cabo, huellas del universo 180 millones de años después del Big Bang.

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Las ha captado una pequeña antena de radio en Australia.

Astrónomos del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT) y la Universidad Estatal de Arizona precisan que tales señales constituyen la evidencia más temprana de hidrógeno que ha podido observar el ser humano y que es el primer indicio de la formación de estrellas y el fin de la llamada Edad Oscura del cosmos: 180 millones de años.

Oscuridad total, granítica, impenetrable, infinita. Y en ese mundo extrañísimo, en plena oscuridad, la vida se fue abriendo paso, la materia por su lado, las ondas gravitacionales haciendo otro tanto, y un buen día … se hizo la luz.

“Hágase la luz’’, la expresión proviene del tercer versículo bíblico del Génesis y es tan bella que desarma incluso a los más incrédulos: ‘Y vio Dios que la luz era buena; y separó Dios la luz de las tinieblas´´. Pero a tenor con lo que está pasando en este mundo nuestro, qué bien nos vendría un poco más de luz. Y menos tiniebla.

Intenten imaginar esas primeras estrellas que comienzan a parpadear, poco a poco, como quien no quiere la cosa.

La explicación de los científicos sobre cómo se hizo la luz es demasiado prosaica y los poetas no han dicho ni esta boca es mía: que todo se debió a los átomos de hidrógeno en el universo y a la radiación que dejó el Big Bang; la verdad es que eso no contenta a los soñadores ni a los que creen que el mundo se hizo en siete días. Y mucho que se nota, si me lo permiten.

Y si no, miren a su alrededor, una mirada, incluso una miradita displicente, basta para que todos vayamos del asco al hartazgo, aunque demos por sentado que cada noche podamos contar con las estrellas.