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México no ha detenido a los miles de inmigrantes que avanzan hacia el norte (por el momento)
(CNN) -- Cruzaron un río, recorrieron cientos de kilómetros y persuadieron a los bloqueos policiales para que los dejaran pasar.
Una semana y media después de su llegada a la frontera de Guatemala y México, miles de migrantes de América Central siguen avanzando lentamente hacia el norte.
Y aunque su número ha disminuido en los últimos días, muchos sostienen que llegarán a Estados Unidos, sin inmutarse por los planes de la administración Trump de enviar soldados a la frontera y, hasta el momento, sin ser afectados por los intentos de los funcionarios mexicanos de convencerlos de quedarse.
Después de días de rápidos desarrollos, aquí están las cosas en México:
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La tensa situación ha obligado a las autoridades mexicanas a caminar sobre una cuerda floja política, tratando de apaciguar al gobierno de EE.UU. y al mismo tiempo apegarse a una estrategia más acorde con los objetivos políticos de su propio país. El objetivo declarado: tratar a los migrantes con dignidad y respetar los derechos humanos, al mismo tiempo que se aplican las leyes de inmigración.
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En un video publicado en Twitter el viernes, el presidente de México Enrique Peña Nieto hizo su presentación.
"Somos un país que valora y reconoce la dignidad de las personas migrantes", dijo. "Casi todos tenemos algún pariente o amigo cercano que ha migrado".
Bajo un plan denominado "Estás en tu casa", los funcionarios dijeron que los migrantes en edad laboral pueden solicitar asilo y serían elegibles para ciertos trabajos, siempre que se queden en Chiapas o Oaxaca, dos estados del sur de México. Los migrantes se encuentran actualmente en Oaxaca, probablemente a semanas de distancia de la frontera con los Estados Unidos.
Negociaciones en un bloqueo policial
Partieron en la oscuridad de la mañana del sábado, una rutina que habían seguido durante días. Pero mientras caminaban por una carretera a las afueras de Arriaga, México, pronto se dieron cuenta de que esta caminata matutina no sería como las demás.
Un muro de policías con equipo antidisturbios los recibió, bloqueando su camino.
Durante horas, representantes de los migrantes negociaron con las autoridades. La policía dijo que habían bloqueado al grupo para informarles sobre el nuevo plan del gobierno.
Los migrantes se negaron a inscribirse y la policía finalmente los dejó pasar, siempre que los miembros del grupo permanecieran abiertos a seguir negociando en futuras paradas.
Gas lacrimógeno mientras otro grupo intenta cruzar
Mientras este grupo continúa su viaje, otros grandes grupos de migrantes centroamericanos siguen sus pasos, incluido otro de aproximadamente 3.000 personas que llegaron a la frontera Guatemala-México este domingo.
La situación rápidamente se salió de control, según la corresponsal de CNN en Español, Michelle Mendoza, quien informó desde la escena.
Los migrantes arrojaban piedras y palos. Las fuerzas mexicanas lanzaron gases lacrimógenos.
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En los enfrentamientos, un ciudadano hondureño de 26 años, Henry Adalid Díaz Reyes, terminó muerto, según la Fiscalía General de Guatemala. Las autoridades están investigando.
Varios otros migrantes y policías sufrieron heridas leves. El ministro del Interior de México, Alfonso Navarrete, condenó la violencia, afirmando que los "agresores" habían llegado armados con cócteles molotov.
"La única manera de ingresar a México es siguiendo las leyes de inmigración", dijo.
El lunes, muchos de los que habían sido detenidos en el puente fronterizo el día anterior parecían estar cruzando el río Suchiate desde Guatemala hasta México.
No está claro cómo las autoridades los tratarán en el otro lado.
