(CNN Español) – Los linchamientos en México han aumentando en los últimos cuatro años, según las autoridades, que expresaron su preocupación por el incremento de esta tendencia que se ha registrado en todo el país con la que los ciudadanos hacen “justicia por mano propia”.
La alerta la dio la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) en el Informe Especial sobre los Linchamientos en el territorio nacional publicado este miércoles, que establece que un aumento sustancial de estos casos entre 2015 y 2019. Durante 2015 se registraron 43 casos; en 2016, 59; en 2017, 60; en 2018, 174, y en lo que va de 2019 ya se han reportado 67 casos.
En los primeros cinco meses de 2019 los linchamientos han dejado 107 víctimas, frente a las 271 víctimas del año pasado, según la CNDH. El reporte se basó en los reportes de estos hechos en la prensa nacional.
La percepción generalizada de inseguridad y la desconfianza y “lejanía” de la sociedad respecto a las autoridades ha propiciado esta tendencia violenta en todo el territorio mexicano.
“La falta reiterada de cumplimiento y aplicación de la ley, así como la incapacidad de las distintas instancias de seguridad pública para generar condiciones que permitan la convivencia pacífica entre las personas, han propiciado que se canalice o dirija el hartazgo e impotencia de estas últimas, ante una realidad que las vulnera y lastima, para que incurran en acciones violentas contra quienes consideran o suponen que cometen delitos o atentan en su contra o de la comunidad a la que pertenecen”, dice el reporte de la CNDH.
El organismo también señaló que los linchamientos son una muestra de la “falta de capacidades del Estado para mantener el monopolio legítimo de la fuerza, el control sobre el territorio, y para garantizar la aplicación de la ley y la seguridad de la población”.
Rumores, la causa más común de linchamientos
La CNDH asegura en su reporte que los rumores de delitos perpetrados son los causantes de que una comunidad se exalte y persiga a los supuestos responsables.
Según el reporte, grupos de hombres y mujeres de diferentes edades y estratos sociales participan o incitan estos hechos violentos “ante la tentativa o rumor de un robo, un secuestro, una violación, un abuso policiaco”, exacerbando los niveles de “enojo, frustración, rabia o descontento de la comunidad”.
Por ejemplo en 2018, se registraron al linchamientos en en al menos dos estados de México: uno en Hidalgo (donde murieron un hombre y una mujer) y otro en Puebla (en el que dos campesinos perdieron la vida) por supuestamente robar niños. El origen de esta creencia estaba en mensajes con rumores sobre presuntos robos de menores que se compartieron en redes sociales.
Casos de linchamientos por rumores se han presentado también en Colombia, Ecuador e India, entre otros.
Varios casos de linchamientos ocurridos en los últimos seis años en México se caracterizan por la difusión de mensajes a través de medios sociales —a diferencia de lo que ocurría décadas atrás—, especialmente aplicaciones como WhatsApp. La CNDH dice que las redes sociales son importantes en términos de difusión, más que de organización de los hechos como tal.
Sin embargo, como dijo anteriormente a CNN en Español la antropóloga Elisa Godinez, que lleva años monitoreando y estudiando estos sucesos, por cuenta de las redes sociales, “los rumores” han alcanzado tal impacto, que al final se llega a estos niveles de violencia.
“Es la primera vez que el rumor alcanza estas proporciones”, comentó Godinez en relación a varios casos conocidos en México. Sin embargo, la experta explicó que al ser un fenómeno relativamente nuevo aún se necesitaba más investigación tanto académica como por parte de las autoridades.
Ante esta problemática, Luis Raúl González Pérez, ombudsperson nacional de México, hizo énfasis en que los linchamientos son una conducta ilícita que “no constituyen una vía para alcanzar la verdad y la justicia”, según un comunicado de este miércoles, y dijo que la seguridad y la aplicación de la ley no puede quedar en manos de las autoridades, por lo que instó al Estado a asumir estas responsabilidades y garantizar el orden y la justicia en el país.