CNNEarrow-downclosecomment-02commentglobeplaylistsearchsocial-facebooksocial-googleplussocial-instagramsocial-linkedinsocial-mailsocial-moresocial-twittersocial-whatsapp-01social-whatsapptimestamptype-audiotype-gallery
Gran Bretaña

Boris Johnson se alista para ser el nuevo primer ministro británico, ¿ahora qué sigue?

Por Luke McGee

Londres (CNN) -- Boris Johnson está a pocas horas de realizar su sueño de toda la vida.

Este miércoles, Johnson visitará a la reina Isabel II, quien invitará oficialmente al nuevo líder del gobernante Partido Conservador a formar un gobierno.

Después de su breve reunión con la reina, el nuevo primer ministro y su nuevo secretario privado principal viajarán de regreso a Downing Street, donde, tradicionalmente, los nuevos primeros ministros ofrecen un discurso a la nación fuera de la puerta negra del número 10.

La reina Isabel II saluda a Boris Johnson, en una imagen de archivo.

Antes de todo eso, la líder saliente Theresa May se dirigirá a los legisladores en la Cámara de los Comunes en su última sesión de las Preguntas al Primer Ministro: el escandaloso espectáculo que tiene lugar todas las semanas cuando se reúne el parlamento.

Los primeros ministros a menudo utilizan este último evento para resolver conflictos políticos y agradecer a sus partidarios. Dada la pesadilla en la cual May ha intentado gobernar, las personas que aman el teatro político esperan una buena dosis de lo primero.

Después de su discurso final en la Cámara de los Comunes, May viajará al Palacio de Buckingham e informará a la reina que renuncia como primera ministra.

publicidad

La tradición dicta que May recomiende a otra persona para formar un gobierno y que la reina invite a este individuo al palacio.

Eso es lo formal, ahora pasemos a la política.

Después de entrar en Downing Street por primera vez, el nuevo primer ministro tiene un par de cuestiones urgentes que abordar. Primero, la administración pública informará al nuevo líder sobre todo -- sí, todo-- lo que necesita saber para el trabajo.

Hay otras tareas que es necesario cumplir en la primera semana. Desde dar instrucciones sobre lo que deben hacer los submarinos británicos si Londres es blanco de un ataque nuclear, hasta la organización de asesores y nombramientos políticos, es un período agitado.

De forma más inmediata, Johnson deberá continuar con la formación de su gobierno. En este momento, nadie sabe a quién convocará el nuevo primer ministro. Durante la campaña, atrajo admiradores de todo el Partido Conservador.

Los rumores son descabellados, pero el consenso común en Westminster es que hay más personas que buscan un puesto que vacantes. Esto significaría que Johnson podría tener que decepcionar a mucha gente en su primera semana.

Quienquiera que sea designado, será visto como un primer signo de qué tipo de primer ministro pretende ser Johnson, especialmente cuando se trata del brexit.

Sabemos que la opción preferida de Johnson es un acuerdo con Europa que es significativamente diferente del que negoció May. También está comprometido a irse sin un acuerdo el 31 de octubre, si es necesario.

Aquí hay dos preguntas clave: primero, ¿qué tan diferente tiene que ser ese acuerdo? En segundo lugar, ¿qué tan comprometido está él con salir sin un acuerdo?

La amplia coalición de Johnson incluye personas que fueron consistentemente leales al enfoque más suave de May con respecto al brexit y, en contraste, algunos de los euroescépticos más duros del Partido Conservador. Tiene mucho talento para elegir y la formación de su nuevo gobierno se seguirá de cerca, tanto en Londres como en Bruselas.

Sin embargo, todo esto podría ser académico. No es ningún secreto que May ha dejado un lío político detrás de ella. Este concurso de liderazgo y el gran alboroto de la campaña de Johnson ha sido un poco de distracción. Puede que haya un nuevo equipo, pero Johnson irá a Downing Street para enfrentar muchos de los mismos problemas que May.

No tiene mayoría en la Cámara de los Comunes. Su partido está dividido amargamente respecto al brexit. La nación está perdiendo confianza en los políticos y en las instituciones políticas. El opositor Partido Laborista está preparado para derribar a Johnson y forzar una elección general. Y los europeos, con quienes espera negociar un nuevo acuerdo, confían mucho menos en Johnson que en May.

Puede suceder que después de elegir una figura tan divisoria -- para algunos, Johnson encarna los peores aspectos de un partido político aborrecido por una buena parte de la población-- los conservadores se encuentren luchando en una elección adelantada con un líder que enajena a un gran número de las personas que en 2016 votaron por permanecer en la UE. Y recuerda, esa victoria estuvo lejos de ser categórica.

Entonces, después de que se encuentre con la reina para recoger su corona (no literalmente), Johnson tiene trabajo por delante. El niño que soñaba con ser primer ministro podría descubrir en el primer día que es un líder más débil que su antecesora. Gracias a Dios, el parlamento levantará sesiones por el verano este viernes y no regresará sino hasta septiembre.