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Política

Exclusivo: se calienta la investigación sobre las filtraciones en la Corte Suprema de EE.UU. al pedir los registros telefónicos de varios de sus empleados, una medida sin precedentes

Por Joan Biskupic, -CNN-

(CNN) -- Los funcionarios de la Corte Suprema de Estados Unidos están intensificando su investigación y búsqueda de la fuente de la filtración del borrador de la opinión que anularía el fallo Roe vs. Wade sobre al aborto, tomando medidas para exigir a los funcionarios judiciales que proporcionen registros de teléfonos móviles y firmen declaraciones juradas, según han dicho a CNN tres fuentes con conocimiento de los esfuerzos.

Al parecer, algunos secretarios están tan alarmados por las medidas, en particular por las repentinas solicitudes de datos de teléfonos móviles privados, que han empezado a estudiar la posibilidad de contratar a un abogado externo.

Los movimientos del tribunal no tienen precedentes y son el acontecimiento más sorprendente hasta la fecha en la investigación sobre quién podría haber proporcionado al medio de comunicación Politico el borrador de opinión, que publicó el 2 de mayo. La investigación ha intensificado las ya elevadas tensiones en la Corte Suprema, donde la mayoría conservadora está dispuesta a hacer retroceder medio siglo de derechos de aborto y protecciones de la privacidad.

El presidente de la Corte Suprema, John Roberts, se reunió en grupo con los secretarios judiciales tras la filtración, según ha sabido CNN, pero no se sabe si se han producido entrevistas individuales sistemáticas.

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Los abogados ajenos al tribunal que han tenido conocimiento de las nuevas investigaciones relacionadas con los detalles de los teléfonos móviles advierten de una posible intromisión en las actividades personales de los secretarios, independientemente de cualquier revelación a los medios de comunicación, y dicen que pueden sentir la necesidad de obtener un abogado independiente.

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"Es lo que harían personas en situación similar en prácticamente cualquier otra investigación gubernamental", dijo un abogado de apelaciones con experiencia en investigaciones y conocimiento de las nuevas exigencias a los secretarios judiciales. "Sería hipócrita que la Corte Suprema impidiera a sus propios empleados acogerse a esa protección legal fundamental".

Fuentes familiarizadas con los esfuerzos en curso dicen que el lenguaje exacto de las declaraciones juradas o el alcance previsto de esa búsqueda de teléfonos celulares –contenido o período cubierto– aún no está claro.

La Corte Suprema no respondió el lunes a una solicitud de CNN para que se hicieran comentarios relacionados con los registros telefónicos y las declaraciones juradas.

Los jóvenes abogados seleccionados cada año para ser secretarios judiciales están considerados como la élite de la élite. (Cada juez suele contratar a cuatro.) En su inmensa mayoría son graduados de las facultades de Derecho de lo que se conoce como a Ivy League –un grupo de las universidades privadas más prominentes en la costa este de EE.UU.– y han trabajado anteriormente como secretarios de destacados jueces de tribunales de apelación de Estados Unidos.

Su servicio de un año se convierte en un billete de oro para acceder a prestigiosos bufetes de abogados, altos cargos gubernamentales o cátedras. Seis de los nueve jueces actuales de la Corte Suprema son antiguos secretarios judiciales.

El creciente escrutinio de los secretarios judiciales refleja la preocupación de Roberts por la ruptura de la confidencialidad y las posibles nuevas filtraciones. También sugiere que el tribunal no ha tenido éxito hasta ahora en determinar la fuente de Politico.

Roberts ordenó la investigación el 3 de mayo, designando a la alguacil del tribunal, Gail Curley, para dirigir la investigación.

Curley, abogada y coronel retirada del Ejército, supervisa a los policías del edificio. Es más conocida por el público como la persona que canta "¡Oyez! ¡Oyez! Oyez!" al comienzo de las sesiones de argumentos orales de los jueces. La oficina del alguacil no suele examinar los detalles de los datos de los teléfonos móviles ni emprender una investigación a gran escala del personal.

La investigación se produce en el momento más ajetreado del mandato anual del tribunal, cuando las relaciones entre los jueces ya son tensas. Asistidos por sus secretarios judiciales, los jueces están presionando para cumplir los plazos de finales de junio, tratando de resolver las diferencias en los casos más difíciles, todo ello con nuevas presiones y el escrutinio público.

Debido a las protestas y a los problemas de seguridad relacionados con el caso del aborto en Mississippi, el edificio del tribunal está rodeado por una valla de 2 metros y barreras de hormigón.

Los jueces también están resolviendo un litigio en Nueva York que podría, según sus comentarios durante los argumentos orales en noviembre, ampliar la protección de la Segunda Enmienda para los propietarios de armas. Además, el tribunal podría rebajar aún más el muro de separación entre la Iglesia y el Estado al permitir ciertas oraciones en las escuelas públicas y exigir vales públicos para las instituciones religiosas.

El borrador de la opinión en el caso Dobbs v. Jackson Women's Health Organization fue escrito por el juez Samuel Alito y parecía tener una mayoría de cinco jueces para revertir completamente la decisión de Roe v. Wade, de 1973. Ese fallo histórico hizo que el aborto fuera legal en todo el país y reforzó otros elementos de la privacidad que no están expresamente recogidos en la Constitución. Algunos profesores de Derecho han advertido que si se revoca el fallo Roe, la decisión de la Corte Suprema de 2015, que declara el derecho constitucional al matrimonio entre personas del mismo sexo podría estar en peligro.

La publicación del borrador de la opinión de Alito ya ha provocado protestas a nivel nacional y un duelo de esfuerzos legislativos estatales: para eliminar aún más todas las opciones para una mujer que quiera interrumpir un embarazo o, alternativamente, para tratar de salvaguardar el acceso de las mujeres al aborto cuando sea posible.

Pero es difícil para cualquiera que esté fuera del edificio saber si el proyecto de Alito sigue siendo mayoritario en un tribunal fuertemente dividido en cuanto al derecho al aborto y dividido en cuanto a la rapidez con la que se invierte el precedente.

Escrutinio de un grupo secreto

Mientras los jueces continúan con sus negociaciones secretas, el escrutinio de los secretarios judiciales se intensifica.

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Los secretarios han sido el objeto de gran parte de las especulaciones externas sobre quién podría haber revelado el borrador, pero no son los únicos que han tenido acceso. La opinión de Alito, etiquetada como un primer borrador y fechada el 10 de febrero, habría sido distribuida a los nueve jueces, a sus secretarios y al personal clave dentro de las cámaras de cada juez y de algunas oficinas administrativas.

Si se siguió la tradición, las copias se enviaron electrónicamente y, por separado, fueron impresas y entregadas en mano a las cámaras por los ayudantes de la mariscal de la Corte.

Otros empleados relacionados con las nueve cámaras habrían tenido algún acceso al dictamen. CNN no pudo verificar ese número, pero antiguos empleados del tribunal dicen que el documento podría haber sido enviado a través de los canales regulares a casi 75 personas. No se sabe si los funcionarios del tribunal están pidiendo a los empleados que forman parte del personal permanente, más allá de los asistentes jurídicos de un año, sus registros telefónicos.

Los teléfonos móviles, por supuesto, contienen una enorme cantidad de información, relacionada con las interacciones personales, que incluye todo tipo de contenidos, textos e imágenes, así como las aplicaciones utilizadas. No se sabe si se buscarán detalles relacionados únicamente con las llamadas o si se producirá una recuperación más amplia.

Existen protocolos para manejar los borradores de las opiniones del tribunal, que circulan electrónicamente en un sistema cerrado, separado del sistema informático que los jueces y los empleados del tribunal utilizan para comunicarse con personas ajenas al tribunal. Sin embargo, es posible que salgan del edificio copias impresas incluso en circunstancias inocentes, ya que el trabajo se lleva a casa.

Los funcionarios del tribunal son reservados incluso en tiempos normales. No se ha hecho público ningún informe sobre el progreso de la investigación de las filtraciones, y no está claro si alguna vez se hará público algún informe de la misma.