El director del Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA) emitió una grave advertencia pidiendo urgentemente el cese inmediato de los bombardeos en la zona de la central nuclear de Zaporiyia, controlada por Rusia, debido al riesgo de un "accidente nuclear".
Se ha creado una "situación grave" después de que la infraestructura eléctrica que alimenta la ciudad de Enerhodar -que alberga a los operadores de la central y a sus familias- haya sido destruida por los bombardeos, según ha declarado el Director General del OIEA, Rafael Mariano Grossi, en un comunicado.
Los bombardeos han provocado un apagón total —sin agua corriente, electricidad ni alcantarillado— en la ciudad.
"Dado el aumento y la continuación de los bombardeos, hay pocas probabilidades de restablecer la energía fiable fuera del sitio a la ZNPP, especialmente porque los bombardeos dañan continuamente y repetidamente la infraestructura de energía", dijo Grossi.
Sin confianza en el restablecimiento de la energía externa, el operador está considerando la posibilidad de apagar el único reactor que queda en funcionamiento, lo que significa que toda la planta dependería totalmente de los generadores diesel de emergencia, explicó.
Grossi volvió a reclamar la creación de una zona de protección de la seguridad nuclear.
"Es la única manera de garantizar que no se produzca un accidente nuclear", dijo.
Ucrania y Rusia han intercambiado repetidamente acusaciones sobre quién es el responsable del bombardeo. CNN no ha podido verificar las afirmaciones de ninguno de los dos gobiernos.