El secretario general de las Naciones Unidas (ONU), António Guterres, dijo que está abierto a la idea de entregar ayuda a Siria a través de cruces fronterizos adicionales, además del cruce de Bab al-Hawa —el único corredor de ayuda humanitaria aprobado por las Naciones Unidas entre Turquía y las zonas del norte de Siria controladas por los rebeldes.
“Por supuesto, estaría muy feliz si el Consejo de Seguridad pudiera llegar a un consenso para permitir el uso de más cruces, ya que también necesitamos aumentar nuestra capacidad para realizar operaciones en Idlib desde Damasco”, dijo Guterres. “Muchos agencias de socorro que no dependende de la ONU ya están entregando ayuda a través de otros cruces", añadió.
Este martes, la ONU dijo que el cruce de Bab al-Hawa estaba “realmente intacto”, pero el camino que conduce al cruce había sido dañado por el terremoto de este lunes, lo que obstaculizó los esfuerzos de socorro.
El primer convoy de las Naciones Unidas, compuesto por seis camiones, cruzó este jueves al norte de Siria a través del cruce de Bab al-Hawa, según Guterres. Dijo que “Naciones Unidas ha hecho todo lo posible para apurar su respuesta”, y agregó que “hay más ayuda en camino, pero se necesita mucha más, mucho más”.
“El terremoto se produjo cuando la crisis humanitaria en el noroeste de Siria ya era grave, con necesidades en su nivel más alto desde que comenzó el conflicto”, dijo Guterres, describiendo la extrema necesidad de llevar ayuda humanitaria urgente a Siria. “Somos tristemente conscientes de que aún no hemos visto el alcance total del daño y de la crisis humanitaria que se desarrolla ante nuestros ojos”.
Guterres dijo que la ONU lanzaría haría un llamamiento urgente para el apoyo de los donantes a Siria a principios de la próxima semana. Agregó que ya ha liberado US$ 25 millones del Fondo Central de Emergencia de la ONU para Siria, y las agencias de la ONU y otras ONG nacionales e internacionales están evaluando sus requisitos iniciales de financiación durante los próximos tres meses.
“Estos recursos serán utilizados por la comunidad humanitaria para ayuda crítica: albergue, salud, nutrición, agua, saneamiento, higiene, educación, protección y servicios de apoyo psicosocial”, explicó Guterres.
Guterres también dijo que Martin Griffiths, el subsecretario general de las Naciones Unidas para asuntos humanitarios y coordinador de ayuda de emergencia, ya se encuentra en Turquía para evaluar las áreas afectadas por el terremoto. Griffiths también visitará Gaziantep, Alepo y Damasco para evaluar las necesidades de ayuda.