(CNN) – El estado de Florida se atribuyó el traslado de migrantes desde El Paso, Texas, hacia Sacramento, California, en vuelos privados, asegurando que se trató de una reubicación voluntaria, según un comunicado que envió a CNN la directora de Comunicaciones de la División de Manejo de Emergencias de Florida (FDEM, por sus siglas en inglés), Alecia Collins.
“La reubicación voluntaria de Florida es precisamente eso: voluntaria. A través del consentimiento verbal y escrito, estos voluntarios indicaron que querían ir a California. Un contratista estuvo presente y se aseguró de que llegaran de manera segura hasta una ONG externa. La ONG en cuestión, Caridades Católicas, es utilizada y financiada por el gobierno federal”, indicó el comunicado.
En respuesta a las preguntas de CNN sobre los dos vuelos privados que transportaron un total de 36 migrantes a Sacramento, la FDEM envió una lista de “Programas de reubicación” anteriores que se han implementado. Y en esa línea añadió: “Desde los alcaldes de tendencia de izquierda en El Paso, Texas, y Denver, Colorado, la reubicación de quienes cruzan ilegalmente la frontera de Estados Unidos no es nueva. Pero, de repente, cuando Florida envía a inmigrantes indocumentados a una ciudad santuario, se trata de detención ilegal y de un secuestro”.
Por su parte, autoridades de El Paso, Texas, respondieron a los vuelos de migrantes y dijeron que “no participaron ni fueron consultados sobre esta actividad”.
El alcalde de El Paso, Oscar Leeser, le dijo a CNN que la ciudad no traslada a los solicitantes de asilo a ningún otro lugar y desconoce las circunstancias que rodearon los vuelos recientes.
“No se consultó con la ciudad, ni se compartió ninguna información con nosotros”, señaló Leeser en un comunicado. “Nunca usaríamos a personas para un truco político, ni transportaríamos a nadie a donde no quisieran ir”.
La semana pasada, “individuos que representan a un contratista privado” se acercaron a los migrantes en un centro en El Paso, según la organización sin fines de lucro Sacramento ACT. A los 16 migrantes de Venezuela y Colombia se les prometió ayuda para obtener trabajo, ropa y vivienda si aceptaban el transporte a un centro de migrantes diferente, informó la organización. Luego, el grupo fue llevado en autobús a Nuevo México, transportado en avión a California y finalmente dejado frente a una iglesia de Sacramento, este viernes.
Por su parte, la Fiscalía General de California vinculó los vuelos de migrantes con el estado de Florida y su contratista, Vertol Systems Company Inc., una compañía de aviación que también está detrás de los vuelos a Martha’s Vineyard en el otoño de 2022.
La Fiscalía señaló que el mismo avión, fletado por Vertol, es responsable de un segundo vuelo a Sacramento el lunes.
California abre investigación
La semana pasada, las autoridades de California anunciaron una investigación sobre los vuelos que llevaron a varias personas a Sacramento en un avión privado “sin ningún tipo de arreglo o cuidado previo”, como dijeron el gobernador Gavin Newsom y el fiscal general Rob Bonta.
Funcionarios del estado de California se reunieron el sábado con el grupo, que tenía documentación “que pretendía ser del gobierno del estado de Florida”, dijo Bonta.
El fiscal general investiga el incidente y “evalúa posibles acciones penales o civiles contra quienes transportaron u organizaron el transporte de estos migrantes vulnerables”, afirmó Bonta en un comunicado.
Según el gobernador Gavin Newsom, se investigarán las circunstancias en torno a quién pagó el viaje del grupo y si los migrantes fueron engañados con falsas promesas.
En medio de la crisis humanitaria en la frontera sur de Estados Unidos, los gobernadores republicanos y funcionarios locales de los estados del sur también han trasladado en autobús a migrantes a Nueva York y otras ciudades más liberales.
Muchos de los que se dirigen a Estados Unidos realizan largas y peligrosas travesías con la esperanza de encontrar una vida mejor y más segura para sus familias. Según los expertos, la gente emigra huyendo de la violencia, en busca de oportunidades económicas o para reunirse con sus familiares.
“California y la comunidad de Sacramento recibirán a estas personas con los brazos abiertos y les ofrecerán el respeto, la compasión y la atención que necesitan tras una experiencia tan angustiosa”, declaró Bonta.
Con información de Melissa Alonso y Nouran Salahieh.