(CNN) –– La fecha del juicio contra el expresidente Donald Trump en la ciudad de Washington por el caso federal de interferencia electoral se aplazó debido a las apelaciones pendientes sobre el poder de la presidencia, de acuerdo a una nueva orden judicial en el proceso.
El comienzo del juicio se había fijado originalmente para el 4 de marzo, pero el caso se suspendió mientras un tribunal federal de apelaciones evalúa los argumentos de Trump acerca de que la inmunidad presidencial lo debería proteger del procesamiento debido a su rol como mandatario antes del asalto del 6 de enero de 2021 en el Capitolio de Estados Unidos. El tribunal de apelaciones aún no se ha pronunciado sobre la cuestión de la inmunidad.
Si bien la situación solo se oficializó con la orden de la jueza de distrito de EE.UU. Tanya Chutkan este viernes, cada día resultaba menos probable que el juicio empezara en marzo. En enero, el equipo de Trump se quejó de que los fiscales seguían presentando documentos judiciales a pesar de la pausa del caso, y Chutkan advirtió al equipo del fiscal especial Jack Smith que no debían continuar sin su permiso.
El retraso representa una victoria para el expresidente, quien ha buscado repetidamente demorar el juicio hasta después de las elecciones presidenciales de 2024. Sin embargo, aún no está claro si logrará posponerlo hasta luego de la votación en noviembre.
Dos asesores de Trump le dijeron a CNN que el equipo del expresidente seguirá presionando para lograr más retrasos y que su punto clave en la reciente orden judicial es que Chutkan no ha fijado una nueva fecha para el juicio.
Las partes, e incluso los funcionarios judiciales, esperaban un retraso, especialmente por los días que han pasado sin que el Circuito de Apelaciones de Washington se pronuncie sobre la inmunidad presidencial. El tribunal recibió el caso hace casi un mes y puede tardar semanas, si no meses, en pronunciarse. Es probable que el fallo de ese ciurcuito sea apelado ante la Corte Suprema.
Como parte de su orden de este viernes, Chutkan también dijo que los posibles miembros del jurado, a quienes se les había pedido que comparecieran ante el tribunal la próxima semana para completar un cuestionario escrito, ya no tendrían que hacerlo.
“El tribunal establecerá un nuevo cronograma cuando se devuelva el mandato”, explicó Chutkan.
Trump enfrenta cuatro cargos de subversión electoral en una acusación fiscal especial Jack Smith, incluido el de conspirar para defraudar a Estados Unidos y obstruir un procedimiento oficial. El expresidente se ha declarado inocente.
Se esperaba que el caso federal contra Trump fuera el primero en comenzar entre las acusaciones penales que enfrenta.
El fiscal de distrito de Manhattan, Alvin Bragg, llevará a Trump a juicio a finales de marzo por presuntamente falsificar registros comerciales para ocultar pagos de dinero a Stormy Daniels para mantener su silencio.
El equipo de Trump, así como los expertos legales, consideran que el caso del pago por silencio es mucho más débil que los demás, dijeron a CNN los asesores del expresidente. La campaña siente que enfrentar primero el juicio de Bragg les ayudará a preparar el escenario para su argumento central de que estos juicios son puramente políticos y están diseñados para perjudicar sus posibilidades en una elección general, agregaron los asesores.
Los procedimientos judiciales en su caso sobre el manejo de documentos encontrados en Mar-a-Lago después de la presidencia se centran actualmente en el uso de pruebas clasificadas en el caso. Está programado un juicio para finales de mayo, pero es posible que deba aplazarse debido a esos procedimientos.
La jueza del caso de documentos de Mar-a-Lago, Aileen Cannon, designada por Trump en el sur de Florida, dejó abierta la posibilidad de revisar el cronograma del juicio en una audiencia el 1 de marzo.
El juez estatal que preside el caso de conspiración electoral de Trump para 2020 en Georgia aún no ha fijado una fecha para el juicio.
Alayna Treene, de CNN, contribuyó a este informe.