Lewis Hamilton celebra tras ganar el Gran Premio de Gran Bretaña.

(CNN) – Lewis Hamilton ganó su carrera de casa, el Gran Premio de Gran Bretaña, este domingo, en una emocionante victoria que amplió su récord y en la que el liderato cambió de dueño varias veces sobre una pista encharcada por la lluvia en Silverstone.

El siete veces campeón del mundo hizo retroceder los años para conseguir su primera victoria en una carrera desde el Gran Premio de Arabia Saudita de 2021 y su novena victoria en Silverstone, todo un récord, lo que desató las delirantes celebraciones de la multitud local, mientras un Hamilton entre lágrimas desfilaba por la pista, sosteniendo la Union Jack en alto desde su monoplaza.

Y fue su viejo rival, Max Verstappen, contra quien Hamilton luchó para asegurarse la victoria, ya que el piloto de Red Bull recortó la ventaja del británico en un final dramático, pero no pudo superarle.

Para Hamilton ganar su último Gran Premio de Gran Bretaña con Mercedes –el equipo con el que dominó el deporte durante tanto tiempo– parecía un “cuento de hadas”, dijo el director del equipo Toto Wolff a la cadena Sky Sports después de la carrera.

Lewis Hamilton celebra en el podio tras ganar el Gran Premio de Gran Bretaña.

Ningún otro piloto ha ganado tantas carreras en el mismo circuito como Hamilton en Silverstone, lo que consolida el legado del británico de 39 años en esta pista y como el piloto más laureado de la historia de este deporte.

El propio Hamilton parecía abrumado por la emoción también, abrazando a su padre en la meta y diciendo a Sky Sports que “no podía dejar de llorar”.

“Ha sido desde 2021, simplemente levantarme cada día intentando luchar, entrenar, poner mi mente en la tarea y trabajar tan duro como pueda con este increíble equipo”, dijo. “Esta es mi última carrera aquí en el Gran Premio de Gran Bretaña con este equipo, así que quería ganar esto tanto para ellos.

“Definitivamente ha habido días entre 2021 y aquí en los que no sentía que fuera lo suficientemente bueno o si iba a volver a estar donde estoy hoy, pero lo importante es que tuve a grandes personas a mi alrededor que siguieron apoyándome”, añadió.

El público local tenía muchas esperanzas puestas en un triunfo británico en esta carrera, ya que por primera vez desde 1962 había un 1-2-3 británico en la parrilla de salida de Silverstone.

Hubo un 1-2-3 británico en la parrilla de salida.

George Russell salió desde la pole, por delante de su compañero de equipo Hamilton, segundo, y del McLaren de Lando Norris, tercero. Russell mantuvo el liderato durante el primer tercio de la carrera hasta que Hamilton rebasó a su compañero de equipo.

Poco después, los dos Mercedes se salieron de la pista por la escapatoria, lo que permitió a Norris adelantar a Russell y acelerar para adelantar también a Hamilton.

Mientras llovía a cántaros en Silverstone, Norris parecía tener el liderato asegurado, pero Hamilton empezó a darle caza poco a poco, mientras Russell se veía obligado a abandonar la carrera por un problema técnico y Verstappen empezaba a perseguir a los líderes.

Una vez que la lluvia desapareció, los pilotos entraron en pits para cambiar sus neumáticos de nuevo y Norris se equivocó ligeramente en su marca, añadiendo un par de segundos extra a su parada, y Hamilton capitalizó para tomar la delantera.

En las últimas vueltas de la carrera, Verstappen adelantó a Norris para ponerse segundo y comenzó a perseguir a Hamilton, pero finalmente se quedó sin opciones.