1 de 14
| Las cabinas teléfonicas rojas son un ícono británico, pero con la llegada de los teléfonos inteligentes pasaron prácticamente al olvido y se volvieron obsoletas.
2 de 14
| Las cabinas fueron diseñadas por Giles Gilbert Scott para un concurso realizado en 1924 y se encuentran en todo el país, desde las esquinas de muchas calles de Londres hasta pueblos remotos.
3 de 14
| Las legendarias cabinas son muy buscadas por los turistas para tomarse selfies, pero desde hace unos 15 años han caído en el abandono y muchas están hoy muy deterioradas. Reconociendo su estatus de culto, la compañía de telecomunicaciones British Telecom lanzó una campaña para adoptar esas cabinas, en la que las 'vende' por solo 1 libra esterlina (menos de 2 dólares), para que personas y empresas la restauren y monten ahí un negocio.
4 de 14
| Edward Ottewell y Steve Beeken 'adoptaron’ dos cabinas en uno de los muelles de la ciudad de Brighton y las restauraron para vender gafas de sol y sombreros. Al ver que funcionaba, formaron una empresa para adoptar 500 cabinas telefónicas en todo el país.
5 de 14
| El londinense Umar Khalid transformó una de esas míticas cabinas en un próspero café llamado Kape Barako.
6 de 14
| Khalid dice que su cabina es fotografiada con mucha frecuencia, lo que la ha convertido en una estrella en redes sociales como Instagram y Facebook.
7 de 14
| Varias cabinas también han sido restauradas y convertidas en pequeñas librerías o comunidades de intercambios de libros. Esta, por ejemplo, está ubicada en Cheshire.
8 de 14
| En un suburbio del sureste de Londres, un grupo de vecinos se unió para transformar una de esas cabinas en una diminuta pero exitosa biblioteca, llamada Lewisham Micro Library.
9 de 14
| Muchas otras cabinas telefónicas de Londres se han convertido en cajeros automáticos.
10 de 14
| Cuando las cabinas están ubicadas en lugares de atracción turística también son transformadas en centros de información para viajeros. Es el caso de esta cabina en el condado de Derbyshire, en el centro del país.
11 de 14
| En zonas más rurales algunas cabinas se han transformado en centros de información sobre flora y fauna local.
12 de 14
| El café internet más pequeño de Escocia está ubicado en esta cabina telefónica roja de Aberdeenshire.
13 de 14
| La empresa Pod Works reconvirtió varias de las cabinas rojas de Londres en miniestaciones de trabajo para viajeros, provistas de monitores, impresoras, enchufes y hasta máquina de bebidas calientes.
14 de 14
| “Las cabinas telefónicas han evolucionado, todavía proveen acceso a servicios de telecomunicaciones, pero es claro que la naturaleza de esos servicios ha cambiado dramáticamente”, dice Nigel Linge, profesor de Telecomunicaciones de la Universidad de Salford y autor del libro 'The British Phonebox' (Las cabinas telefónicas británicas).
Internacional
Árabe
