Jairo: “Borges me dijo que era un iluminado”

(CNN Radio Argentina) -- El cantante argentino Jairo estuvo este domingo junto a Dante Gebel en CNN Radio e hizo un repaso de su extensa carrera de 50 años en la escena artística. “Yo componía y cantaba canciones, y veía como se abrían las puertas”, dijo el hombre que fue considerado como "la mejor voz de la Argentina" por Mercedes Sosa.

El compositor admitió que, a pesar de su amplia trayectoria, todavía se incomoda durante los primeros minutos en escena: “Me cuesta mucho al principio, es un momento muy importante porque tenés la sensación de que te vas a olvidar de todo lo que preparaste durante meses”.

Respecto a sus inicios, Jairó contó que fue Luis Aguilé quien lo llevó a transformarse en cantante: “Tenía 19 años, trabajaba como ilustrador y con un amigo componíamos canciones, cuando le llevamos algunas a Aguilé me dijo que le gustaban mucho pero no eran su estilo, e insistía que las tenia que cantar yo”, dijo. Y agregó: “Me propuso hacer un disco en su estudio en Madrid. Fue un mecenas extraordinario y me abrió una gran puerta”.

“No estaba en mis planes cantar en Francia, cuando cantas en España lo lógico es que después se siga con la carrera en Latinoamérica, nadie se va a Paris. Pero tuve la propuesta de irme con Susana Rinaldi al Teatro Olympia en París, y fue una oportunidad extraordinaria; fue un éxito inesperado. Luego me propusieron grabar el primer disco y fue una sorpresa, hicimos la versión en francés y en español y los programadores de las radios aceptaron la versión en castellano, después entendí que mi francés era penoso”, señaló el cantante de manera muy divertida.

Oriundo de la provincia de Córdoba, Mario Rubén González -como se denomina en realidad el cantante argentino- contó cómo llegó a llamarse Jairo: "Aguilé me propuso empezar de cero y prácticamente ser otro, él me decía que necesitaba un nombre corto, atractivo y sonoro”, y agregó que fue el escritor Jorge Luis Borges quien le señaló que su pseudónimo “era un nombre con mucha luz” y que le dijo que “era un iluminado”.

El artista, que recibió la condecoración ´Caballero de las artes y las letras’ en Francia, dijo que la premiación “me honró muchísimo porque la medalla me la entregó el ex presidente Raúl Alfonsín”.

Jairo además contó que era amigo del músico argentino Astor Piazzolla, y que con él participó de la primera visita que Diego Armando Maradona hizo con Boca Juniors a Francia: "Me llamaron para hacer el puntapié inicial a Maradona y lo llamé a Piazzolla para que me acompañe; fue un orgullo”.

Entre varias anécdotas de vida, Jairo señaló que Charles Aznavour lo eligió especialmente para acompañarlo en una gira de regreso, y que conoció a Julio Cortázar en un cumpleaños de María Elena Walsh: “Cuando abri la puerta estaba él, me quede sin palabras”.

A pesar de confesar que aún no hizo un balance sobre el éxito de su carrera profesional, Jairo advirtió que se siente muy querido por el público: “La gente es muy generosa conmigo, el cariño en la calle es fantástico”. Y añadió: “Algún día haré un balance y seguramente será mucho mas de lo que pensé de niño que podía lograr”.

Casado con Teresa, Jairo habló del amor que los sigue uniendo hace décadas: “Encontré a la persona, nos llevamos muy bien, somos complementarios”. Además, resaltó la gran relación que tienen sus cuatro hijos y la unión familiar que lograron a través de los años: “Disfruto mucho de la relación que tienen nuestros hijos entre sí, los hermanos tienen una relación extraordinaria, y es un elemento a nuestro favor de lo que hicimos juntos”.

El artista estuvo por comenzar una extensa gira para celebrar sus cinco décadas en la música, pero la situación sanitaria mundial puso freno en su destino: “Los 50 años se cumplieron el año pasado, hice una actuación el 15 de febrero en el Teatro Colón pero llegó la pandemia”. Aunque señaló que utilizó ese tiempo para culminar con la grabación de su último disco.

En cuanto a la relación que tuvo su música con los recitales por streaming, Jairo sostuvo que “me gustó mucho como experiencia, pero al principio estaba muy solo y me costaba mucho porque no tenía el aplauso de la gente. Por suerte, la productora hizo algunos zoom con parte del público que había asistido y ahí vi para quién había cantando, personas de un montón de países. Se me mezclaba el miedo porque desconoces a quién le cantás y después el regocijo de conocer para quién lo estas haciendo”, finalizó.