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CNN Radio Argentina

El relato de Rodrigo Abd, fotoperiodista que cubrió la guerra en Ucrania

Por CNN Radio Argentina, Guillermo Panizza

(CNN Radio Argentina)  - Rodrigo Abd, fotoperiodista de Associated Press, visitó los estudios de CNN Radio para hablar sobre su cobertura de la guerra en Ucrania.

"Estuve cinco semanas en Ucrania, pero como es muy difícil llegar y tenía que ir a Kiev directo, me llevaba dos días ir hasta ahí. Tuve que ir a New York a buscar un chaleco antibalas, unos GPS que se usaban para que te localicen ahí, y un teléfono satelital ante la duda que se cortaran las comunicaciones. Después pasé a Polonia, y entre viaje y viaje estuve un mes cubriendo", contó en diálogo con Aire de Mañana, de Guillermo Panizza.

"Siempre intentamos mantener la calma, porque es la única forma de poder hacer un trabajo consistente, y tenemos que estar muy concentrados en enviar información todo el tiempo. El ritmo es agotador, pero en esos momentos necesitás estar muy enchufado. Mandamos fotos al servicio todo el tiempo. Te queda esa sensación de desolación, de ver un lugar destruido, de ver familias conmocionadas y traumadas. He visto gente saliendo de los sótanos después de estar un mes escondido a oscuras, y tenían una necesidad de vernos y contarnos todo. Ni siquiera les importaba que no entendiéramos el idioma, querían contar lo que les había ocurrido", relató el profesional.

Es inevitable que algunas situaciones, algunas imágenes, te queden en la cabeza.

Sobre algunos de los sectores en los que tuvo que cubrir, destacó que "las afueras de Kiev son como el conurbano. Había un río y un puente que separaban, pero los rusos estuvieron ahí estacionados más de un mes. Eso implicó que la gente que no podía salir se metiera en sótanos, se escondiera o hasta colaboraba con el edificio que ocupaba sus lugares. Fue muy traumático para todos los chicos, porque fue también el lugar de la batalla, entre los rusos que ocupaban y los ucranianos que querían recuperar su lugar".

Rodrigo explicó que "a diferencia de un medio más tradicional, la agencia de noticias tiene varios equipos en una cobertura. Estábamos en un hotel en Kiev, donde nunca nos faltó nada. Estaba todo muy preparado, y llegamos a ser como 15 entre camarógrafos y demás. Tenemos en AP televisión, fotografía y texto. A la noche nos juntábamos todos, porque había toque de queda, y ahí planificábamos qué hacer al día siguiente. Muchas veces era a ciegas, porque de noche en el hotel se escuchaban los bombazos".

Además, el fotoperiodista relató que "lo más fácil de cualquier cobertura es apretar el botón de la foto cuando la tenés al frente. Lo difícil es todo lo otro. Cómo llegar a tal lugar, por ejemplo, tratando de comunicarte con la gente del lugar y con las dificultades del idioma, porque la mayoría allá no habla inglés".

Conocí a colegas de Haití, Venezuela, México, de todas partes. Estuve con leyendas del fotoperiodismo, comía con gente que cubre estos temas hace décadas y había colaboración.

Respecto a los momentos más difíciles, Abd indicó que "en Ucrania no me pasó tanto lo de tener miedo porque estaba restringido el frente de batalla después de la muerte de cinco periodistas, que fue el momento más caótico. Una vez que pasó todo eso hubo restricción para llegar al frente, y de ahí en más, hasta hace unos días, no murió ningún periodista. En otros momentos he sentido un miedo grande, como en la guerra civil en Siria. Cada situación es distinta y son diferentes los miedos también".

"Siempre me pareció que lo que contamos que le pasa a los demás es tanto más complicado que lo que nos pasa a nosotros, entonces trato de que esa cosa del periodista adolorido, sufrido, no pase... En mi caso no lo necesito tampoco porque soy fotoperiodista, son formatos que te quitan ese peso", comentó.

Para el cierre, explicó que si bien "es cierto que hay millones de celulares y las cámaras son cada vez mejores", los fotoperiodistas "cumplimos otro trabajo que no solo tiene que ver con el registro de lo que pasa. Nosotros hacemos una interpretación de lo que vemos, le damos forma, contamos una historia que va más allá de ese día".


El rol de la familia

Rodrigo relató que "el apoyo familiar es clave. Con Lorena, la mamá de mi hija Victoria, nos conocimos en un diario en el 99'. Siempre estuvo cerca de todo lo que uno tiene que atravesar, de esos viajes largos y de esa presión de juntar todo rápido, de perderse cosas familiares y demás".

Sobre la comunicación, señaló que "había toque de queda a las 19, entonces había que estar adentro sí o sí. Y afuera hacían 10 grados bajo cero, entonces nos quedábamos. Con Lorena hablaba a la noche, a veces trataba de hablar con mi hija, y también con mis viejos".

Por último, explicó el lógico temor de quienes quedan en el país, explicando que "uno se imagina las cosas muy diferentes, porque lo que vos escuchás es que no hay comida, y cuando estás ahí no es tan así, porque estás ocupado en otras cosas y porque los periodistas somos privilegiados porque no nos va a faltar un plato".