LONDRES (CNN) — El presidente ecuatoriano, Rafael Correa, dijo que está considerando cuidadosamente la petición de asilo político de Julian Assange y sugirió que los cargos contra el fundador de WikiLeaks podrían ser parte de una persecución política.
“No podemos aceptar una persecución política por las ideas expresadas por Assange”, dijo Correa a periodistas este jueves. “Si ha cometido algún tipo de crimen a través de WikiLeaks, entonces que esos cargos se den a conocer. Es muy extraño que los cargos actuales sean de una naturaleza completamente diferente”.
Assange busca evitar la extradición a Suecia por acusaciones de violación y otros delitos sexuales. Los fiscales suecos han dicho que fue arrestado in absentia.
En el 2010, Assange fue detenido en Gran Bretaña porque las autoridades suecas querían interrogarlo por las denuncias. Las condiciones para su libertad bajo fianza incluían la obligación de permanecer en casa de un simpatizante a las afueras de Londres.
Pero este martes, el fundador de WikiLeaks se dirigió a la embajada de Ecuador en Londres para solicitar asilo.
Este jueves, la Policía Metropolitana dijo que Assange violó las condiciones de su libertad bajo fianza, por lo que será arrestado si sale de la embajada.
Dos mujeres lo han acusado de agredirlas sexualmente durante una visita en agosto de 2010 a Suecia. Assange argumenta que las acusaciones son represalia por la divulgación de cables secretos del Departamento de Estado realizada por su organización.
Wikileaks, que facilita la difusión de información obtenida de fuentes anónimas, ha publicado cerca de 250,000 cables diplomáticos estadounidenses confidenciales, lo que causó vergüenza para el gobierno estadounidense y otros actores. También ha publicado cientos de miles de documentos clasificados sobre los conflictos en Irak y Afganistán.
Assange se refugió en la embajada cinco días después de que el Tribunal Supremo del Reino Unido rechazó una apelación contra su extradición, su última opción en los tribunales británicos.
Las autoridades británicas se han reunido con las autoridades ecuatorianas, pero ninguna información se ha publicado sobre esas reuniones.
No está claro cuándo Ecuador tomará una decisión sobre la petición de Assange. “Estamos analizando los diferentes aspectos de su solicitud de asilo y nos tomaremos el tiempo necesario y vamos a tomar una decisión en el momento adecuado”, dijo Correa.
Algunos de los partidarios de Assange creen que si es enviado a Suecia sería vulnerable a una extradición a Estados Unidos, donde se teme que podría enfrentar la pena de muerte.
“Ecuador es un país que rechaza la pena de muerte y no podemos arriesgarnos a que una persona que nos ha pedido asilo enfrente la pena de muerte por razones políticas”, dijo Correa.
Paul Whiteway, un exdiplomático de la Oficina de Exteriores británica, quien ahora dirige la sede en Londres de Independent Diplomat, un grupo de asesores sin fines de lucro en el ámbito diplomático, dijo que Assange se encuentra en una situación muy difícil.
“Habrá negociaciones entre las autoridades ecuatorianas y el gobierno británico, la Oficina de Relaciones Exteriores, para encontrar una manera de resolver esta disputa”, dijo Whiteway.
Pero a pesar de las discusiones a puerta cerrada, dijo, una solución diplomática no necesariamente podría ocurrir pronto.
“Es claramente una situación desagradable (para los británicos). Pero yo no creo que sea especialmente satisfactorio para el gobierno de Ecuador tampoco”.
El lenguaje de Correa ha sido hasta ahora muy cuidadoso, dijo Whiteway, y está claro que tanto Ecuador como Gran Bretaña reconocen la sensibilidad del tema.
“Ecuador también debe tener en cuenta la actitud del gobierno de Suecia, porque los suecos también deberán estar muy preocupados por lo que ha sucedido”, dijo.
Kevin Gallagher y Nima Elbagir contribuyeron con este reporte