(CNN) — Los primeros testimonios del mortal tiroteo de Aurora, Colorado pintaron un panorama surrealista de lo que ocurrió dentro de la sala del cine la madrugada de este viernes cuando se estrenaba la última película de Batman.

Varios testigos dijeron que un hombre irrumpió en el teatro a través de una puerta de salida cerca de la parte derecha de la pantalla de cine. Estaba todo vestido de negro, llevaba chaleco antibalas y una máscara antigases.

Trey Freeman, quien estaba dentro del teatro, dijo que primero pensó que el hombre pudiera ser parte del espectáculo. El hombre lanzó una granada de gas lacrimógeno cerca de donde él estaba sentado, pero no se sintió peligro hasta que la granada estalló.

Luego, sin decir una palabra, el hombre arrojó una segunda granada de gas, dijo Freemanen un video publicado en YouTube.

“Se veía tan tranquilo cuando lo hizo, fue muy atemorizante”, dijo.

El hombre de negro esperó hasta que los dos botes de gas explotaron, dijo Freeman. Entonces comenzó a disparar.

Disparó al aire y luego apuntó su arma contra la multitud, dijo Dante Harris, otro testigo, que apareció en el video.

“Pensé que no habría manera de salir de allí sin recibir un disparo”, dijo Freeman.

Al menos 12 personas murieron y 59 quedaron heridas durante la presentación de la nueva película de Batman en el cine en Aurora, en Colorado.

Un video tomado con un teléfono celular afuera de las puertas del complejo mostró a espectadores en pánico pidiendo ayuda o buscando a sus amigos.

Se pudo ver como un hombre caminaba, ayudado por alguien, con la parte trasera de su camiseta cubierta de sangre. Una mujer examinaba su cuerpo, para comprobar si tenía heridas.

Alex Milano, dijo a la televisora KUSA TV, afiliada de CNN, que estaba en el cine, en una sala contigua a donde ocurrió el tiroteo.

También estaba viendo la misma película y había una escena en la cinta donde ocurría un tiroteo.

“Los estallidos venían del lado derecho de la sala. El humo llenó todo el cine, era muy intenso y nadie podía ver”, dijo.

Confundido en un primer momento, Milano se dio cuenta de la gravedad del incidente cuando fue testigo de que algo atravesaba las paredes, presumiblemente balas.

“Vi los agujeros en la pared”, dijo.

Algunas personas en su sala quedaron heridas, y las alarmas en el edificio empezaron a sonar.

En el exterior, Milano habló con una mujer que estaba dentro de la sala donde ocurrió el incidente. Lo que ella escuchó “sonaba como una locura para mí”, dijo.

La mujer describió a un hombre de 1.80 de estatura, que dio una patada a la puerta y llevaba un chaleco antibalas y un casco, así como gafas negras. La mujer le dijo a Milano que vio al atacante caminando lentamente por las escaleras, disparando.

Una escena se le quedó muy grabada: un oficial de policía llevaba a una niña en sus brazos. La niña no se movía.