(CNN) — Un tribunal encontró a Gu Kailai, esposa de un dirigente del Partido Comunista, culpable del asesinato de un hombre de negocios británico el año pasado, informó una fuente de la familia.
Gu fue condenada a muerte a pesar de que la sentencia fue conmutada para no ser ejecutada, de acuerdo con la fuente.
Ella y un ayudante de la casa fueron juzgados el 9 de agosto por el presunto envenenamiento de Neil Heywood, de 41 años de edad. Cerca del final de los procesos judiciales de ese día, ella dijo de acuerdo con la agencia estatal de noticias Xinhua, “acepto todos los cargos que están por escrito en la acusación”, entre ellos el envenenamiento del británico en un momento en que ella pensaba que la vida de su hijo peligraba”.
En el momento de la muerte de Heywood en noviembre pasado, el esposo de Gu, Bo Xilai, era líder del Partido Comunista en la ciudad sudoccidental de Chongqing.
Bo Xilai era un miembro influyente y controvertido del Buró Político del Partido Comunista, el cual está integrado por un grupo de 25 hombres que gobiernan China. Él está a la espera de su destino después de haber sido cesado de su cargo a principios de este año sin especificarse los motivos; solo le informaron que “incumplió gravemente las normas del partido”.
El ayudante de Gu, Zhang Xiaoju, también fue encontrado culpable en la muerte de Heywood y fue sentenciado a nueve años de prisión, dijo la fuente de la familia.
Ambas sentencias fueron anunciadas en el Tribunal Popular de Hefei, ciudad en el este de China donde se realizó el juicio, a unos 1,250 kilómetros al este de la escena del crimen. Se esperaba ampliamente las sentencias de culpabilidad, como lo señaló un informe del Departamento de Estado de Estados Unidos, citando que en el Tribunal Supremo de China los fiscales tenían 99,9% de condenas en los primeros niveles del 2010 y segundo en las cortes penales.
Las autoridades chinas habían dicho previamente que Gu y su hijo tuvieron “conflictos” con Heywood “sobre intereses económicos” y ella estaba motivada para matar al británico por temor a la seguridad de su hijo Bo Guagua.
Bo no hizo comentarios sobre la confesión de su madre o “detalles del caso”. Sin embargo, un día antes del juicio dijo a CNN que había presentado una declaración de un testigo al equipo de defensa.
La Fiscalía aseguró que Gu había invitado a Heywood a Chongqing. Los dos bebieron alcohol y té en una habitación de hotel, donde el británico se embriagó y vomitó, dijo un fiscal. Cuando Heywood pidió agua, Gu preguntó por Zhang, que esperaba afuera, para que entrara a la habitación.
Fue entonces cuando Gu obtuvo el cianuro que le dio Zhang, después el ayudante llevó a Heywood a la cama y fue cuando le habría dado el veneno en la boca al británico, de acuerdo con un fiscal.
La Fiscalía dijo que Gu tiró cápsulas de narcóticos en el suelo para que pareciera que Heywood usaba drogas. En la puerta de la habitación pusieron el letrero de “no molestar”, dijo un empleado del hotel.
Al final del proceso en la corte, Gu habló de las preocupaciones por su hijo.
“Durante los últimos días de noviembre, sufrí una crisis después de enterarme que mi hijo estaba en peligro”, dijo Gu, de 53 años. “La tragedia creada por mí no sólo se extendió a Neil, sino también a varias familias”.
Su presunto ayudante en la conspiración, Zhang, también admitió una parte del crimen y dijo que quería decir “lo siento” a la familia de la víctima.
“Espero que el tribunal me pueda dar la oportunidad de tener una nueva vida”, dijo Zhang en la corte, de acuerdo a Xinhua. “Realmente sé que hice mal”.
Steven Jiang contribuyó con este reporte