(CNN) — Rebekah Brooks, quien fuera alta ejecutiva de la compañía de medios de comunicación de Rupert Murdoch, magnate de un emporio internacional de noticias, es acusada de hackeo telefónico y de corrupción.
Brooks, amiga del primer ministro británico David Cameron y protegida de Murdoch, fue acusada en julio de tres cargos de conspiración para interceptar comunicaciones.
El cargo más explosivo en su contra es el de espiar ilegalmente el correo de voz de la desaparecida colegiala británica Milly Dowler, quien más tarde fue encontrada asesinada.
La furia de los británicos por la noticia de que el teléfono de la chica desaparecida había sido hackeado, forzó a Murdoch a cerrar el periódico dominical News of the World, que Brooks editaba.
Las acusaciones de que la gente que trabaja para Murdoch había hackeado los teléfonos de cientos de personas generaron múltiples investigaciones policiales, dos investigaciones parlamentarias y otra respaldada por el gobierno.
La lista de víctimas de los presuntos hackers incluye a algunas de las celebridades más grandes del mundo, entre ellas Angelina Jolie, Brad Pitt, Jude Law, Paul McCartney y la estrella de futbol Wayne Rooney, así como víctimas de la delincuencia, el terrorismo, políticos y otras celebridades.
Decenas de personas han sido acusadas, incluyendo otro editor de News of the World, quien más tarde se convirtió en jefe de comunicación de Cameron.
Andy Coulson, ex colaborador de Cameron, y otros seis hombres comparecieron ante la corte por primera vez el mes pasado.
Después de una breve audiencia, se les ordenó no tener contacto entre sí, notificar a la policía antes de viajes internacionales y comparecer de nuevo en la corte el 26 de septiembre.
En la corte se confirmaron sus nombres y direcciones, no se habló de súplicas.
Cinco periodistas de News of the World y el investigador privado en el centro del escándalo comparecieron con Coulson.
Coulson se convirtió en un importante colaborador de Cameron después de dejar el periódico por los arrestos de hackeo en 2006; el escándalo impactó en el corazón de la clase política británica. Cameron se convirtió en primer ministro en 2010.
Coulson dimitió como director de comunicación de Cameron el año pasado cuando la policía lanzó una segunda investigación sobre llamadas ilegales en el emporio de Murdoch en Gran Bretaña.
Coulson siempre ha negado que sabía del hackeo telefónico. Ha dicho que él renunció porque tenía la responsabilidad general de todo lo que pasó cuando era editor.
Los fiscales alegan que hubo más de 600 víctimas de la piratería telefónica entre el año 2000 y 2006.
La investigación y la notoriedad pública ha perjudicado a News Corp y a Murdoch, quien renunció a la dirección de administración en julio, además se distanció del negocio que le dio fama y fortuna.
Jonathan Wald y Dan Rivers contribuyeron con este reporte.