(CNNMéxico) — Cientos de familiares de víctimas de las FARC se concentraron este domingo ante la Fiscalía de Bogotá para denunciar al menos 300 delitos de la guerrilla, después de que ésta asegurara al gobierno colombiano que ya habían entregado a todos los rehenes.
Voceros de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) dijeron en Cuba el 16 de septiembre que ya no tenían rehenes en su poder. La afirmación dejó sin aliento a los familiares.
Una madre de las convocadas en la capital colombiana aseguró que a su hijo lo retuvieron el 1 de septiembre de 2011 y que ya habían pagado 200 millones de pesos al comandante del frente que presuntamente retiene al joven.
Clara Rojas, rehén de las FARC junto con la excandidata presidencial Ingrid Betancourt durante seis años en 2002 y miembro de la fundación contra el secuestro País Libre, respalda a los familiares y confía que entre todos se construya la verdad y la justicia.
“Nosotros tenemos una cifra de entre 400 y 600 secuestrados en últimos 10 años. Pero en lo corrido del año 2012 tenemos registros de 17 secuestros, aparte del funcionario de una multinacional chilena y los cuatro contratistas chinos, lo que sumaría 22 personas en poder de las FARC”, explicó Rojas a la agencia EFE.
La cita estuvo enmarcada en el primer Encuentro Nacional de Víctimas de las FARC, convocado por varias organizaciones no gubernamentales en la céntrica plaza bogotana de Bolívar para recopilar “pruebas” que pongan al grupo armado contra las cuerdas en lo que ellos consideran delitos impunes.
El objetivo es trasladar esas denuncias a las conversaciones de paz, que mantendrán desde este miércoles el gobierno con la guerrilla, para que atiendan sus reclamos, según informó Herbin Hoyos, líder del programa de radio Las voces del secuestro.
Durante las primeras cuatro horas del encuentro, el Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) de la Fiscalía había registrado 314 nuevas denuncias de secuestros, desapariciones y reclutamientos forzosos, según declaraciones de Hoyos a la agencia EFE.
El periodista denunció que la guerrilla había amenazado a las familias y ordenaron paros armados, en los que suele prohibir el desplazamiento de vehículos, en vías de zonas de influencia, como Caquetá, Putumayo, Huila, Cauca y Norte de Santander.
Entre los que denunciaron su caso, se encontraba Elvia Londoño, madre de Yesid López, un joven que presuntamente fue secuestrado en 2002 en una vereda de Florencia (Caquetá, sur) por el Frente 14 de las FARC y del que no ha sabido nada. “Le pido a las FARC que me devuelvan a mi hijo, que dejen de mentir porque sí tienen secuestrados”, dijo en alusión a la rotunda afirmación de la guerrilla de que no hay más cautivos en su poder.
Sigifredo López, el único superviviente del secuestro de 12 diputados regionales en 2002, después de que sus 11 compañeros fueran asesinados, y protagonista de una investigación archivada sobre su supuesta responsabilidad en los hechos, también estaba presente en el evento.
“La guerrilla que ahora ejerce de negociadora de paz debe responder por las personas desaparecidas y secuestradas hace muchos años que muy probablemente han sido asesinadas”, indicó el abogado.
López dijo que la ausencia de la sociedad civil y de las víctimas en los diálogos de paz implica que “la mesa de paz está coja y es un proceso ilegítimo”.
El inicio de las conversaciones entre el gobierno del presidente colombiano, Juan Manuel Santos, y un equipo de la guerrilla está previsto para este miércoles en Oslo, Noruega. La llegada de los negociadores se ha retrasado, pero ambas partes han asegurado que no afecta a la cita del día 17. Las conversaciones continuarán semanas después en La Habana, Cuba.
La trayectoria de la guerrilla colombiana acumula 47 años, y 2,000 civiles y 250 militares secuestrados, según cifras del gobierno. En marzo, las FARC anunciaron el fin del secuestro y la entrega de los últimos 10 rehenes uniformados. El gobierno interpretó el mensaje como el inicio del fin de la guerrilla.
Con información de Fernando Ramos.