Lápida donde yacen los restos mortales de Lori Stodghill y de sus hijos no nacidos.

Por Ben Brumfield and Kyung Lah, CNN

(CNN) – La vida empieza con la concepción, según dice la Iglesia Católica, pero en una demanda por un homicidio culposo en Colorado, Estados Unidos, un centro hospitalario católico ha dicho precisamente lo opuesto.

Un feto no es legalmente una persona hasta que nace, argumentaron los abogados del hospital en la defensa. Y ahora la decisión estaría en la Corte Suprema.

Lori Stodghill tenía 28 semanas de embarazo cuando fue a la sala de emergencias del Hospital St. Thomas More en Canon City vomitando y con dificultades para respirar, según muestra un documento de la corte.

La mujer sufrió un paro cardíaco en el vestíbulo del hospital.

“Lori me miró, y luego su cabeza cayó a su pecho”, dijo su esposo, Jeremy Stodghill.

Murió a los 31 años. Sus gemelos no natos fallecieron con ella. Fue el 1 de enero de 2006.

Stodghill, solo criando a su hija de 2 años, demandó al hospital y a su dueño, Catholic Health Iniciatives, por el homicidio culposo de los tres.

Después de dos años de litigio, los abogados de la defensa y los doctores presentaron un argumento que impactó al viudo.

Dijeron que bajo la ley estatal, un embrión no es una persona hasta que nace con vida, de acuerdo a los documentos de la corte. Los gemelos Stodghill murieron antes de ser sacados del cuerpo sin vida de su madre.

“Ni siquiera los pude cargar”, dijo Jeremy Stodghill. “Tengo una foto de la autopsia. Eso es todo lo que tengo”.

La corte estuvo de acuerdo con ese argumento, y Stodghill perdió la demanda. La corte también dictó sentencia contra Stodghill en el caso de su esposa por otras razones legales.

El hospital y los doctores lo demandaron por tarifas legales con valor de 118.000 dólares e intentaron embargar su salario, según dice un documento legal.

Los abogados ofrecieron olvidar los pagos si Stodghill retiraba su demanda. Él se negó y se declaró en bancarrota para evitar tener que pagar la deuda, que dice que no puede costear pues lucha por mantener a su hija Libby, de ahora 9 años.

Stodghill ha solicitado que la Corte Suprema de Colorado revise su caso, y también pidió la opinión de la Iglesia Católica.

Representantes de los obispos católicos de Colorado se negaron a comentar sobre los procedimientos legales, pero dijeron que revisaran el litigio y las prácticas de Catholic Health Iniciatives “para asegurar el testimonio fiel de las enseñanzas de la Iglesia Católica”.

Representantes de Catholic Health Iniciatives no accedieron a hablar con CNN frente a cámara, pero dijeron en un comunicado: “En este caso, como organizaciones católicas, cumplimos las enseñanzas morales de la Iglesia”.

Stodghill tiene un tatuaje en su pecho con las huellas de los pies y los nombres de sus hijos no nacidos junto con las palabras “nuestros hijos”.

Él quiere que la iglesia y el estado los vean de la misma forma.