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Por Leonardo Peralta

(CNNMéxico) — Este martes se realiza el cónclave de cardenales que elegirán al sucesor de Benedicto XVI y su secreto se extiende hasta los dispositivos electrónicos.

La ordenanza que rige el proceso de elección del papa (Universi Dominici Gregi) posee un apartado con disposiciones para garantizar la confidencialidad del proceso. Los cardenales “deben abstenerse de mantener correspondencia epistolar, telefónica o por otros medios de comunicación con personas ajenas al ámbito del desarrollo de la misma elección”, indica.

En un claro propósito de mantener la secrecía milenaria en el proceso de elección del jefe de la Iglesia católica, la legislación prohíbe “absolutamente que, bajo ningún pretexto, se introduzcan en los lugares donde se desarrollan las operaciones de la elección o, si ya los hubiera, que sean usados instrumentos técnicos de cualquier tipo que sirvan para grabar, reproducir o transmitir voces, imágenes o escritos”, incluidos smartphones, tabletas o computadoras.

Además, toda persona ajena que participe del proceso (personal de servicio, médicos y guardias de seguridad) deberá evitar la comunicación con los cardenales, y  los servicios de seguridad tendrán la obligación de asegurar que, “no sean instalados dolosamente medios audiovisuales de grabación y transmisión al exterior”.

¿Crees que alguno de los participantes del cónclave sería capaz de romper el secreto?

Algunos de los cardenales que tienen cuentas de Twitter son:

Hasta pronto, Twitter 

Antes de entrar en la Capilla Sixtina, los cardenales que participan en la elección del nuevo papa escribieron sus últimas tuits.

“Último tuit antes del conclave: Que nuestro Padre escuche y de respuesta con amor y misericordia a todas las oraciones y sacrificios ofrecidos para un resultado fructífero”, escribió el cardenal sudafricano Wilfrid Napier.

El cardenal Timothy Dolan, de Nueva York, tuiteó solo un par de horas antes de que iniciara el cónclave. “Saludos otra vez desde Roma, la eterna ciudad, la ciudad de los santos Pedro y Pablo”, escribió.