CNNE 94953c3b - 120704114742-higgs-boson-4-horizontal-gallery

(CNN) — Justo a tiempo para el cumpleaños 134 de Albert Einstein los científicos tuvieron una excelente noticia acerca de cómo funciona el universo.

El verano pasado, los físicos anunciaron que habían identificado una partícula con las características del esquivo bosón de Higgs, la llamada Partícula de Dios. Pero, como suele ocurrir en la ciencia, tenían que hacer más investigaciones para estar más seguros.

El jueves, los científicos anunciaron que la partícula que se detectó en el Gran Colisionador de Hadrones, el más potente acelerador de partículas del mundo, se parece aún más al bosón de Higgs.

La noticia la dieron en la Conferencia Moriond en La Thuile, Italia, los científicos que trabajan en el Gran Colisionador de Hadrones y de los experimentos de Muon Solenoid. Estos dos detectores buscan patículas inusuales que resultan del choque entre sí de partículas subatómicas a alta velocidad.

“Los resultados preliminares con el conjunto de datos completo de 2012 son magníficas y para mí está claro que se trata de un bosón de Higgs, aunque todavía nos queda un largo camino por recorrer para saber qué tipo de bosón de Higgs es”, dijo en un comunicado Joe Incandela, portavoz para el experimento Compact Muon Solenoid.

Los científicos han analizado los datos dos veces y media más datos de los que tenían cuando anunciaron por primera vez los resultados del bosón de Higgs el pasado 4 de julio.

El bosón de Higgs se asocia con la razón de que todo en el universo - de los seres humanos a los planetas y las galaxias - tienen masa. La partícula es un componente de algo llamado campo de Higgs, que impregna nuestro universo. No es una analogía perfecta, pero Brian Greene, físico teórico de la Universidad de Columbia, ofreció esta comparación el año pasado.

“Se puede pensar en ello como una especie de melaza que es invisible, pero aún estamos todos inmersos en ella”, dijo Greene. “Cuando partículas, como los electrones tratan de moverse a través de la melaza, experimentan una resistencia, la resistencia es lo que nosotros, en nuestro mundo, pensamos que es la masa del electrón”.

El electrón no tendría masa si no fuera por esta “sustancia”, por el campo de las partículas de Higgs. Así, sin el bosón de Higgs, no estaríamos aquí en absoluto.

La evidencia de que el bosón de Higgs existe realmente es importante para la comprensión actual de cómo funciona el Universo. Pero los científicos no saben si la partícula encontrada es la predicha por el modelo estándar de la física de partículas. Ese modelo es la mejor explicación que hay para lo que ocurre a escalas más pequeñas que el átomo, pero todavía tiene muchos espacios vacíos en ella, y hay otras teorías que van más allá de ese modelo.

Es posible que el bosón de Higgs encontrado en el Gran Colisionador de Hadrones pueda caber en esas otras teorías. Para averiguarlo, los científicos deben estudiar qué tan rápido decae el bosón en otras partículas, y ver cómo la tasa de descomposición se acumula contra las predicciones.

El Gran Colisionador de Hadrones está situado en un túnel de 27 kilómetros cerca de la frontera franco-suiza, y es operado por el CERN, la Organización Europea de Investigación Nuclear.

El colisionador, que vale unos 10,000 millones de dólares, estableció un récord en el 2012 por la cantidad de energía lograda en las colisiones de partículas: 8,000 millones de electronvoltios (TeV). El LHC cerró el mes pasado por mantenimiento y actualizaciones y entrará en operaciones de nuevo en 2014.

La noticia del bosón de Higgs no sólo coincide con el cumpleaños de Einstein, sino también con Pi Day, el 14 de marzo. Estos eventos no son del todo ajeno. Incandela dijo a CNN el año pasado que el número pi aparece en los cálculos del Colisionador de Hadrones. Por ejemplo, los científicos tienen que utilizar pi cuando calculan cómo contribuye a la masa de una partícula el que algunas de ellas se transformen en otras partículas y luego vuelvan a unirse para formar la partícula original.