El creciente número de explosiones causa ansiedad entre la población.

Damasco, Siria (CNN) — El mundo observa la situación en Siria transformarse ante sus ojos en medio de un aumento en los bombardeos y acusaciones de uso de armas químicas, pero decidir qué hacer no es una tarea fácil.

En la capital siria, hay menos explosiones y se ven menos aviones cazas que anteriormente, pero las calles están tan vacías como siempre tras ataques recientes.

El creciente número de explosiones causa ansiedad entre la población, debido en parte a que no está claro cuál de las partes es responsable.

El gobierno culpa a “terroristas”, un término que usa para referirse a los rebeldes que tratan de derrocar al presidente Bachar al Asad. Los rebeldes acusan al gobierno de bombardear su propia capital en búsqueda de simpatía.

“Todos son nuestros hijos y es triste. Somos todos sirios matándonos unos a otros”, lamentó Umm Wasim, quien presenció la última tragedia: una bomba que mató al menos a 13 personas en Damasco este martes.

La situación es igualmente frustrante para los civiles sirios que esperan y desean la intervención internacional. Estados Unidos ha sostenido que hay evidencia de que gas sarín ha sido usado como arma química en pequeña escala en el conflicto. Parece que la línea ha sido cruzada, pero la respuesta de la comunidad mundial no ha sido clara.

El presidente Barack Obama dijo este martes que Estados Unidos esperará hasta que tenga más detalles sobre la evidencia de armas químicas antes de definir su estrategia en Siria.

Obama se refirió al uso de armas químicas como la “línea roja”, pero Washington no ha cambiado mucho su aproximación al conflicto desde que se conoció el hecho.

Estados Unidos no sabe aún “dónde fueron usadas, cuándo fueron usadas, quién las usó”, dijo Obama. “Cuando esté tomando decisiones sobre la seguridad nacional estadounidense y el potencial para tomar acción adicionales en respuesta al uso de armas químicas, quiero estar seguro de tener los hechos”.

Este martes, el opositor Ejército Libre Sirio informó que fuerzas rebeldes aseguraron lo que creen que es un arma química no detonada, supuestamente desplegada por el régimen en Idlib. El material tratará de ser sacado del país para su análisis.

Una explosión en la capital causó heridas al menos a 70 personas, según la televisora estatal siria, elevando la tensión en el país del Medio Oriente. La televisora calificó el incidente como un “ataque terrorista”.

El estallido supuestamente se originó en un carro bomba estacionado detrás de un viejo edificio del Ministerio del Interior, según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.

En la explosión resultaron heridos miembros del ejército sirio, pero un vocero del Ejército Libre Sirio cree que se trata de una estrategia del gobierno. “Las explosiones son nada más que una farsa montada por el régimen de Asad para rogar por la simpatía de la comunidad internacional en la víspera de la reunión del Consejo de Seguridad de la ONU para discutir el uso de armas químicas del régimen”, dijo.

La explosión ocurre un día después de que el primer ministro sirio, Wael al Halqi, sobreviviera a una explosión contra su vehículo en un vecindario lujoso de Damasco.

La guerra civil siria fue originada en una búsqueda de fuerzas rebeldes por poner fin a cuatro décadas de gobierno de la familia al Asad. Más de 70,000 personas, la mayoría civiles, han muerto en los casi dos años de conflicto.

Con información de Mariano Castillo y Fred Pleitgen.