Por Robyn Curnow y Teo Kermeliotis
(CNN) — De acuerdo con las autoridades de Sudáfrica, el año decisivo para los rinocerontes será 2026, momento en que los magníficos mamíferos estarán cerca de la extinción si persisten los índices de caza ilegal.
El rinoceronte está en peligro de extinción y su población vive amenazada a causa de la caza furtiva. En los últimos años estos animales han sufrido cada vez más ataques. Tan solo en Sudáfrica, desde enero mataron a unos 480 ejemplares, mientras que el año pasado murieron 668, un incremento de casi el 50% en comparación con 2011.
El alarmante incremento en la matanza de rinocerontes tiene que ver con las creencias infundadas en el sureste asiático, donde piensan que sus cuernos sirven para curar toda clase de enfermedades, desde resacas hasta cáncer. Los compradores en países como Vietnam y China están dispuestos a pagar grandes sumas por los remedios tradicionales y esto ha propiciado un lucrativo mercado negro que a menudo está bajo el control del crimen organizado.
“No falta mucho, la extinción del rinoceronte está a la vuelta de la esquina”, advierte Edna Molewa, ministra de Aguas y Asuntos Ambientales de Sudáfrica, país que alberga cerca del 75% de los rinocerontes en el mundo. “Es atemorizante, no quiero que lleguemos a eso”, agrega.
No hay tiempo que perder
Sin embargo, el gobierno sudafricano quiere combatir el negocio ilícito al emprender la venta legal de una parte de su inventario multimillonario de cuernos de rinoceronte. Durante la siguiente Conferencia de las Partes de la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies en Peligro de Extinción (CITES) en 2016, popondrán levantar el antiguo veto al tráfico de cuernos de rinoceronte.
“Creemos que esta será probablemente una de las medidas que en efecto podrán ayudarnos a minimizar el problema”, dijo Molewa a CNN.
Sudáfrica cuenta con un inventario de más de 16,400 kilos de cuernos de rinoceronte. Quienes propusieron la subasta argumentan que la maniobra podría tener un impacto inmediato en la lucha contra la caza furtiva generalizada.
El gobierno cree que puede inundar el mercado al vender los cuernos acumulados para regular el comercio. Los defensores dicen que la medida haría que cayeran los elevados precios actuales, con lo que se eliminarían los incentivos para los cazadores furtivos y finalmente podrían ayudar a prevenir mayores masacres de la especie.
“En realidad hay gente que cree que esto (el cuerno de rinoceronte) les sirve de algo”, dice Molewa, quien subrayó la urgencia de actuar antes de que sea demasiado tarde.
“Tenemos que convencerlos, pero no será tarea fácil”, agrega. “No nos tomará un año, ni dos, ni quince; así que para el tiempo en que sigamos tratando de convencer, movilizar, crear consciencia y educar, nuestra población de rinocerontes podría sufrir un declive mayor”, dijo.
‘Ingenuidad extrema’
Sin embargo, los críticos dicen que la venta única podría terminar por incitar aún más el tráfico al permitir que los compradores crean que el cuerno es un bien legal y que es correcto comprarlo.
Jason Bell, director regional para Sudáfrica del Fondo Internacional para el Bienestar de los Animales, dice que las propuestas son un experimento de “ingenuidad extrema”. Afirma que no es sensato hablar de inundar el mercado con cuernos cuando nadie conoce los alcances de la posible demanda.
“Primero que nada, no entendemos el tipo de transacción en absoluto”, dice. “Nadie tiene idea de cuántos cuernos puede absorber el mercado chino y, de hecho, la mayoría de las personas argumentaría que nunca podrías inundar el mercado basándose en simples matemáticas y en un entendimiento básico de la demanda”, indicó.
“Si no comprendemos los requerimientos, caminamos por un sendero peligros, arriesgado e ilegítimo”, agrega Bell. “El tráfico ilegal no desaparecerá mientras exista la demanda y el introducir cuernos en un mercado desconocido, aparentemente infinito, no hará otra cosa que impulsar la necesidad y por ende, persistirá la caza y el tráfico ilegal”, agrega.
Los opositores también argumentan que las autoridades no podrán regular ese sector. Dicen que la forma correcta de lidiar con la crisis es suprimir la demanda y disipar la idea de que los cuernos de rinoceronte tienen supuestos poderes curativos.
“Los países consumidores tienen que abordar la demanda”, dice Bell. “Eso es lo más importante. Esto se confunde con las propuestas para abrir el comercio”, apuntó.
Molewa reconoce que la maniobra conlleva riesgos, pero dice que la inacción tendría repercusiones negativas tanto para Sudáfrica como para el mundo.
“Todos tenemos que emprender la batalla de convencer a la gente de que esto (los cuernos de rinoceronte) no sirve como ellos creen, pero, ¿será posible antes de 2026? Lo dudo. No podemos quedarnos de brazos cruzados mientras saquean el legado de nuestro país”, agrega Molewa. “No podemos permitir que se debilite la seguridad de nuestro país”, finalizó.