Activistas instan a los Juegos Olímpicos a condenar la ley contra la propaganda de la homosexualidad.

Por Laura Smith-Spark

(CNN) — Una petición de 320.000 firmas contra la postura de Rusia sobre los derechos de los homosexuales, con miras a los Juegos Olímpicos de Invierno 2014, en Sochi, fue presentada este miércoles a los organizadores del evento en Suiza.

En la carta, activistas instan a los Juegos Olímpicos a condenar la ley contra la propaganda de la homosexualidad y urge al gobierno de Rusia a garantizar la seguridad de todos los visitantes, atletas y ciudadanos rusos antes, durante y después del evento.

El presidente Vladimir Putin firmó el mes pasado una ley que prohíbe la discusión pública de los derechos y relaciones homosexuales donde quiera que los niños puedan escucharlas. Grupos rusos e internacionales de derechos humanos han señalado que la ley es altamente discriminatoria.

“Irónicamente, el clamor global está transformando a Sochi en una fabulosa plataforma para que los rusos y los atletas desafíen la ley y hablen de los derechos de los gays”, opina el cofundador y director ejecutivo de la organización que reunió las firmas, All Out, Andre Banks.

La organizadores del evento deportivo dijeron que han recibido garantías de los más altos niveles en Rusia de que la ley no afectará a quienes acudan a los juegos.

Aunque en una reunión celebrada este miércoles con los representantes del All Out, los organizadores de los juegos dicen que pediría un compromiso más firme y firmado de parte del gobierno ruso.

A nivel internacional hay preocupación sobre el impacto de la ley anti-propaganda en los visitantes que lleguen a los juegos.

Bares alrededor del mundo anunciaron un boicot contra el vodka ruso, como forma de protesta contra la ley.

All Out espera que su petición lleve a varios líderes del mundo a presionar a Rusia a cambiar su trato a la comunidad lésbico-gay y a garantizar derechos iguales para todos los ciudadanos rusos, dijo Bonnet.

Este miércoles, la Casa Blanca citó la “falta de progresos” en materia de derecho humanos y sociedad civil, entre otros asuntos, como una de las razones para cancelar la reunión bilateral entre Obama y Putin el próximo mes.

El político ruso Igor Anaskikh, jefe del Comité de Cultura Física, Deportes y Política Juvenil del Parlamento, dijo a la agencia de noticias rusa Interfax la semana pasada que no aplicarían la ley a los visitantes durante los juegos.

“Los Juegos Olímpicos son un evento internacional mayor. Necesitamos ser lo más corteses y tolerantes posibles. Por lo tanto se tomó la decisión de no aplicarla durante los olímpicos”, dijo el político.

Human Rights Watch ha descrito la ley anti-propaganda como “una iniciativa profundamente discriminatoria y peligrosa que empeoraría la homofobia en Rusia”.