Por Lisa Respers France
(CNN) — ¿Recuerdan cuando Lindsay Lohan era la siguiente Ann-Margret? ¿O Elizabeth Taylor? ¿O incluso Marilyn Monroe?
Aunque aún se habla ocasionalmente de esa última comparación —para bien o para mal—, hoy se discute más si “puede mantenerse sobria” y si “puede mantenerse lejos de los problemas” que su talento.
El último periodo de rehabilitación de 90 días al que Lohan se sometió terminó la semana pasada y fue la alternativa a pasar tres meses en prisión por dos condenas por delitos menores y por haber violado los términos de su libertad condicional en un caso de robo.
La Lindsay Lohan de los eternos resurgimientos parece haber reemplazado a la actriz Linsday Lohan. Aunque ha seguido trabajando esporádicamente, esos papeles han sido principalmente de mujeres perturbadas, no muy diferentes a sí misma.
“A estas alturas ya ni siquiera estamos seguros de que siga siendo actriz”, dijo Noah Levy, uno de los conductores del programa The Gossip Table de la cadena estadounidense de televisión, Vh1. “¿Puede Lindsay alcanzar la sobriedad y llevar una vida sana y feliz? Claro que puede. ¿Pero puede ser creíble en un papel que no se parezca a sí misma? No lo sé”.
En The Canyons, la nueva cinta que escribió Bret Easton Ellis (Psicópata Americano) y que dirigió Paul Schrader (Taxi Driver, Toro salvaje), Lohan protagoniza a Tara, una mujer que está pasando por muchas cosas, una de ellas es que a su novio (protagonizado por la estrella porno, James Deen), le gusta invitar a otros hombres y mujeres a tener sexo con ellos.
La cinta de bajo presupuesto tuvo dificultades para encontrar un distribuidor y el diario The New York Times comentó las travesuras que Lohan hace en el plató y que casi le cuestan el papel en la cinta antes de que siquiera iniciara el rodaje.
The Canyons se estrenó esta semana en pago por evento en Estados Unidos y la crítica la atacó salvajemente tanto por la historia como por la actuación de Lohan.
“La actuación de Lohan ciertamente es terrible, pero su decadencia empezó hace mucho”, escribió Eric Kohn, del sitio IndieWire. “The Canyons no tiene nada qué pedirle a la asombrosamente horrenda I Know Who Killed Me de 2007, exageradísima fusión de cine de autor y tropo de cinta de crímenes que se desarmó por todas partes de un golpe”.
Anteriormente, Lohan fue blanco de la crítica por personificar a Elizabeth Taylor en la producción para televisión, Liz y Dick, que trataba sobre el romance que sostuvo la difunta actriz con Richard Burton. “Lohan, quien ha desperdiciado años de promesas y talento para ser una chica parrandera con el rostro hinchado y detenida ocasional, ha recibido tantas oportunidades que es difícil seguirla apoyando”, escribió Ken Tucker en la revista Entertainment Weekly.
Aunque se reporta que le está yendo bien después de la rehabilitación, sus principales proyectos no reflejan el trabajo de alguien que alguna vez estuvo destinada a ser la mejor actriz de su generación. En cambio, Lohan programó una entrevista en la que revelará todo a la reina de los programas de debate, Oprah Winfrey y también participará en una serie documental de ocho episodios en el que se relatará su regreso.
Lohan ni siquiera puede afirmar que es la ingenua más perturbada de Hollywood, porque ese rol ahora le corresponde a Amanda Bynes.
Entonces, ¿en dónde quedó Lohan?
Schrader escribió en un ensayo para el sitio Film Comment que cree que Lohan y la difunta Marilyn Monroe tienen mucho en común.
“Creo que Lohan tiene más talento natural para la actuación que Monroe, pero, al igual que Monroe, su debilidad es que es incapaz de fingir”, escribió. “Siente que debe experimentar un sentimiento para representarlo. Esto lleva a toda clase de caos emocionales, sin mencionar los retrasos en el set y el melodrama”.
“Las llamamos ‘perturbadas’, ‘atormentadas’, ‘un desastre’… pero no podemos darles la espalda. No podemos dejar de mirar. Se nos meten hasta los huesos de una forma en la que los actores controlados no pueden”.
Su padre, Michael Lohan, dijo al programa E! News que cree que su hija será “otra Robert Downey Jr.”, refiriéndose al actor nominado al premio de la Academia quien es famoso por dar un giro total a su vida y su carrera tras varios arrestos y rehabilitaciones.
“Estoy muy, muy orgulloso de lo que ha logrado, hasta dónde ha llegado y lo seriamente que está tomando su sobriedad y su futuro”, dijo.
Así que estaremos observando. Y esperaremos. Pero Lohan ya ha pasado por eso antes.
En 2012, una muy publicitada actuación como invitada en el programa de televisión Glee y unas fotos de la actriz mientras cenaba con el icónico director, Woody Allen, llevaron a que se especulara que la carrera de Lohan estaba a punto de resurgir. Luego se habló de que la actriz se había comportado como “una diva” en el plató de Glee y que al parecer las pláticas con Allen resultaron infructuosas. Un año más tarde, estaba de nuevo en rehabilitación.
Lo único que el público puede tener por seguro es que Lohan está dispuesta a tomar cualquier oportunidad que le den.
“Es muy buena para intentar resurgir”, dijo Levy. “¿Podrá hacer que su carrera sea duradera? El jurado aún no termina de deliberar”.