Por Tricia Escobedo, CNN
(CNN) – Especies, sales de baño, incienso de hierbas.
Parece algo que podrías encontrar en el pasillo de fragancias de Target, pero éstas en realidad son drogas peligrosas disfrazadas de fragancias inofensivas, vendidas en tiendas de conveniencia y en línea.
Nombres inocentes tales como “Mr. Smiley” esconden los peligros.
Nadie conoce en realidad qué hay en las llamadas drogas sintéticas. Los fabricantes juegan al peligroso juego del gato y el ratón con la policía al cambiar constantemente los compuestos químicos de las drogas para burlar las leyes vigentes.
La semana pasada, las autoridades de salud de Colorado anunciaron que, junto con los Centros federales para el Control y Prevención de Enfermedades, están investigando un brote de hospitalizaciones y tres muertes que se cree, son el resultado de fumar marihuana sintética. Y la marihuana real es legal en Colorado
Drew Griffin, corresponsal de CNN, quien tuvo acceso exclusivo a una operación federal en la que se incautaron drogas sintéticas hace algunos meses este año, habló con John Scherbenske, un funcionario de la Administración de Control de Drogas (DEA, por sus siglas en inglés), que supervisa la Sección de Drogas Sintéticas y Productos Químicos.
Scherbenske ayudó a aclarar el asunto de estas drogas fabricadas, y por qué la DEA ha intensificado sus esfuerzos para enfocarse en quienes venden estas drogas y crear conciencia acerca de los riesgos que implican.
Esto es lo que debes saber:
¿Qué son exactamente las drogas sintéticas?
No hay una definición exacta, porque el término se utiliza para describir una amplia gama de productos químicos que cambian constantemente. La marihuana sintética y “sales de baño” son las más comunes de estas drogas, que a menudo se venden como incienso o alimento para plantas. A diferencia de drogas como la marihuana o la cocaína, estas drogas no provienen de plantas; son hechas por el hombre. La marihuana sintética consiste en químicos de droga que se rocían sobre plantas y algunas veces se comercializan como popurrí.
Si bien la metanfetamina y MDMA -también conocida como “éxtasis” o “molly”- son técnicamente drogas sintéticas porque están hechas totalmente de productos químicos, el término “drogas sintéticas” por lo general se refiere a sales de baño y marihuana sintética que a menudo se venden en las tiendas y en línea como artículos para el hogar.
¿Cuándo empezaron a surgir en Estados Unidos y quiénes las usan?
Estas drogas surgieron por primera vez en Estados Unidos alrededor del 2009, según Scherbenske, y han ganado una enorme popularidad, particularmente entre los adolescentes.
“Quienes más hacen uso de estas drogas son adolescentes de 12 a 17 años”, indicó Scherbenske. Cree que son populares entre los jóvenes “porque se tiene un fácil acceso a ellas”, ya sea en una tienda de conveniencia, en una venta de cigarrillos o en línea.
Los adolescentes conocedores de los medios sociales utilizan el Internet para correr la voz acerca de dónde encontrar estas drogas para —tal como lo explica Scherbnske— “discutir los efectos que estas sustancias tuvieron en su cuerpo”.
¿Cuál es el propósito de hacer drogas sintéticas?
Bueno, los fabricantes de drogas sintéticas tienen un fácil acceso a los clientes, al comercializar estas drogas como inofensivos artículos para el hogar. Así, hacen mucho dinero.
“Se trata de un negocio muy rentable”, dijo Scherbenske. “Ha habido incautaciones de millones de dólares; incautaciones de efectivo con estas personas que venden las drogas”.
¿Estas drogas son legales?
Ésta es una pregunta complicada, porque las leyes no pueden mantenerse al día con la variedad de compuestos químicos que existe.
El gobierno federal y por lo menos 38 estados han tomado medidas para prohibir el uso de estas sustancias. Sin embargo, tan pronto como se prohíbe el uso de un compuesto, la estructura molecular del producto sintético se altera y eso “cambia toda la estructura de la droga, por lo que ésta se convierte en una droga legal y ahí vamos de nuevo”, dijo James Capra, jefe de operaciones de la DEA, en una conferencia de prensa en junio, segun la revista Time.
Los minoristas también están tratando de evadir la ley al etiquetar las drogas como “no destinadas al consumo humano”, según Scherbenske, quien trabaja con la DEA.
“Estos minoristas están usando el juego del gato y el ratón”, indicó. “Hay un mercado clandestino que sabe exactamente cómo abusar del producto para lograr el efecto estimulante”.
Todos sabemos que las drogas son dañinas. Entonces, ¿cuál es el alboroto con éstas?
La mayoría de los fabricantes de drogas apuntan a refinar su droga para obtener pureza, aumentar el precio de venta y su margen de ganancias. Sin embargo, con las drogas sintéticas, el principal objetivo de los fabricantes es alterar el compuesto químico para ir siempre un paso adelante de la ley.
“Estados Unidos ha encontrado más de 200 sustancias nuevas en los últimos cuatro años”, explicó Scherbenske. “Nuestros químicos están encontrando múltiples drogas y múltiples compuestos cuando adquirimos estas drogas”.
Y eso significa que no hay un estándar cuando se trata de estas drogas.
“Cuando compramos las sustancias, y las enviamos al laboratorio, pueden tener un sólo compuesto, o cinco compuestos distintos”.
La combinación de esos compuestos y sus reacciones “es terrible”, dijo Scherbenske.
“No conocemos el efecto que puedan tener a largo plazo en el cuerpo de una persona”.
Emily Bauer pasó de ser una joven normal de 16 años, a estar a punto de morir después de probar un tipo de marihuana sintética empacada como “popurrí”, que compró con sus amigos en una gasolinera. Su familia cree que la droga es lo que le causó varios derrames, los cuales han limitado sus habilidades físicas y mentales.
Las drogas sintéticas también tienen “efectos impredecibles en el comportamiento humano”, según el Dr. Paul Adams, quien trabaja en una sala de emergencias en Miami.
“Ésta es una droga terrible, porque lleva una combinación de metanfetamina, paranoia y agresividad, la LSD, las alucinaciones, y la PCP, la paranoia extrema que experimentas, se combinan en una sola”, explicó Adams.
La policía en Panama City, Florida, reportó dos incidentes violetos vinculados al uso de sales de baño en el 2011. En uno de ellos, una mujer supuestamente trató de decapitar a su madre de 71 años; en el segundo, un hombre que había utilizado sales de baño usó sus dientes para rasgar el asiento trasero de una patrulla.
Eso es particularmente problemático cuando algunos minoristas están comercializando drogas sintéticas como una alternativa más segura y legal.
¿Quién está haciendo estas sustancias?
La mayoría de los químicos que se usan para hacer estas drogas sintéticas vienen de China, según John Scherbenske, de la DEA.
“Ellos envían el producto a granel a Estados Unidos, donde tenemos individuos que toman el producto y lo empaquetan para su distribución al por menor”, explicó.
Según un artículo reciente en la revista Time, las drogas provienen en su mayoría de “laboratorios suburbanos alrededor de las ciudades portuarias de China… desde donde pueden ser fácilmente enviadas a Europa o América del Norte utilizando servicios regulares de mensajería internacional”.
También están disponibles en cantidades más grandes por Internet como “químicos de investigación”, según Time.
La DEA está “en diálogo” con China sobre el problema, dijo Scherbenske, sin dar mayores especificaciones.
“También estamos en diálogo y conversaciones con nuestros homólogos internacionales que enfrentan los mismos asuntos que nosotros en este problema respecto a las drogas”, indicó. “Entonces, una de las formas de enfrentar el problema es a través de la reducción de la demanda y de instruir a las personas que están usando esos productos”.
Así que, ¿quién las vende en Estados Unidos?
Scherbenske dice que las personas están iniciando sus propios negocios para vender estas drogas una vez que ven el potencial de ganancias.
“Y están empezando a organizarse”, agregó. “¿Es esto crimen organizado? No hasta ahora, pero están encontrando formas de evadir nuestras leyes. Están haciendo millones de dólares al encontrar maneras de lavar ese dinero. Ni siquiera sabemos si están pagando impuestos sobre este dinero”.
Estos minoristas incluso han llevado a policías a tribunales para proteger sus negocios: cuatro tiendas demandaron a la DEA en el 2011, asegurando que la agencia federal estaba “obstaculizando su negocio”, dijo Scherbenske.
“No tenemos problema con que la gente venda artículos legítimos. Sin embargo, cuando les vendes puro veneno de ratas a nuestros hijos, sí vamos a expresar nuestro desacuerdo al respecto”.