(CNN) – La pregunta que desesperadamente quisiéramos que nos respondan pudo haberse ido a la tumba con Aaron Alexis: ¿Por qué? ¿Por qué se estacionó en el Navy Yard (complejo naval) en Washington el lunes, entró al Edificio 197, se posicionó en un mirador sobre el atrio y abrió fuego? Las balas que disparó desde arriba cobraron la vida de 13 personas, e hirieron a ocho más.
¿Por qué?
Pero esa no es la única pieza que falta en el rompecabezas. Los investigadores están dedicados a la tarea de armar el motivo, los medios y el método.
“Ningún dato es demasiado sencillo”, indicó Valerie Parlave, del FBI el lunes por la noche. “Queremos obtener toda la información que podamos acerca de sus últimos movimientos, sus contactos y asociados”.
Por ahora, esto es lo que sabemos y lo que no sabemos.
LA MUERTE
Lo que sabemos: El violento tiroteo terminó con la muerte de Alexis, de 34 años.
Lo que no sabemos: Cómo murió Alexis. Las autoridades dicen que murió luego de un encuentro con oficiales de seguridad. No conocemos los detalles aún.
EL MOTIVO
Lo que sabemos: No hubo indicadores de que Alexis tuviera diferencias ideológicas con la Marina, o desacuerdos con alguien en el Navy Yard, según oficial de la policía.
Lo que no sabemos: ¿Fue por razones de pago? Estaba muy frustrado con la compañía que lo contrató para trabajar para la Marina, según un amigo. Alexis aseguró que la compañía no le pagaba una cantidad adecuada luego de regresar de una tarea de varios meses en Japón el año pasado, según Michael Ritrovato, su anterior compañero de habitación. No se sabía con certeza si la razón de la disputa era su salario o gastos. Alexis simplemente pensaba que la compañía le debía dinero y no le había pagado, dijo Ritrovato.
¿UN SEGUNDO HOMBRE?
Lo que sabemos: A lo largo del día, las autoridades dicen que estaban buscando a un segundo hombre. Sin embargo, al final del día, las autoridades dijeron que estaban “seguros” de que Alexis había sido el único responsable. “Hemos agotado todos los medios para eliminar a ese posible último sospechoso”, dijo Cathy Lainer, Jefa de la Policía Metropolitana. “Así que ahora nos sentimos tranquilos al saber que tenemos a la única y exclusiva persona responsable de la pérdida de vidas dentro de la base”.
Lo que no sabemos: En la misma conferencia de prensa, sólo unos minutos antes de que Lainer hablara, el alcalde de Washington, Vincent Gray, volvió turbio el panorama. “Seguimos en busca de la posibilidad de que haya habido otro responsable”, indicó. “Hasta el momento, no tenemos evidencia, ni indicadores de que haya habido otro tirador, aunque aún no lo hemos descartado completamente”.
LAS VÍCTIMAS
Lo que sabemos: Sabemos que 12 personas murieron, 11 en la escena del crimen y una en el hospital. Sabemos que estaban comprendidos entre las edades de 46 a 73 años. Las autoridades dieron a conocer los nombres de siete víctimas el lunes, al final del día. Tres personas más recibieron disparos, pero sobrevivieron. Otras cinco fueron ingresadas al hospital, por heridas y dolores en el pecho, dijo el alcalde.
Lo que no sabemos: Los nombres de las otras cinco personas que murieron. Sabemos que las víctimas eran trabajadores civiles o contratistas militares, pero aún tenemos que saber más acerca de ellos: Qué hacían en el complejo, dónde estaban al momento de los disparos, etc.
SU HISTORIAL
Lo que sabemos: Alexis era un contratista de tecnología informática. Tenía autorización parcial para ingresar, lo suficiente como para trabajar en varias oficinas de la Marina durante el verano. Tenía un carné de identificación para ingresar al Navy Yard. Su jefe dice que el tirador supo bien qué pasos tomar. “Alexis tenía una autorización que fue actualizada en julio, aprobada por el personal militar de servicios de seguridad”, dijo Thomas Hoshko, director ejecutivo de The Experts. “No surgió nada en las búsquedas”.
Lo que no sabemos: Alexis también tenía un “patrón de mala conducta” y un historial de arrestos. Entonces, ¿cómo obtuvo la autorización de seguridad para ingresar? Cade Courtley, quien fue miembro de la unidad especial Navy SEALS, dice que la causa está en que se hizo una mala o incompleta revisión de sus antecedentes. “La mayoría de personas, cuando tienen este comportamiento, reciben una autorización provisional. Eso significa que la revisión de antecedentes no se ha hecho, pero está en proceso”, indicó Courtley. “Alexis pudo haber empezado con una autorización provisional, y se tendría que haber hecho una revisión de sus antecedentes”. Además, Courtley dice que sólo analizar las huellas digitales de Alexis habría mostrado su historial de arrestos. En el 2004, en Seattle, Alexis disparó varias veces a las llantas de un auto durante un altercado sobre construcción cerca del lugar donde vivía. También ocurrió otro incidente con armas en Texas, en el 2010.
SEGURIDAD EN EL COMPLEJO
Lo que sabemos: Alexis se condujo a las instalaciones del Navy Yard el lunes por la mañana con tres armas dentro de su vehículo. Sacó las armas, entró al Edificio 197 y abrió fuego. Tenía acceso al Navy Yard por su trabajo como contratista, y utilizó un pase válido para ingresar.
Lo que no sabemos: Aún para ingresar en vehículo, o caminando a la base, la persona debería presentar credenciales, indicó Mark Vandroff, Capitán de la Marina. El edificio 197 tiene guardias armados en la entrada. ¿Cómo logro Alexis pasar al lado de ellos con las armas? ¿Acaso la reducción de costos afectó la seguridad de la Marina? Ésta es la opinión del representante Mike Turner, Republicano por Ohio y miembro del Comité de Fuerzas Armadas. Él quiere tener una sesión informativa ante el Congreso con el inspector general del Pentágono, respecto a una auditoría de la seguridad de la Marina, la cual dice fue dada a conocer tras el tiroteo del lunes. “Entiendo que el informe del inspector indica que la Marina pudo haber implementado un sistema aún no probado para reducir costos”, dijo Turner. “También me enteré de que posiblemente, varios criminales pudieron haber obtenido acceso restringido a varias instalaciones militares en todo el país a causa de revisiones insuficientes de antecedentes, lo que aumenta el riesgo de nuestro personal militar y trabajadores civiles”.
DEBATE EN CUANTO A LAS ARMAS
Lo que sabemos: El incidente seguramente va a inquietar el a menudo explosivo debate sobre el control de armas. Sin embargo, informes iniciales muestran que Alexis obtuvo su arma principal de forma legal.
Lo que no sabemos: ¿Será que el tiroteo en el Navy Yard cambiará el panorama político? Notables tiroteos durante los últimos años no han afectado mucho las decisiones en Washington. El Presidente Obama impulsó la revisión universal de antecedentes y otras directrices luego del tiroteo en Newtown, Conneticut, para reducir el acceso que los estadounidenses tendrían a armas de fuego, pero esto nunca cobró relevancia. A nivel del estado, la historia es similar. Las exitosas elecciones de destitución de la semana pasada, de dos legisladores de Colorado que respaldaban las nuevas restricciones, estremecieron a todos en el ámbito del control de armas.